Decisiones

Capítulo 6

El sol salía cada mañana y lo primero que se podía vislumbrar eran tres hombres sin camisa transportando materiales de construcción dentro de la casa; Laxus, Natsu y Gray como los "machos" de la casa se habían empeñado en querer participar activamente en todo el proceso de construcción, Jellal y Gajeel se ocupaban de la enfermedad de Lucy y de su correcta alimentación. Levy en cambio se ocupaba de los niños y de las comidas; de verdad que parecían una gran familia, unidos todos por el lazo inquebrantable de la amistad.

Un "¡DEMONIOS NATSU!" seguido por el estruendo de varias tejas cayendo al suelo y luego un quejido de Erza sacaron a los que estaban dentro de la casa de su paz, Levy corrió afuera seguida de Happy y Wendy; Gajeel y Jellal le siguieron y la pobre Lucy cuando quiso levantarse de la silla para ver lo que había sucedido fue sentada nuevamente por la mirada furiosa de Gajeel que la vigilaba desde la puerta.

- No te levantes – Fueron sus únicas palabras.

Cuando hubieron llegado afuera se encontraron a un Gray discutiendo efusivamente con Natsu, una Erza inconsciente por el golpe de las tejas en su cabeza y a un Laxus a punto de golpear para callarlos a todos.

- ¡CUANDO VAS A ENTENDER QUE DEBES MIRAR ALREDEDOR ANTES DE MOVERTE! – Gray le gritaba a Natsu que intentaba respirar y no prestarle atención porque si él se enojaba las cosas se saldrían de control. – ¡CASI MATAS A ERZAI! -

- Hey Gray, fue un accidente, si hubieras movido tu apestoso trasero del medio no hubiera chocado contigo – Natsu hablaba irónicamente y esto puso de peor humor a Gray, fue entonces cuando Jellal y Gajeel se metieron.

- ¿No ven que adentro hay una mujer embarazada que no puede recibir sustos? – Jellal hablaba con su inconfundible tono de seriedad. Levy los miro enojada y corrió a revisar a Erza.

- Gajeel ayúdame a llevarla dentro ¿sí? – Este obedeció a Levy y le ayudó a meter a Erza dentro.

- Dejen de pelear y trabajen – Las palabras de Gray hicieron que los dos hombres se pusieran a trabajar una vez más.

Cuando cayó la noche, todos estaban recién bañados sentados en la mesa compartiendo una rica cena que Levy había preparado, Lucy se había enojado muchísimo pues no la dejaban ni fregar un plato y ella después que Gajeel le había aplicado ese extraño medicamento que trajo se comenzaba a sentir mucho mejor y ya podía mantenerse de pie por más tiempo, de verdad que la mejoría se notaba en su rostro y en que ahora sonreía mucho más que antes, aunque a veces los muchachos podían pelearse unos con los otros terminaban riendo con una cerveza en la mano y ese era el caso de Gray y Natsu que aunque habían tenido un pequeño altercado esa mañana, ahora estaban abrazándose y cantando.

Todos estaban tan distraídos hablando que no se daban cuenta de las miradas fugaces de que Gajeel y Levy se regalaban, sonrisas traviesas y miradas compasivas que dejaban ver que tanto Gajeel (Aunque no lo quisiera reconocer) y Levy sentían algo especial el uno por el otro; fue entonces cuando Lucy se les unió al juego de miradas y en silencio les dijo que guardaría ese secreto, Gajeel le agradeció con una sonrisa y Lucy negó con la cabeza suavemente; Natsu se percató que Lucy sonreía y no era para él y la miro.

- ¿Lucy? – Pregunto cómo tonto.

- ¿Sí? – Respondió ella mirándole con ternura y llevándose el dedo índice a la boca le hizo saber que no debía hablar, Natsu entendió el mensaje subliminal y le sonrío traviesamente, fue entonces cuando se paró con la cerveza en la mano y miró a sus compañeros.

- Hoy (comenzó) esta noche quiero brindar con ustedes que son más que mis mejores amigos, son mis hermanos y créanme que sin ustedes yo no sería nadie, y no sería nadie sin ti, Lucy que eres mi vida entera – Se detuvo – La brisa de primavera, la claridad – La miro y con lágrimas en los ojos continuo - A ti, Que sufres cuando me esperas, que miras a las estrellas y suspiras por mí, Gracias por llenar mi vida de felicidad – Aquel momento emotivo hizo que el lugar se quedará en un espectral silencio – Laxus, Gray, Jellal, Gajeel y Erza; ustedes son mis hermanos, los hermanos que nunca tuve son ustedes, ese apoyo incondicional que me dan se los agradezco – Volteo a mirar a Happy y a Wendy – Happy – Le acarició la cabeza tiernamente – Gracias por regañarme cuando hago sufrir a Lucy, nunca dejes de hacerlo – Miró a Wendy y la cargo de la silla para abrazarla – Mi pequeña Wendy, mi amor y mi corazón; como te quiero – le besó sonoramente la mejilla y la niña rio; por último dirigió su mirada a Levy y le sonrió – hoy te quiero dar las gracias por ser la hermanita menor que nunca tuve; ah... un consejo para ti y para otro caballero que hay por allí – Miró fugazmente a Gajeel – Cuando uno espera demasiado las cosas no se tornan bien, el que no arriesga no gana – Con esto se sentó aun con Wendy en los brazos y gritó efusivamente – ¡SALUD POR TODOS NOSOTROS! -.