El comienzo de una tragedia
La historia se remonta a unos meses después del nacimiento de Gypsy, en 1991. Su madre pensó que la niña padecía de síndrome de apnea obstructiva del sueño, una condición que impide respirar mientras se está dormido. Años después, la bebé logró superar la leucemia, aunque quedó atada a varios medicamentos.
Pero 'Dee Dee', la madre, se obsesionó con su cuidado a tal punto que fue fabricándole y prescribiéndole a su propia hija, sin ningún sustento médico, una decena de enfermedadesrelacionadas con problemas genéticos, asma, epilepsia distrofia muscular, entre otras. Fue tal la sugestión aplicada a Gypsy que terminó postrada por voluntad propia en una silla de ruedas y sometida a tratamientos inecesarios, convencida de que era un cúmulo de dolencias andante.
La pequeña fue creando dependencias y su sistema empezó a flaquear. Se le pudrieron los dientes y en ocasiones le costaba respirar por sus propios medios. Dee Dee, lejos de retroceder en su macabra obsesión, le rapaba la cabeza a Gypsy con la excusa de que igual iba a perder el pelo por los tratamientos.
Muchos médicos dejaron de tratar a la niña por encontrar inconsistencias en las versiones de la madre. Pero después del huracán Katrina el plan de Dee Dee se facilitó. Dijo haber perdido la historia clínica de su hija en medio de la tragedia y recibió la solidaridad (y mucho dinero) de los estadounidenses que se conmovieron con la historia.
Solo con sus testimonios y los recursos de terceros, entre ellos muchos vecinos, 'Dee Dee' logró que la niña fuera sometida a varias intervenciones quirúrgicas por problemas de vista y de oído; y le extirparon las glándulas salivales por una “secreción excesiva” de la que solo era testigo ella, pero ¿quién pensaría que una madre inventaría algo así?
Los dólares empezaron a llover cuando se supo que el padre de Gypsy era un alcohólico y drogadicto que la maltrataba y nunca la apoyó. Fundaciones de caridad les regalaron una casa adaptada para la condición de Gypsy e incluso las enviaron a Disneylandia con todos los gastos pagos. Hasta la Fundación Ronald Mc Donald se ofreció para alojarlas.
La historia se cae a pedazos
Este hubiera sido el final feliz para la durísima vida de una joven, con 25 años, que superó las tragedias y enfermedades gracias a la solidaridad y a los cuidados de su madre, pero nadie conocía la verdadera historia.
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Casos Misteriosos
Misterio / Suspenso"Casos Misteriosos" un libro donde se hablará sobre los casos más siniestros, inexplicables y misteriosos. Desde asesinatos hasta muertes inexplicables. Aquí se mostrará el peor lado de la humanidad, el como el cerebro humano puede romperse a tal pu...