La Chica del Arco- 10K

ONE

Solo podía correr, por fin salí de el infierno en el que había estado durante un año, pero estaba sola, ese era el precio que tendría que pagar por mi libertad.

Suspiré, tuve que parar durante un segundo, me faltaba el aire.- Bueno, ahora estamos solas tu y yo- Dije hablando con mi arco. Muy bien Eri, no llevas ni  CINCO minutos sola y ya te estas volviendo loca.

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Dos años después

-Vamos Atila- Ordené a mi pequeño Pastor Alemán.

Tenía que rellenar las cantimploras así que nos dirigimos hacia el río, ya casi habíamos llegado, cuando puede ver en la orilla un cadáver tirado. ¿Un zombie?, en ese instante Atila corrió hacia el cuerpo. Vale, no es un zombie, mi perro nunca se arrimaría a uno, así que me acerque a él. Esta herido. Me quite el pañuelo que llevaba en la cabeza he intente hacer un torniquete en su brazo.

Era un chico de mi edad, tenía el el pelo negro, y su piel era muy pálida casi blanca. Atila comenzó a chuparle la cara. El chico empezó a despertarse y sus ojos azules se clavaron en los míos.

-¿Quién eres?- Pregunto intentando moverse.

-Yo no me movería- Apreté mas el torniquete haciendo que se quejase.-Soy Eri, ¿Y tu? 

-Diez mil- Contestó. Menudo nombre

-¿Y que te trae por aquí?- Dije mientras me levantaba.

-Mi equipo y yo nos digiramos hacia california, cruzando el río nos separamos. Bueno, si me disculpas tengo que reunirme con ellos.-Cuando termino empezó ha adentrarse en el bosque.

-¿Y donde se supone que están tus amigos?-Pregunté divertida.

-En Memphis

-Memphis esta por allí- Indique señalando el oeste, se quedo parado, parecía avergonzado.-Te podría acompañar, no quiero otro zombie más rondando por aquí.

Sonrió, ay que me da algo.- ¿Vamos..?- Dije.

Empezamos a caminar, pero no taramos mucho en pararnos, ya que nos topamos con un hombre peinándose, si, todo muy normal, nos miro y siguió a lo suyo.

-¿Donde esta tu socio?- Pregunto Diez mil.

-Telón- Corrigió- lo he visto hundirse.

-¿Has visto a mis amigos?

-Nadaban hacia el oeste- Contestó

-Y... ¿Al tío azul?

-Que es ¿un pitufo?- Dije divertida ,Diez mil me miro serio.

-Se hundio

-¿Estas seguro?- Pregunto

-Tan seguro que ahora mismo le están echando de las puertas del cielo.

-¿Y a Doc?

-Mira tío, no estoy seguro. Oye, y quien es esa, no recuerdo que estuviera en el barco.

-Viene conmigo, conoce esto.- No me dio tiempo a contestar.

-Bueno, pues si lo conoces tan bien, sabrá que hay traficantes de personas.- Tenía razón esto estaba plagado de ellos.- Lo sabía, os propongo esto, yo os acompaño y así nos cubrimos la espaladas.

-Y que hay de ti, porque tendríamos que fiarnos- Dije seria.

De repente empezaron a escucharse gritos a los lejos, nos dirigimos hacia el lugar de donde provenían. Allí había un hombre partido por la mitad.