¡Sonrojados!

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Estuve escondida en el baño por lo que fueron mas o menos 12 minutos. Había leído que a las personas no les gusta ser interrumpidas en sus conversaciones, y si salgo... bueno, a lo mejor me veré un poco entrometida, y no quiero eso. Pero tampoco puedo quedarme aquí todo el receso... Dios, ¿qué hago?

Veo por la rendija de la puerta del baño a unas chicas de 5to año hablando sobre chicos y cottileando de otras chicas. Que hermoso sería tener a alguien con quien poder hablar de esas cosas.

Me armé de valor y con sumo cuidado abrí la puerta, las chicas se me quedaron viendo y evitaron hacer contacto con mis ojos. Traté de sonreír y las muchachas al verme salieron del baño sin quitarme la mirada de encima.

—¡Que miedo! No la viste a los ojos, ¿cierto?

—Por supuesto que no, dicen que es de mala suerte.

Jamás entendería el por qué de aquello, aunque me sentía muy mal. Me encantaría poder hacer todas esas cosas que los demás dicen, porque sí, he escuchado varias veces esos rumores, y me da algo de pena no poder cumplir sus expectativas.

Suelto un suspiro y me miro al espejo. Mi cabello es rojo, mis ojos son verdes claros y algo grandes. Mis piel es algo traslúcida y una cicatriz de cuando un perro me atacó surge desde mi sien hasta mi nariz. Mi uniforme consiste en una falda azul marino y un suéter del mismo color, a parte de la camisa blanca que uso debajo, hay una corbata, que siempre trato que esté bien arreglada. Mis medias llegan a mis canillas y mis zapatos negros están limpios. No lo entiendo, no hay nada malo conmigo, estoy casi segura.

Creo que estoy destinada a morir sola y con veinte gatos... Bueno, tal vez ni con gatos; los animales me odian.

He escuchado que las pelirrojas naturales llaman la atención... Aún no entiendo el por qué huyen de mi.

Salgo con mi mochila sin colocarme las dos correas, he escuchado que las chicas cool hacen esto. Las miradas me siguen a lo largo del pasillo y trato de hacer una lista mental de mi higiene personal y todo lo que tengo puesto. ¿Me bañé? Si, por supuesto, y mi uniforme mamá lo lava todos los fines de semana.

Entro a mi clase, 2-B, ya había comido sola afuera, pero algunos compañeros seguían comiendo con sus amigos, me encantaría tener algunos de esos. Sería fantástico, pero no tengo la suficiente experiencia como para hacerlo, no puedo saltar de nivel así de fácil. Lo primero que hay que hacer es:

Hablar con alguien.

Miré a mi alrededor en busca de alguien que no me ha huido nunca, pero es una busca en vano, todos me tienen miedo.

—¡Hey! ¿Cómo estás?

Levanté mi cabeza inmediatamente luego de escuchar aquel cálido saludó, supe quien era al apenas oír su voz.

Oliver Wendell, está en mi clase. Un chico verdaderamente agradable, bueno en los deportes. Tiene una sonrisa fenomenal, es popular porque tiene una personalidad muy agradable.

Visible, esas es la palabra. Sobresale como si lo hubieran marcado con un resaltador

No puedes estar en un mismo lugar con el y pasarlo desapercibido. El chico brilla siempre.

Pero no podía hablarle, ¡por supuesto que no! Un chico popular se vería corrompido al hablar con una chica como yo.

—¡Hola! —me saludó otro día sonriente al pasar al lado de mi puesto. Me sentaba justo enfrente del profesor. También era la encargada de la mayoría de las cosas que se deben hacer en un salón de clases, y era por la misma razón de que me sentaba en donde me sentaba:

Nadie quería.

En uno de mis esfuerzos por ser querida por mis compañeros de clase, acepté hacer todo lo que mis ellos no soportaban; pensé que al sacrificarme todo el mundo reaccionaría así:

Pensamientos en la cabeza de Sofía.

—¡Gracias por salvarnos, Sofía! Eres la mejor.

Yo estaba sentada en la última fila, en donde se reunían los populares, y estos trataban de hablar conmigo animadamente.

—¿Dónde te hiciste tu peinado? Está tan a la modauna chica llamada Taylor, capitana del equipo de Volleyball, enganchó su brazo al mío —. Deberíamos ser mejores amigas.

Por supuestocontesté dándole mi mejor sonrisa.

Fin.

Pero no fue así como reaccionaron, después de limpiar algo con el trapeador, los chicos no quisieron estar cerca de este por lo que fue una semana, así que para que no tuvieran preocupaciones traje el mío, aunque fue algo incómodo traerlo encima en cada clase.

Oliver me saludaba en clases repetidas veces. Hasta hoy lo ha echo 37 veces, sin contar las veces que me ha pedido una goma prestada, si cuento eso serían 39.

Pero ese día estaba aún mas resplandeciente que de costumbre.

Era muy alto, o a lo mejor yo era algo bajita, no lo sé, pero...

¡No debería estar pensando en esas cosas! ¿qué tal si alguien está leyendo mi mente? No, no, no. Eso no es posible...

Pude sentir como la sangre había subido a mis mejillas, y estaba mirando fijamente al asiento de mi compañero de enfrente, que seguía hablando animadamente con sus amigos.

—¡Cuidado! —le susurró Josh a Matías mientras miraba aterrado en mi dirección, sin mirarme a los ojos— Seguramente te anda echando una maldición.

Levanté mi cabeza inmediatamente y traté de explicarme, pero lo único que salieron de mi boca fueron balbuceos —No-n-no, yo... Mm...

Matías volteó inmediatamente a mi dirección y salió corriendo a la puerta con sus amigos—¡Casi me echa un maléficio! Oyeron eso, ¿no?

Había desperdiciado una oportunidad de oro para socializar con alguien, merecía castigarme por eso. Simplemente me puse a balbucear sin parar, y lo que mas me duele; ellos siguen pensando en que puedo hacer maldiciones, pero no, una vez intenté hacerlo y salió terrible, mi madre colocó velas por toda la casa durante dos semanas.

Las horas pasaron volando y cuando me dí cuenta, ya era la hora de salida. Otro día en que todo va igual.

Otro día que jamás podré cambiar.

Jelou, este es mi nuevo libro, duh. Espero que les guste mucho, me encanta escribirlo. Este es solo el prólogo prros, se vienen muchas cosas más, jejeje.

La protagonista está inspirada en el anime Watamote, no digo que es exactamente como ella, pero si se darán cuenta de una que otra referencia. No actualizaré hasta que alguien vea esta verga.

Baaaaiiii.

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⏰ Última actualización: Mar 19, 2018 ⏰

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