Fandom

I can't deny I want your body

Nuestra platica se extendió hasta largas horas de la noche, estaba a punto de dar las 3 de la mañana.
- Priss, creo que ya debemos descansar, no hemos dormido nada prácticamente desde la fiesta de Aaliyah.
- Vale, descansa Mendes. Me acerqué para besarlo en la frente.
Shawn me respondió del mismo modo solo que más perfecto ( es obvio, todo lo que venga de Shawn es perfecto).
- Aguarda cariño.
- Dime. Le respondí un entre bostezos.
- Ha sido la noche más increíble de mi vida.
Le sonrí.
- Shawn ¿te puedo pedir dos cosas?
- Por supuesto que si pequeña.
- Apaga la luz.
Me volvió a ver un poco decepcionado ¿Quizás esperaba continuar la acción?....
La apagó.
- ¿Y ahora? Preguntó.
- Bésame por favor.
- ¿Cómo?
- Bésame y no te detengas por lo que más quieras.
- Lo que tú pidas corazón.

Shawn me tomó entre sus brazos y comenzó a besarme tiernamente, esta vez sería diferente, no puedo ver sus reacciones ni él las mías, pero sin duda la luz apagada me hacía sentir más segura.
Sus manos recorrían lentamente mi cintura, bajando a mis caderas y posteriormente a pompis y muslos.
Yo tenía una obsesión por su espalda y clavículas así que me dedicaba a tocar y besar esas áreas, me parecía exquisito el viaje que recorría de sus clavículas hasta su cuello, su cuerpo comenzaba a chispear, esta vez no lo veía ¡PERO COMO LO SENTÍA!
Me apretaba hacia su cuerpo pero esta vez no lo hacía con fuerza y tan rudo como la primera vez, ahora era yo quien llevaba las riendas y Shawn lo hacía de la manera más satisfactoria y tierna posible, intentaba no lastimarme y eso me agradaba.
Su gloriosa lengua recorría mi cuello, haciendo un paseo hacia mis pechos, esta giraba alrededor de ellos de una manera tan deliciosa que yo ya estaba volviéndome loca. Sentía como escalofríos y mi piel se erizaba conforme a la lengua de Shawn avanzaba ¿hay algo más placentero que esto? ¡NI SIQUIERA COMER!
Mordisqueaba cuidadosamente mis pechos, su tenaz lengua continuaba su paseo, esta vez bajando hacia mi ombligo, provocando que mis entrañas estremecieran, Mendes me besaba sobre los huesos que sobresalen de las caderas, eso me generaba querer entrar en gritos.

¡DEMONIOS! ¡Su lengua está matándome es majestuosa! Mis piernas estaban temblando, Shawn era un Dios, terminó su turno allá abajo, ahora venía el mío, copie un poco sus maniobras y utilizaba mi lengua para recorrer toda su candente piel, olía delicioso tenía su aroma impregnado en mi piel, definitivamente el aroma de Shawn es uno de los olores que jamás olvidare y permanecerá por siempre en mi memoria.
Shawn comenzó a desatarse, yo hacía lo que podía y él se volvía loco, su piel estaba ardiendo, toqué su frente y esta estaba hirviendo, Raul empezó a jadear, sabía que era lo que venía.
Esta vez al escuchar a Shawn lo encendido que estaba no espere y fui yo quien sacó de aquella bolsa que Aaliyah había dejado un condón. Aún tenía que hablar con ella ¿cómo se le ocurre haber planeado todo eso? ¡Está loca!
Tomé el paquetito entre mis manos y Shawn lo tomó.
- Descuida yo lo abro.
Me lo regreso de vuelta y me las ingenié para ponerle aquel látex .
Shawn estaba jadeando, yo sabía que se estaba conteniendo, la vez anterior no lo hizo y esta vez era obvio que lo estaba haciendo despacio, procurando por mi.
- Eres una diosa cariño, me encantas en todos los sentidos.
Me susurraba una y otra vez al oído, demostrándome de mil formas que lo estaba disfrutando y que estaba realmente excitado.
Él trataba de detenerse y contenerse para no lastimarme pero no podía evitar que el disfrutará su momento, verlo así me hacía sentir satisfecha. Su ritmo era lento y sentía como temblaba para no hacerlo mal y lastimarme.
- Shawn, cariño no te detengas, sigue, me encanta como lo haces, por favor no pares. Le susurré al oído animándole. Él inmediatamente comenzó a gemir de una manera casi exagerada, sus manos casi encajadas en mis caderas me aferraban con demasiada fuerza hacia él.
- Priss, me encantas. Susurraba mientras entraba una y otra vez a mi, sus palabras a mi oído hacían que me erizara y eso comenzaba a encenderme aún más, el abdomen de Shawn chocaba con mi trasero y espalda, me quemaba.
Shawn sosteniendo mis caderas se balanceaba de atrás hacia adelante con un delicioso ritmo, trataba de moverme a su compás para disfrutar de sus movimientos aún un poco más, sus manos masajeaban mis pechos y la temperatura de su cuerpo hacia que mi cuerpo se evaporara poco a poco.
Ambos gemíamos y estábamos en un punto culminante, Mendes aumentó drásticamente el ritmo y nuestros cuerpos hacían chasquidos mientras chocaban uno contra el otro.
No podía más poco a poco un espasmo iba apoderándose de mi y mis entrañas, conforme Shawn subía el ritmo este se hacía más intenso y placentero, Mendes gemía y se movía desesperadamente contra mi, al poco tiempo pude adaptarme a sus ricos movimientos, estábamos consumiéndonos, sentí como un orgasmo se apoderó de mi, haciéndome explotar, Peter de igual manera se balanceaba sobre mi mientras este se apoderaba también de él, ambos vibrábamos en sintonía.
Shawn y yo éramos dos volcanes a punto de entrar en erupción.

Terminamos exhaustos eran ya las 4 de la mañana, muy pronto comenzaría a enrojecer el cielo, Mendes y yo estábamos encantados después de haber conocido el cielo.
- Descansa cariño. Shawn me tomó en sus brazos y me besó dulcemente la frente.
- Buenas noches Shawn, descansa.
- Gracias por quedarte.
-  Me fascinas mendes pero ya es tarde debemos dormir. Le respondí.
No lograba verlo pero sólo distinguía su hermosa y resplandeciente sonrisa iluminando la obscuridad de la habitación.
Lo besé de igual manera y me acurruqué plenamente en sus fuertes brazos que me hacían sentir tan cómoda y protegida, no hay mejor lugar en el mundo que los brazos de Shawn Mendes.
Estaba agotada y moría de sueño, me ire a dormir más feliz que nunca , él también, aunque intentábamos platicar solo bastaron un par de minutos para ambos caer en un profundo sueño.