Infiel © [T.O.P y Tú] ~ Segunda Temporada

Capítulo 20 ~ Miedo

Me desperté muy temprano, aún nuestras manos seguían entrelazadas, subí las escaleras para tomar una ducha, alisté todas mis pertenencias pero antes de irme les di un beso de despedida a cada uno de mis hijos incluida mi esposa.

Llegué a la compañía y me encontré con Krystal sentada en el sofá de mi oficina, ella se levantó hacia mí, tomó mis hombros y besó mis labios. La empujé de mi, me limpié mis labios con mi dedo índice. Respiré muy hondo para no matarla con mis propias manos, no podía actuar mal o las cosas se podrán peor para mí.

— Krystal, sal de mi oficina — apunté la entrada con mi mano.

— Admite que te gustan mis besos — se sentó en una silla.

Hasta donde puede llegar el cinismo de esta mujer, pase mi mano por mi cabello porque mi paciencia está llegando a su límite. Volvió a insinuarse a mi pero de nuevo la rechacé, estoy cansado de ella.

— Seung Hyun, soy mejor mujer que la estúpida de tu esposa — se desabrochó el botón de su blusa — Yo te hago gozar de placer.

Me reí por la estupidez que dijo, ella siguió provocándome con su escote que dejaba ver hasta el alma.

— Es verdad — afirmé.

Caminé alrededor del escritorio para enfrentarla, sentía sus ganas de estar conmigo, la tomé de la nuca haciendo que nuestros cuerpos chocarán. Su respiración era cada vez más agitada, sus ojos lo transmiten todo. Ella quiere tener sexo.

— Tú me haces gozar — acaricié su cabello — Gozar de la suerte que tengo de estar casado con la mujer más hermosa del mundo.

La empujé de nuevo, esta vez cayó sobre el suelo, me miró desafiante por tal acción.

— (...) es una dama pero tú — me senté en la silla y le tiré un poco de dinero — Tú eres una zorra que no vale la pena.

El teléfono de la oficina sonó, contesté sin dejar de ver a Krystal, Bom me informó sobre unos contratos que tenía pendiente. Cerré la llamada y me levanté de la silla, tomé del brazo a Krystal para que se fuera de una vez. Ella se soltó de mi agarré.

Sentí los pasos de Bom en la puerta.

— ¡Si! Seung más fuerte — esta mujer si está loca — No pares, sigue, sigue.

Le tapé la boca para que no haga más escándalo, abrí la puerta pero mi secretaria se había ido. Krystal cerró la puerta y se dirigió a la ventana.

— Llamaré a seguridad si no te largas — amenacé tomando el teléfono.

— ¿Le vas a dar el apellido a nuestro hijo? — me quitó el teléfono de las manos.

Busqué los papeles en el escritorio, para mí mala suerte no los encontré.

— Debes ser un padre responsable — golpeó la mesa muy fuerte — El niño solo tiene seis años y necesita el cariño de su padre.