LA DECISIÓN DE UNA LOBA

NUEVE

Al ver eso, me asusté inmediatamente y apresuré mi paso hacia ellos; con Drew siguiéndome confundido.

Ya más cerca, pudimos empezar a distinguir de qué hablaban. Parecía que él la estaba intentando convencer de algo.

- Sabes que terminarás rindiéndote, así que deja de resistirte.

Él la agarró del brazo, y se notaba que estaba haciendo mucha fuerza, pues Bella, había empezado a llorar.

Entonces, sin dudar ni un momento, decidimos intervenir para evitar que él le hiciese más daño.

- ¡Ey, tú! ¡Detente!

Drew encaró a Nikolay con decisión.

- Niño especial, ¿tú también aquí? que agradable sorpresa-. Nikolay sonrió de forma repugnante.- Y junto a Bryana.

- ¿Qué se supone que estás haciendo aquí? Y deja a Bella de una maldita vez.

En ese momento vi una faceta de Drew que jamás se me hubiera imaginado. Se le veía furioso, y una extraña aura lo envolvía haciendo de ese momento, una cosa aún más extraña.

Cuando vi que Drew levantaba los puños preparándose para golpear a Nikolay, decidí intervenir.

- Drew, tranquilízate.- Puse una de mis manos en su pecho y le dirigí una mirada. Entonces me giré hacia el licántropo.- Y tú, deja tranquila a Bella. ¿Qué quieres?

Nikolay me dirigió una repugnante sonrisa y, dejando a Bella, se acercó a mí.

- Bryana. Bryana. Dulce e inocente cría. ¿Cuál es la razón por la que piensas que responderé a tus preguntas? Estoy aquí porque quiero y puedo.- Se giró, simulando que se iba, pero en el último instante me miró.- De hecho, deseo algo de ti, querida Bryana. Pero no hoy. Dentro de poco te buscaré, y espero que estés preparada porque cuando lo haga, no me detendré hasta conseguir lo que quiero.

* * *

Horas más tarde, me encontraba en la enfermería junto a Drew esperando a que Bella se despertara.

Al terminar de hablar Nikolay, Bella se había desmayado; aunque por suerte, Drew la había podido coger antes de que su cabeza golpeara el suelo.

De repente, una mujer joven se separó del lado de la cama de Bella y nos llamó.

Los dos nos acercamos a toda velocidad, preocupados por nuestra amiga.

- ¿Qué le ha pasado?

Esa pregunta por parte de la enfermera hizo que se me llenaran los ojos de lágrimas y el corazón de culpa. Sabía que era mi culpa que ella estuviera allí tendida en aquella estrecha cama sufriendo.

- Se ha desmayado camino a su habitación.

La rápida respuesta de Drew detuvo cualquier resquicio de dudas que pudiese tener la humana.

Me quedé petrificada mirándola, y mientras, Drew se acercó corriendo a su lado. Bella se veía pálida tendida en una cama demasiado estrecha.

Tenía una expresión serena aunque se podía vislumbrar su sufrimiento grabado en sus facciones. Parecía muy cansada, con unas ojeras muy marcadas, las cuales no había notado hasta ese momento; y entendí el porqué en cuanto la enfermera abrió la boca.

- Parece ser que se ha desmayado por estrés y por cansancio teniendo en cuenta la palidez de su piel, aunque no os lo podré decir seguro hasta que se despierte. Parece ser que no ha dormido lo suficiente estos últimos días, como se puede observar por las notorias ojeras que tiene a pesar de su intento de esconderlas con maquillaje, y su cuerpo ha decidido pasarle factura.

Mientras Drew le cogía una mano y la apretaba, yo me giré y me fui de la habitación.

* * *

¡Y volvemos a ser aquí! 

He decidido que voy a colgar un capítulo cada fin de semana, así que...

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¡Nos leemos!