POV Kira
Hoy se cumplían seis meses desde que huimos de Mistic Falls. Era un día gris y triste, recordando ese trágico momento de mi vida.
Mis hermanos no sabían que yo existía. Y aunque lo había hecho para protegerlos, dolía tanto saberlo. No poder verlos o aunque sea hablar con ellos me estaba matando por dentro.
Estaba tan metida en mis pensamientos que no había escuchado cuando Dam entró en la sala.-Hola Luz- dijo besando mis labios.
Una pequeña sonrisa se instaló en mis labios. Él era todo lo que estaba bien en mi mundo, en este momento. Nuestra relación avanzaba cada día un poco más y nada había cambiado entre nosotros. Solo que ahora nos besamos y esas cosas que hacen las parejas, si ustedes me entienden.
Seguía siendo mi mejor amigo aparte de ser mi novio y eso era lo que más amaba de todo esto.
Ahora vivíamos en Italia, desde hace 5 meses. Después de disfrutar de las paradisíacas playas de Brasil y una breve parada en París, decidimos mudarnos y conseguimos una hermosa casa en Venecia.En dónde yo iba a una escuela de arte y él fingía trabajar desde casa ya que dinero era lo que le sobraba a mi sarcástico vampiro. Teníamos una vida normal, más allá de ser vampiros que se alimentaban de bolsas de sangre.
Todo parecía mejorar para nosotros. Mis pesadillas disminuyeron y empezábamos a disfrutar de todo esto.
Pero todavía sentía el dolor alojado en el fondo de mi pecho, junto al amor/odio que le tengo a Nicklaus.-Hola Dam- saludé sonriendo.
-Estabas metida en tu cabecita, Luz. ¿Qué pensabas?- dijo con preocupación.
-Hoy se cumplen seis meses- exclamé con una mueca.
Fruncio el ceño, pero no parecía sorprendido. Seguro ya se había dado cuenta de que día era.
-Lo noté en cuanto desperté. Pero no quería ponerte triste- dijo tenso.
Me acerqué a él y lo abracé con fuerza. Siempre tan preocupado por mí. Besé sus labios con todo el amor que le tenía. Agradecía tanto tenerlo en mi vida.
-Te quiero feliz, vida- susurró contra mis labios.
-Contigo lo soy, Dam-
Nos separamos y volví a sentarme donde estaba. Tenía un precioso cuadro en proceso y debía terminarlo para entregarlo mañana.
-Es hermoso- dijo Dam a mi lado.
Me gustaba como estaba quedando. Había logrado captar la paz que me daba el cielo nocturno de Venecia. Era uno de lo mejores cuadros que había hecho hasta el momento.
-Gracias- sonreí a mi novio.
-¿Que quieres comer hoy, Dulzura?- preguntó.
-Mmm...pasta-
Se dirigió a la cocina para preparar la deliciosa pasta que tan bien le salía.
POV Damon
En la mañana desperté preocupado por el día que comenzaba. Sabía que se cumplían los seis meses desde que huimos de nuestro hogar y mi pequeña Luz iba a estar más apagada de lo normal. Por lo que necesitaba hacer algo para distraerla.
Me levanté de la comodidad de mi cama, besé su frente antes de vestirme y salir en busca de una sorpresa para ella.
Venecia era un lugar perfecto para vivir con mi amada pelirroja. Nos gustaba mucho estar aquí y Kira disfrutaba de ir a la escuela de Arte. Y la verdad es que se le daba muy bien la pintura.
Nuestra relación mejoraba cada día un poco más y yo no podía ser más feliz por eso. Pero también sabía que extrañaba a sus hermanos y que los lloraba en silencio cuando creía que no estaba.
No teníamos noticias de los habitantes de Mistic Falls, ni de Klaus. Kol y Elijah llamaban de vez en cuando para saber donde y como estábamos. Y mi hermano querido ni siquiera había intentado comunicarse conmigo. Eso a veces me enfurecia.
Mientras caminaba por las calles de Venecia, me encontré con un pequeño restaurante, romántico y hogareño. Asi que decidí que la invitaría a una cena en la noche, para distraerla del horrible día que era hoy.
Después de hipnotizar a un par de personas, volví a nuestra casa y me encontré con mi bella novia terminando su último cuadro. Pero estaba tan metida en sus pensamientos que no me oyó llegar.
Podía notar lo tensa que estaba y sabía que debía hacer algo al respecto. Me acerqué y después de saludarla, la besé con todo el amor que le tenía.
Esperaba que esta noche saliera todo bien y poder hacer feliz a mi niña.POV Klaus
Me encontraba totalmente devastado por dentro. Estaba cansado de fingir que no me importaba Kira o donde se encontraba. Pero yo soy el Híbrido Original y el mundo debía pensar que no me importaba nada ni nadie, sino iban a dejar de temerme.
Hoy se cumplían seis meses desde que cometí el peor error de mi vida. Pensar en los sucesos de ese trágico día en donde perdí a la luz de mi vida, dolía cada vez más.
En más de una oportunidad estuve a punto de apagar mi humanidad para no tener que cargar con el dolor de la pérdida, pero ella no se merecía eso. Y yo merecía sufrir por todo lo que le hice.
Había vuelto a ser el rey de Nueva Orleans, pero ya ni siquiera eso tenía sentido y sólo me hacía cargo de mis obligaciones. Mientras, en secreto, buscaba a mi pequeña pelirroja. Pero nadie podía encontrarla, es como si hubiese desaparecido del planeta.
Mis hermanos seguían sin hablarme y cada uno llevaba la pena de este día como podía.
Elijah desaparecía de casa y volvía muy tarde en la noche.
Rebekah lloraba todo el día junto a la foto y regalos de la pelirroja.
Kol bebía hasta la inconsciencia, soltando algunas lágrimas de impotencia y añoranza.
Había destrozado a mi familia. Mi niña nos volvió a unir y yo la alejé de ellos. Pero ya no había nada que hacer.
Aunque ellos si sabían de ella. Lo podía notar en la sonrisa de felicidad que ponían al leer algún mensaje en su celular.
Pero seguía teniendo esperanza de recuperar a mi bella Hechicera o aunque sea obtener su perdón. Porque seguro su corazón ya le pertenece al Salvatore. En cambio el mío, sólo seguía latiendo por ella.Mis queridos lectores, aquí el prólogo de la segunda parte. No me gustó mucho como quedó,asi que perdonen. ¿Ustedes que opinan? ¿Les gusta?
Voten y comenten :3 y gracias otra vez por leer.
ESTÁS LEYENDO
Hechizados- Nicklaus Mikaelson
Fiksi PenggemarSecuela de Hechicera 6 meses después de haber escapado del infierno de Mistic Falls, la reciente pareja se encuentra disfrutando de su libertad en la bella Italia. Hasta que un día, Kira cae en coma repentinamente, algo imposible en un vampiro. Y Da...