jayler.

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El pequeño Birlem se encontraba sentado en la orilla de la cama mientras abrazaba su osito de peluche, su daddy había salido a trabajar muy temprano, ya eran las 12:00 pm y aún no llegaba.
Preguntas como: "¿Y si sufrió un accidente?" "¿y si lo secuestraron?" "¿y si se perdió?" cruzaban por la mente del pequeño castaño.

Joseph era una de las personas más dulces que podían existir, siempre cuidaba de Tayler y le encantaba hacer sentir bien a su daddy; esa era una de las tantas de las razones por las cuales Holder se había enamorado de Joey.
Pero no todo era de color rosa, semanas atrás el mayor había llegado tarde a casa con un fuerte olor a perfume de mujer o como joey decía "olor a tonta"

"Ya no sé que más hacer Hunter, ya lo llame pero no responde" susurraba joey al telefono.

"No te preocupes Jo, le diré a Blake que trate de contactarlo" repitió Hunter.

"N-no quiero que le pase algo, l-lo amo mucho mucho" sollozó Joseph y algunas lagrimas comenzaron a caer por sus ojitos.

"Lo sé, lo sé...tengo que colgar, Blake quiere que le prepare la cena."

"Está bien Hunt, perdón por molestarte" murmuró el menor y colgó sin esperar una respuesta.

Minutos después el ruido de unas fuertes carcajadas se hizo presente en la planta baja, rápidamente Birlem se puso de pies limpiando sus mejillas. Bajó las escaleras lo más rápido que pudo y con una gran sonrisa, ¡su daddy estaba bien! Al llegar a la sala su sonrisa se transformo en una mueca, Tayler se encontraba abrazado de una tipa rubia que ante los ojos de Joey parecía alguien repulsiva, con sus cara con exceso de maquillaje y unas caderas más que operadas.

"¡Tayler!" grito el pequeño cruzado de brazos, el mayor dejo de mirar a la chica y dirigió su mirada al pequeño.

"¡Oh, joey!"chillo Holder totalmente ebrio abrazando a la rubia por la cintura.

"Ay, ¿tienes un hijo y no lo dijiste?" chillo la chica con un puchero que hizo pensar a Joseph sobre si el se veía así de ridículo cuando hacía ese tipo de gestos.  

"No, soy su novio" murmuró Birlem entre dientes. "Tayler, te dije que no quería mascotas, ¿Por qué trajiste a una perra?"

"¡Joseph, no seas grosero!" reclamo el mayor.

"¡Y tú no seas un idiota!" grito Joey ya harto, no era la primera vez que su daddy llegaba en ese estado, y era la segunda vez que llevaba a una mujer a su casa.
"Deberías sentirte avergonzado Tayler, volviste a romper tu promesa." Sollozó y otra vez las lagrimas se hicieron presentes en los ojitos del Joey, éste miro a la chica y le señalo la puerta "si no te vas ahora juro que te arrancaré esas ridículas extensiones con mis propias manos." chillo pasando sus deditos por sus mejillas tratando de quitar todo rastro de lagrimas, la rubia indignada tomo su bolsa y salió de la casa soltando un bufido. "No sé que hice mal para que me hicieras esto. Pero sé que fue un error haber aceptado vivir contigo. ¿Cómo creí que alguien de tu edad estaría con un niño como yo?" Murmuró y segundos después se dio la vuelta y subió a su habitación, tomo una mochila y metió -sin mucho cuidado- todo lo que pudo en ésta, y lo más que le dolía era que Tayler ni siquiera lo había seguido. Bajó las escaleras y miró a el mayor.

"Te amo Jo" susurró el mayor

"Cuando digas que me amas dejame mirar tu rostro." la voz del menor salio rota y miró por ultima vez a su daddy, salió de la casa y comenzó a correr con dirección a la casa de Charles uno de sus mejores amigos.

[Meses después, idk.]

Narra Joey.

Después de que me fui de casa Tayler no había hecho el esfuerzo de buscarme, según Blake mi -ahora- ex novio se encontraba muy mal sin mi, yo no creía nada de eso, era obvio que él no me amaba y que sólo me quería para cumplir sus estúpidas necesidades sexuales, un bufido se escapó de mi boca y mire a Charles que se encontraba enfrente de mi, él y yo nos encontrábamos en la habitación de el rubio estudiando para nuestro examen de matemáticas, se encontraba lloviendo afuera lo cual evitaba que yo regresara a casa. 

