Conquistando a James

¿Se han preguntado como sería tener a tu novio de vecino? Pues es lo mejor que te puede pasar, todavía más si sus ventanas están una frente a la otra. Eso significa poder tener conversaciones hasta tarde y pasar más tiempo juntos.

James y yo llevamos nueve meses de relación y sin duda alguna han sido los mejores de mi vida.

Nos hicimos novios en un campamento en verano y poco tiempo después de que terminara se convirtió en mi vecino; lo cual fue una gran sorpresa para ambos.  Y ahora estoy aquí, a punto de ir a pasar la tarde juntos.

Tomo la canasta con golosinas de la encimera de la cocina y salgo de casa con dirección a la suya. James y yo quedamos de vernos hoy para ver una película que se estrenó hace unas semanas y más tarde le voy a enseñar a hacer un pastel, pues mañana es el cumpleaños de su madre y él quiere obsequiarle algo hecho por el mismo lo cual me parece tierno.

Me detengo a medio camino al ver a Leslie — su ex novia — en la entrada de su casa junto a él. Lo que mas llama mi atención es que el le sostiene el rostro con las manos y están muy cerca, demasiado diría yo.

Me acerco poco a poco y cuando ya estoy por llegar junto a ellos, sus labios se unen. Me detengo abruptamente dejando caer la canasta sobre la acera y siento algo en mi estómago revolverse. Lo que más me duele es que no es él quien se separa primero, sino que es ella quién rompe el beso.

— James... — susurro cuando estoy lo suficientemente cerca de él llamando su atención.

Se voltea al oír mi voz dejándome ver su cara de horror.

— Lauren esto no es...

— ¡No lo puedo creer! — lo interrumpo dando un par de pasos hacia atrás sintiendo la rabia fluir por mis venas — No...

— Permite que te explique, mi amor...

—¿Explicarme qué? Ya lo he visto todo — fijo mi mirada en Leslie quien me ve con los ojos muy abiertos antes de que se da la vuelta y se vaya corriendo sin darnos tiempo a reaccionar. Vuelvo mi mirada a él — Confié en ti cuando me dijiste que entre ustedes no había nada, pero me equivoqué.

—Y no te mentí, entre nosotros no hay absolutamente nada, las cosas no son como tú piensas.

—Te vi el otro día abrazarla James, pero preferí confiar en ti y todo salio mal, para mi todo está claro — vuelvo a susurrar al borde de las lágrimas.

Esto es demasiado. Amo a James, dios lo adoro pero no puedo perdonarle esto, se que para él ese no fue un beso cualquiera.

Sé perfectamente que James quiso muchísimo a Leslie y no se separaron por su propia voluntad sino por las circunstancias y aunque me duela admitirlo esto solo me confirma que el aún sigue sintiendo cosas por ella y contra eso yo no puedo hacer nada.

Estoy consciente de que cuando James y yo iniciamos nuestra relación el aún sentía cosas por ella y aunque tiempo después me aseguró que la había olvidado por completo, hoy sé que me mintió.

— Lau por favor... — suplica acercándose a mi con el rostro pálido.

— Terminamos.

— ¿Qué?

— Lo que escuchaste, ya no puedo estar contigo sí tu aún sientes algo por alguien más.

— Eso no es...

Apenas y logro escuchar su voz cuando me doy la vuelta con dirección a mi casa. Cuando ya he cerrado la puerta me deslizo por esta y es cuando me doy cuenta de las lágrimas rodando por mis mejillas.