Camelias para Ti - Fanfic BNHA #8

Capítulo 6: "Tus Colores"

El pequeño gato, esponjoso y blanco de ojos color miel se mantenía ansioso frente a la puerta de la habitación del dueño de casa, esta estaba cerrada así que soltaba maullidos a medida que rascaba con sus garras la madera para dar aviso que quería entrar, por alguna razón sus dos dueños entraron tan rápido a la habitación que le dejaron fuera.

Dentro, con la luz apagada y la tenue luz que brindaban los postes fuera en la calle que se colaban por la ventana dos siluetas de dos muchachos se desenvolvían, uno daba movimientos leves mientras que el otro daba saltos de vez en cuando.

-T-todoroki-kun... esto...

Soltó el de cabellos verdes a medida que su respiración se agitaba, su polera estaba hasta su cuello la cual permitía dejar expuesto todo su pecho y abdomen. Se encontraba en una situación que le ponía realmente nervioso, una que simplemente no se esperó después de aquel leve roce en sus labios hace un momento, interiormente no quería del todo esto, pero el muchacho de cabellos bicolor pareció insistir tanto y de alguna forma sus caricias, su trato era tan amable y cálido, como dedos largos que acarician las teclas de un piano, como un pincel que se deslizaba con suavidad por un lienzo le acariciaba, sin propasarse, sin hacer nada que le asustase, era la brecha de diferencia entre el violento rubio cenizo y el amable chico que vivía en su casa.

-Shh... Midoriya solo... relájate, no te haré nada que te incomode tú solo, disfruta de esto... porfavor

Rogó Todoroki casi en un hilo de voz y bajó lentamente a besar el pecho del pecoso atrapando así en el proceso uno de sus pezones entre sus labios, Midoriya al sentir los labios ajenos apretó la sábana entre sus dedos y cerró los ojos con fuerza, lamentablemente aquel leve trauma seguía en el, no podía borrar de su mente aquel trato tan humillante que recibía a diario.

-¿No te gusta?

Preguntó el de mirada heterocromica a lo que el contrario negó de inmediato asustado, ante aquella acción Shouto no evitó sentirse pésimo, pero no se rendiría, debía conseguir hacerle sentir mejor y lo haría. De a poco besaba con suavidad su pecho, abdomen, bajando de a poco hasta dar besos alrededor de su ombligo, por su parte el pecoso tenía la vista clavada al techo, con un tenue color carmín en sus mejillas y comenzó de a poco a sentir un cosquilleo, una sensación que delataba que su hombría comenzaba a despertar.

Los suaves labios de Todoroki daban toques con cariño sobre su piel, bajando, buscando aquel lugar donde Midoriya perdía su nombre y enloquecía. Su boca siguió su travesía, hasta quitar de a poco la tela que mantenía en calma aquel lugar hasta que finalmente dió en el clavo, probó, degustó aquella suave piel y envolviendo como un capullo a su miembro lo tomó, comenzando suavemente con un vaivén acompañado de suaves lamidas.

-¡Ugh!...mhh... T-Todoroki...

Sintió un estremecimiento que fue desde la punta de sus pies hasta su cabeza, la suave y cálida cavidad del contrario envolvía ahora su despierto miembro con gula, y por las nuevas sensaciones sentidas imaginaba que el de mirada heterocromica era ya un experto en este tipo de juegos.