Ella es perfecta...
Estoy en un palco privado. El palco que compre hace más de un año para verla bailar en todos los recitales. Se sorprendieron cuando pedí un palco exclusivo porque dijeron que no hacían tantos espectáculos pero no me importo. Quería un lugar en donde verla brillar sin que nadie me notara. Ella me busca con la mirada y entonces como si de un imán se tratase levanta la mirada al palco. Sus ojos me encuentran y sonríe, yo le sonrío asintiendo y ella se prepara con sus compañeros.
La música empieza a sonar y ella se transforma. Su cuerpo se mueve al compás del vals. Sus movimientos son hermosos, bellos, sigue la música con una entrega profunda olvidándose del mundo... se pierde en su papel mostrando elasticidad, fuerza y pasión... cuando el baile termina el público aplaude de pie. Uma saluda tímida pero sus compañeros la aplauden con entusiasmo y admiración. Recibe un ramo de rosas rojas... mi ramo... no dejaría que nadie le diera flores más que yo.
Espero un tiempo prudencial hasta que ella me avisa que esta lista. Le digo que la limosina nos espera en la puerta trasera del teatro. No quiero que nadie nos vea juntos aun. Estos dos días sin verla fueron una tortura. Al menos no verla en forma directa porque pude verla ensayar en el estudio y dormir en su cama. También la vi ensayar en su casa. Allí baila de una forma diferente, no música clásica si no cosas más contemporáneas que la hacen brillas aún más. Verla bailar me excita de una manera que no puedo manejar. La fuerza de su cuerpo a pesa de parecer tan frágil, sus músculos, sus pies en punta... es tan perfecta...
Salgo por la parte de atrás del teatro con mis guardaespaldas cuidando que no haya fotógrafos. No quiero que contaminen mi relación con Uma con idioteces.
Esta noche la llevaría a mi casa. A mi mansión esperaba que no se sintiera intimidada. Ahora que sabe quién soy en realidad espero que eso no mine mis intenciones. Ruego porque entienda por qué no me acerque en todo este tiempo-
Ella sale aun con su moño de baile en el cabello. Lleva un vestido negro largo suelto y un abrigo liviano.
_ estuviste increíble_ digo mientras tomo su rostro y la beso despacio.
_ gracias disfrute mucho sabiendo que estabas allí_
Abro la puerta y nos hago entrar.
Mi chofer arranca y la tomo de la mano
_ ¿tienes hambre?_ pregunto
_ muero de hambre, después de los conciertos todos los nervios se disipan y mi estómago ruega por comida pero no puedo comer nada pesado porque después me dan calambres_ dice y asiento. Llamo a mi casa y le digo a mi cocinero que prepare unos bocadillos livianos y deje un buen vino blanco en la cava. Durante el camino me habla entusiasmada de la presentación, ella brilla y se ve feliz, radiante...
Solo quiero llegar a casa para poder tenerla a solas y sentirla cerca de mi... tanta paciencia tiene que dar sus frutos... y los dará hoy...