Capítulo 9 ~ Vuelvo a mi infierno

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No dormí nada con solo pensar en mi matrimonio, me di una ducha y me coloque la ropa de trabajo, bajé las escaleras para preparar el desayuno, logré hacer el jugo de piña pero el pan se quemó en la tostadora, debo practicar más para sorprender a m...

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No dormí nada con solo pensar en mi matrimonio, me di una ducha y me coloque la ropa de trabajo, bajé las escaleras para preparar el desayuno, logré hacer el jugo de piña pero el pan se quemó en la tostadora, debo practicar más para sorprender a mi esposa. Ella bajo con el mismo semblante de ayer, se sentó en la silla sin decir ni un buenos días.

— Buen día (...) — tomé su mano y besé su delicada piel.

No recibí respuesta alguna, ni si quiera me regreso a ver o sonrió. Seguí desayunando porque ya mismo es hora de irme al trabajo, la miré y no probó nada, me molestó mucho su actitud, se supone que estoy intentado todo para arreglar mi error y ella se queda como una momia.

— Se que el pan está quemado pero debes probar algo — acerqué el plato para que me haga caso.

Lo retiro con mala gana, igual lo hizo con la jugo de piña. Eso fue la gota que derramó el vaso.

— Deja esa actitud de mierda — me levanté exaltado.

— ¡Cállate! — gritó.

— A mí no me vienes a callar, me preocupo por ti y así es como me pagas — mi enojo se salió de control.

— Mejor lárgate, no quiero verte — subió las escaleras.

La seguí porque tenía que recoger mi portafolio junto con el celular, entre en la habitación, fui recibido con una mirada de desprecio por parte de ella. ¿Qué le pasa? No quiero discutir, tomé mis cosas y puse mi celular en el bolsillo del pantalón.

— ¿Porque me sigues? — sus gritos me están alterando.

— No te estoy siguiendo, vine por mis cosas — me calme para no discutir, indique mi portafolio para que entienda.

— Solo vives para el trabajo y nada más — arrojó los perfumes al suelo.

— Estoy intentando recuperar mi tiempo con mi familia pero sólo recibo desprecio — alcé mi voz porque estaba alterado.

— ¿Enviar a nuestros hijos con mi madre, es recuperar tiempo? — no dije nada — ¡Responde!

— Ya mujer — tomé sus brazos con fuerza.

Solté sus hombros, bajé a la cocina para tomar un trapo. Limpié el desastre que había hecho mi esposa, ella seguía en la misma posición que la dejé, arrojé los vidrios en la basura y lavé mis manos con mucho jabón para que se quité el aroma fuerte de los perfumes.

— ¿Vas a seguir así? — pregunté.

— Vete, no quiero ver tu cara — me miró con odio.

— Eso haré — grité.

Bajé las escaleras muy rápido porque no soportaba estar un segundo más viendo la rostro de ella, no quería reaccionar mal con ella pero su actitud es jodidamente estresante, casi chocó el auto porque estaba alterado y con los nervios de punta.

Entre en mi oficina para seguir con el trabajo, no había mucho que hacer porque el día anterior con Ji Yong hicimos la mayoría. Pensé en lo que había sucedido está mañana, ella tenía algo más que simples celos hacia Bom, es como si supiera que le fui infiel.

Talvez sea hora de decirle la verdad, al fin y al cabo no quería engañarla pero no me creerá, la conozco muy bien y sé que no se tragará el cuento. Debía pensar bien para que ella crea en mis palabras.

Ji Yong entró en la oficina y sonrió al ver mi semblante tan horrible, le conversé sobre lo que sucedió está mañana, me invito a su casa para calmar mi amargura. Llegamos a su departamento y me sirvió una copa de vino, tomamos asiento para conversar sobre esta horrible situación.

Lo único que me aconsejó fue que deje que el tiempo cure las heridas, es lógico pero no me gusta la idea de no arreglar las cosas con ella. Él llamó a su personal para una fiesta en su casa, me sorprendió al ver a Bom con las chicas, pensé que iba a colmar mi paciencia pero fue tan distante conmigo todo lo contrario a Krystal.

Estaba tan mal, por efectos del alcohol quise besar a Krystal. Ella comenzó a quitarme la camisa pero la detuve, no voy a engañar a mi esposa por un simple despecho, tomé mis cosas y de nuevo ese sueño raro sobre esa mujer.

Ahora que lo pienso mejor, ella puede ser mi esposa, todo estaba más claro. Ese sueño es una visión sobre lo que puede ocurrir si no hablo con la verdad.

Abrí mis ojos y ví a Krystal desnuda a mi lado,  siempre es lo mismo. Ella está desnuda y yo con la ropa puesta, salí del departamento de Ji Yong y regresé a casa.

Abrí la puerta y las luces se encendieron, mi esposa se levantó para verme.

— ¿Dónde estabas? — preguntó.

— Fui con Ji Yong — dile sobre Krystal, no seas cobarde.

— Ok. Ve a descansar — estaba tranquila.

Subí las escaleras para esperar a mi esposa, como lo había dicho mi amigo, el tiempo se encarga de todo. Bajé las escaleras para cobijar a mi mujer con unas mantas, de nuevo se quedó dormida en el sofá.

Infiel © [T.O.P y Tú] ~ Segunda TemporadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora