Infiel © [T.O.P y Tú] ~ Segunda Temporada

Capítulo 8 ~ Culpa

Acomodé mi corbata, unté un poco de perfume en mis manos y las pase por mi cuello. Bajé las escaleras con una gran sonrisa, mi esposa estaba bebiendo un poco de café y me senté para desayunar como en los viejos tiempos.

Aunque sentí que estaba aún molesta seguía con la plática, ya se le pasará con las horas. Escuché la vibración en el bolsillo mi pantalón, ella se levantó hacia la puerta, saque mi celular y tenía un mensaje de Ji Yong, me necesita en la compañía porque surgió un problema en la empresa.

Escribí para que no se preocupe, (...) se acercó a mí con su rostro muy pálido, cómo si hubiera visto un fantasma pero no dijo nada. Me recargue en la silla para observar quién estaba en la puerta y mi corazón se detuvo al ver a Bom con una sonrisa forzada.

¿Qué demonios hace aquí?

Me levanté muy asustado pensando que le había dicho algo a mi esposa, tomé mis cosas del trabajo y salí de la casa, mi secretaria hizo comentarios muy incómodos porque (...) nos estaba viendo, nos subimos en el auto para llegar a la compañía.

— ¿Qué te pasa? — pregunté furioso.

— Quería conocer a tu esposa...

— ¿Para qué? — la interrumpí con una mirada fulminante.

Ella sintió mucho miedo, agachó su cabeza y no dijo nada más. Llegamos a la compañía, entré en mi oficina para arreglar las cosas con Ji Yong, preparamos los vestidos para el desfile que es pasado mañana. A las modelos las envié a practicar para la presentación.

Enviamos algunos pedidos, revisamos la bodega pero al ver a Bom, regresé a la oficina. Llamé por los altavoces a mi secretaria, está situación no se puede quedar así.

Ella entró algo apenada, tomó asiento sin regresar a verme. Respiré para controlar mi ira.

— Lo siento presidente.

— ¿Dijiste algo malo? — pregunté.

— Solo quería saber cómo es su esposa — alcé una de mis cejas.

Me levanté del sofá, caminé hacia la ventana.

— Lo amo presidente y por eso quería confirmar si su esposa valía la pena — la regresé a ver sorprendido.

— Esa noche dejé claro lo que tú significas para mi — ella bajo su mirada — (...) es una mujer irremplazable, sin ella no soy nada.

— ¿Está seguro que su esposa lo ama? — sonreí a su pregunta.

— Confío en ella hasta con los ojos vendados.

— Presidente...

— Bom, para por favor. Eres una mujer hermosa y debes encontrar a alguien que corresponda tus sentimientos — noté unas leves lágrimas en sus ojos.

— ¿Va a despedirme? — cuestionó.

— No — apoyé mi brazo contra la pared — Eres una excelente profesional y quiero que sigas trabajando como lo has hecho durante este tiempo.

Hizo una reverencia y salió de mi oficina, seguí con mi trabajo. Encendí el auto para llegar a casa, encontré a mi esposa sentada en una silla con la mirada baja, me acerqué y deposité un beso en su mejilla, dejé el ramo de flores en la mesa para preparar la cena.

— ¿Sucedió algo en la academia? — pregunté por el semblante de mi esposa.

— No.

Serví la cena pero ella seguía sin hablar, me preocupe porque no probó ni un bocado de la comida.

— (...).

— Seung no hables, me duele la cabeza.

Subió las escaleras y me sentí tan mal por ella, talvez este así por la visita inesperada de Bom. Lave los platos, tomé unas pastillas para el dolor de cabeza y se las lleve con un vaso de agua, se las dejé en la mesa.

Me recosté en la cama de mi hijo para llorar un poco, tanto estrés me va a matar.