"Deja de pensar en el idiota de Tayler, si sigues así reprobaras el examen" canturreó mi rubio amigo.

"Pero Charlessss, no puedo evitarlo" me crucé de brazos y saqué un poco mi labio inferior haciendo un puchero. Unos fuertes golpes se escucharon en la planta baja, era alguien tocando la puerta pero Charles y yo eramos flojos así que simplemente lo ignoramos.

"Y entonces, ¿menos por menos es más?" Pregunto mi amigo mirándome con el ceño fruncido, yo sentí sonriendo de medio lado.

"Yup, y más por más es más." agregué mirando la hoja de mi libreta la cual se encontraba vacía mientras que la de Charles se encontraba llena de operaciones, mis pensamientos fueron interrumpidos por los golpes en la puerta de abajo. "Umh, bro deberías bajar a abrir"

"No, qué flojera, baja tú" respondió mordiendo la goma de su lápiz.

"Pero es tu casa" respondí encongiendome de hombros.

"Sólo ignoralo, pronto se cansaran y se irán"

"Bien" respondí y tome mi libro dispuesto a estudiar pero otra vez fui interrumpido pero esta vez por golpes en la ventana.

"Mierda, ¿Qué no se cansan de molestar?" gruñó el rubio y yo solte una risita.

"Parece que no" mordí mi labio y mi corazón se detuvo unos momentos al escuchar la voz de Tayler gritar "Joey" negué rápidamente, seguramente era una alucinación.

"JOEY"

"JOSEPH"

"BEBÉ" gritaba la persona la cual se encontraba lanzando rocas hacia la ventana de mi amigo.

"Creo que te buscan" murmuró Charles mirándome, con cuidado deje mi libro en la cama y me levante mordiendo el interior de mi mejilla, lentamente me acerque a la ventana y al llegar a esta mis labios se abrieron formando una perfecta "o" Tayler estaba abajo con la ropa y el cabello mojado, lucia totalmente desaliñado, su cabello ya no era rubio, ahora era marrón, me miró y sonrío ampliamente, dejo de lanzar las rocas y torpemente trato de subirse a un árbol para llegar hasta a mí, con el ceño fruncido baje las escaleras y me dirigí al patio trasero en donde se encontraba mi ex novio.

"¿¡Qué mierda haces aquí!?" gruñí empujandolo "largate, estoy ocupado"

"¡Bebé!" chillo abrazandome, olía a alcohol pero una pequeña sonrisa se formo en mis labios, se sentía bien estar entre sus brazos, fruncí el ceño ¿Qué estaba pensando? me separé.

"Vete, vete ahora, no quiero verte nunca más." susurré alejandome, estaba tratando de no llorar, pero pequeñas gotas comenzaron a salir por mis ojos, ya estaba lo suficientemente mojado por la lluvia para que Tayler se diera cuenta que estaba llorando por él...otra vez.

"No, Joey." susurro acercandose "tú me amas, ¿qué no lo recuerdas?"

"Ya no te amo"

"No digas eso." Susurró con la voz quebrada. "¿No ves que me lastimas?"

Yo no resistía verlo así, aún seguía amandolo, todos esos meses la había pasado muy mal.

"Nunca voy a lastirmarte como tú lo hiciste conmigo" susurre y me di la vuelta para poder entrar a la casa, Tayler me tomó de la muñeca y me dio la vuelta, me tomó de las mejillas y sonrío.

"Te amo Joseph Birlem" murmuró para después plantar un beso en mis labios, pasó sus brazos alrededor de mi cintura, minutos después yo me pare de puntitas y pase mis brazos por su cuello, no se merecía ser perdonado por mí, lo sé, pero el amor es más fuerte. Un sollozo de parte mío hizo que nos separaramos, lo abracé lo más fuerte que pude y escondí mi cara en su cuello.

"Te extrañe tanto" susurre dejando que las lágrimas salieran. "¿Por qué no me habías buscado?" grite y golpee su pecho.

"Porque soy un cobarde." Sonrío quitando el cabello mojado que caía por mi frente."Nunca te dije lo hermoso que eres." dejo otro beso en mis labios.

"Y yo nunca te dije lo idiota que eres."

"Oh, claro que lo dijiste" respondió y yo sonreí como nunca.

"Cállate y bésame"

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Hola, espero que les gusten mis one shoots los hago con mucho amor.🌚

El video que está en multimedia, no me pertenece, todos los créditos a night mime subs.

So, comenten si les gusto y denle estrellita. ❤

one shootsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora