To my dear love:

Oh, dear love...

Un golpe
Ese sentimiento que te pega de lleno en lo más profundo de tu ser.
Que hace colisión en tu interior.
Ese golpe que te vuelve vulnerable.
Ese golpe que sabes que cuando lo sientes, no hay marcha atrás.
Ese golpe que te llena de mariposas el estómago y te deja confundido.
Ese golpe que así como puede matarte también puede hacerte sentir en las nubes.
Eso es el amor.

El.
Él es un golpe a mi interior.
Es el golpe que despierta todo lo que estaba muerto o dormido.
Que despierta lo que ni siquiera sabía que existía.
Que despierta risas, que despierta estos escritos.
Que despierta ganas de amar.
Él es el que despierta todo en mi.

Como sonríe, como habla, como camina,
como piensa, como se expresa,
como besa, como ama,
como toca, como me hace sentir.

Un inmenso golpe, que junto a todo el dolor se siente glorioso.
Que junto a todas las decepciones se convierte en un nuevo "quizás". 
Que junto a tanta oscuridad se vuelve una tenue luz, débil, pero que cuando menos te das cuenta se expande hasta no dejar nada. Allana sin miramientos ni compasión tu paz mental hasta hacerte un remolino de ideas, pero de un momento a otro
no deja más que la sensación de una isla tranquila.
Pacifica y armoniosa.

Que egoísta es el amor, pero que bien se siente cuando es correspondido.
Que cruel es el amor, pero que hermoso es todo lo que te hace sentir.
El amor jode, porque no te hace pensar con claridad.
El amor lástima, porque nos vuelve ciegos.
El amor te lleva a una inminente muerte, pero es una de mis muertes favoritas.

Más si es por el
porque morir por el sería
la muerte más gloriosa
que la vida me puede dar.

Siempre tuya, yo.