Con el tema de Margaret se nos pasó el cumpleaños de nuestra hija. Hoy era 3 de septiembre así que habían pasado dos simples días.
-Buenos días cariño, ¿cómo has dormido?-le dijo Taylor al despertar.
-Uueeoo iiaa-sonrió-iiee-contestó animada.
-¿Sabes? Hace dos días fue tu cumple y no nos dimos cuenta-le comenté-¡Felicidades mi vida!-la felicité.
-Toma, de parte de mamá y papá-dijo Taylor trayendo un gran paquete-¡Felicidades cariño!
Amanda lo abrió y se lo quedó mirando extrañada.
-Es un “juguete” que te ayudará tanto con tus primeras palabras como con tus primeros pasos-le expliqué.
-¿Iii?-preguntó extrañada.
-Claro-sonreí-abrámoslo y vemos cómo va.
Dicho y hecho abrimos el regalo y vimos cómo iba.
-Esto es un…-empezó Taylor pulsando el botón en forma de perro.
-Perro-dijo el juguete.
-Eeoo-repitió Amanda.
-Y esto es una…-comencé yo.
-Casa-dijo de nuevo el juguete.
-Asa-repitió mi niña.
-Muy bien-le aplaudimos.
Dejamos a Amanda con su nuevo juguete mientras íbamos un segundo al comedor.
-Tiene dos años y todavía no camina y habla-comentó Taylor.
-Ha dicho sus primeras palabras y ha tenido que adaptarse a nuevas situaciones-le defendí-unos tardan más y otros menos, dale tiempo.
-Está bien, tienes razón-comentó esta vez.
-Ves-sonreí-y ahora vamos a ver qué tal va.
Pasamos todo el día en familia haciendo lo que Amanda quería. Fuimos al parque, paseamos y jugamos todo el día.
…
Evidentemente no hace falta decir que nuestra niña ya comía bastantes comidas más y que ya dormía en su propia camita.
A los pocos meses de comprarle el juguete ya empezó a decir bastantes palabras y apoyándose en el juguete también caminaba un poquito. O no aprendía nada o lo aprendía todo de golpe.
Los meses pasaron y mis conocimientos aumentaron, claro está Paul volvió para darme clases y yo continué estudiando mientras la pobre Lena cuidaba de Amanda.
Un año después mi niña ya sabía caminar y sabía decir muchas palabras.
Faltaba una semana para que fuera su cumpleaños, tres añitos. Ahora le tocaba empezar el colegio. A saber cómo iría.
Para su tercer aniversario habíamos vuelto a invitar a todos nuestros amigos; los de 1D que hacía dos años que no veíamos, los de twilight que hacía un año, mis suegros, Makena y algunos de nuestros amigos.
Compramos las cosas necesarias para su cumpleaños, igual que habíamos hecho en la fiesta de su primer aniversario.
-¡Amanda!-la llamé el día antes de la hora de dormir.
Vino corriendo.
-Mami, no pudo mumir-dijo al llegar.
-Hay que dormir Amanda, mañana celebramos tu cumple y no querrás dormir durante la fiesta-le advirtió Taylor.
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Amor verdadero. (Taylor Lautner)
FanfictionLa historia de una chica que llegaba tarde a una quedada y acaba cumpliendo el sueño de su vida.