Llena de amor (Mark Tuan)

prologo

Mi nombre es Emili jonson tengo 19 años, estoy estudiando mi tercer cuatrimestre de la universidad, la vida no ha sido fácil para mi, tengo sobre peso, mi familia dice que no se nota tanto, se que mienten para hacerme sentir mejor, mi altura es de 1.69cm con un peso de 92 kg

Siempre me han molestado, no solo por mi peso también por mis gustos en todo, no pertenezco a ninguna tribu urbana en especial, pero adoro un poco de todo, me gusta la ropa oscura de cuero con cadenas, así como me gusta usar ropa muy colorida con brillo, soy algo rara, lo se, pero así adoro ser

Mi única mejor amiga es estephania, la conozco desde él preescolar, donde mi peso era normal al de las demás, si, aunque no lo crean yo tenia un cuerpo pequeño de pequeña, pero cuando sufro de ansiedad, recurro a comer lo primero que encuentro, además que adoro hacer repostería, aun estoy aprendiendo, pero me divierte mucho hacerlo

Vivo con mis padres un matrimonio normal, mi hermano es lo contrario a mi, es alto, con cuerpo bien definido y guapo, nadie cree que seamos hermanos, no los culpo, yo tampoco lo haría

Él verano estaba por acabar, solo faltaba una semana cuando él llego

aun estaban trabajando mis padres y mi hermano estaba en su casa, casi nunca venia aqui, yo decidí poner algo de the beatles a todo volumen, en él cambio de una canción a otra escuche él timbre sonar como loco

abrí fuertemente -por que mierda tocas así??

Quede helada, un chico alto, con cuerpo bien definido, ojos oscuros y cabello rojo fuego me miro con los ojos bien abiertos

-yo... Que quieres? -solté de golpe

-tranquila nena, busco a... -miro un papel que tenia en su mano- peter jonson

-es mi padre, que con él?

-esta en casa?

-que te importa -estaba por cerrar la puerta, pero él la detuvo

-tranquila, mis padres me enviaron con él, se supone que son amigos de la infancia, si no esta necesito esperarlo, es algo urgente

-ya que -me moví para que pudiera pasar, llevaba unas maletas

-te gusta the beatles??

-no

-no? Pero si estabas escuchándolo

-mera casualidad, tienes hambre?

-que?

-que si tienes hambre?

-no se supone que soy un extraño, por que me ofreces comida?

-si no quieres mejor, mas para mi -me adentre a la cocina

Tome dos platos de la alacena, uno lo puse en la barra de la conina y en él otro serví un poco de arroz con caldo

-que me vas a invitar? -pregunto aquel chico mientras se metía a la cocina

-toma -le extendí él plato recién servido y serví otro

-gracias -me dio una gran sonrisa

Al poco rato llegaron mis padres, nos miraron extrañados, no es para menos, nunca llevo a nadie a casa y menos a un chico como él, después les explique que pasaba, ellos se quedaron platicando con aquel chico, yo subí a mi habitación a perderme un rato