Ya había anochecido cuando Noriaki y Jotaro salieron del templo. Todo a su alrededor parecía normal: los grillos cantaban en los matorrales, los búhos ululaban en el bosque cercano y las estrellas brillaban claras en lo alto, como si en minutos anteriores no hubiese habido tormenta, acompañadas por unas tímidas nubes a lo lejos. Parecía una escena digna de alguna fotografía o de un cuadro.
⸺Por aquí. ⸺Dijo Jotaro adelantándose un poco. Noriaki no dijo nada, se limitó a seguir sus pasos detrás suyo por unos cinco metros más, hasta que se encontraron con un objeto cubierto por una sábana oscura, recargado en una cerca. ⸺Hmm... nunca te dije que compré esto, pero supongo que lo comprenderás.
⸺ ¿Comprender? ¿Qué cosa? ⸺Preguntó Noriaki, poco antes de que su pareja descubriera una motocicleta entre clásica y moderna, con un asiento para el conductor y otro para un acompañante, justo detrás de él. Los rines, los escapes y el motor eran cromados en plata, mientras que el resto del cuerpo del vehículo era negro mate. Jotaro le hizo una seña con la cabeza.
⸺Súbete.El pelirrojo no se movió de su lugar. Contempló el vehículo por unos segundos, mientras que Jotaro se ponía sus guantes protectores para después colocarse su casco en la cabeza.
⸺ ¿Qué esperas? ⸺Preguntó. ⸺Hay otro casco, si eso te preguntas.
⸺No es eso... ⸺Dijo Noriaki con voz ahogada.
⸺ ¿Entonces?
⸺Es preciosa. ⸺Admitió con admiración. El moreno ahogó una risita.⸺Yare yare...
Apenas su compañero terminó de prepararse, subió a la motocicleta; después, Jotaro encendió el vehículo, haciendo bramar y ronronear el potente motor.
⸺Sujétate fuerte. ⸺Indicó su contrario.
El pelirrojo no tuvo otra opción que aferrarse al conductor, cuando la motocicleta comenzó a andar y a tomar una velocidad vertiginosa. Las luces de la ciudad se deformaban en destellos vagos y luminosos, al mismo tiempo que Noriaki trataba de vislumbrar como estaba la ciudad: muchas casas y negocios permanecían a oscuras, con tablones en las ventanas y las puertas, propiedades abandonadas y otras más, vandalizadas. Seguro muchas personas habían huído a algún pueblo vecino, estaban en un refugio o en los sótanos de sus casas.
Habían varias cosas que pasaban por su mente durante ese paseo:
En primer lugar, algunas semanas atrás apenas había llegado a la vida de Jotaro y aunque con pesadillas, la cotidaneidad era buena y estable. Vivían como pareja. Más tarde descubriría que esos sueños se relacionaban con experiencias de vidas anteriores, cosas que parecían recordar y que los unían, más allá de la rutina, gracias a Dio y a la Gravedad.
Eso llevaba a Noriaki al segundo punto: su relación con Dio y Pucci lo habían llevado a hacer cosas impensables, como intentar buscar el reencontrarse con Jotaro a través de los diversos reseteos, el intentar dar un final feliz a sus seres queridos, el querer evitar varias situaciones agridulces, el proteger a sus seres queridos... ahora ese era su propósito de existir y gracias al último reseteo, muchas cosas habían cambiado...
Y precisamente, ese era el tercer punto: ese último reseteo le había otorgado cualidades nuevas a Hierophant Green, mismas que podrían compararse con el mismo Made in Heaven... ¿o podrían superarlo? ¿Lo que había sucedido en el edificio se había reescrito? ¿Se había reinterpretado? ¿Quién lo había hecho? ¿Habría sido él mismo?... ¿por eso podría denominársele como una deidad en esa dimensión?Su corazón dio un vuelco violento dentro de su pecho, haciendo que Noriaki diera un grito desgarrador ante la ráfaga de imágenes dentro de su mente. Jotaro se frenó, dando un giro en la motocicleta y casi derribó a su acompañante, aunque se dio cuenta de que se sostenía gracias a los tentáculos de su stand.
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Sweet dreams (are made of this) -Jojo's bizarre adventure-
Fanfiction¿Serán los sueños manifestaciones de deseos reprimidos o ecos de vidas anteriores? Cada noche, Kakyoin Noriaki tiene pesadillas tan reales como para hacerle creer que alguna vez vivió lo soñado; al despertar, el tedio y la rutina le hacen pensar qu...