Escrito en los genes

Capítulo 2

[9:55 am]

El Secretario de la Defensa Nacional, General Sergio Bustamante, caminaba agitado por uno de los pasillos del Palacio Nacional, la sede de la gestión administrativa del Presidente. Había recibido instrucciones de desplegar un operativo pacífico en todo el país que consistía en cerrar todos los establecimientos para evitar que la gente se fuera de dichos lugares y se perdieran el mensaje del Presidente. Algo que podía considerarse desesperado y que incluso podría resultar fatal.

Sin embargo, el Presidente había sido claro, y no toleraría ningún incidente. Con esto se entiende que había un ambiente de confusión en todo el personal de la presidencia de México. Era algo sin precedentes, y nadie tenía idea de lo que vendría en unas horas. Lo único que se sabía era que el mensaje dirigido a la nación era algo personal, algo que el Presidente mismo y no su gobierno tenía que comunicar a todos los mexicanos, lo que mantenía una intriga tremenda en el gabinete presidencial.

El General llega entonces a la entrada del despacho presidencial, la cual se encuentra cerrada y custodiada por dos guardias, estando también ahí presente el Secretario de Gobernación, Jesús Ibáñez.

-Buenos días Jesús-

-Buenos días General-

Se dan brevemente la mano.

-¿Sabes si ha llegado ya el Presidente?

-De hecho viene llegando General, está por entrar al Palacio-

-Bien-

-Quisiera preguntarle General, ¿cómo va el operativo para el día de hoy?-

-Los elementos del Ejército están ya listos a la espera de las órdenes del Presidente-

-Perfecto... Y dígame, ¿sabe usted el motivo del mensaje que el Presidente dará a conocer?-

El General Bustamante miró al Secretario, suspiró y con cierta incertidumbre contestó: -La verdad es que no tenemos idea Jesús. Sólo ha estado insistente en cuanto a su importancia, pero no ha ofrecido ni el más mínimo detalle, ni a mí ni a ningún otro miembro del ejército. ¿Qué hay de ustedes?-

-Estamos en las mismas General. Sólo se nos instó a seguir el protocolo de seguridad y confidencialidad que él mismo elaboró sin objeciones-

-¿Cree usted que sea algo grave?-

El Secretario se quedó pensando un momento. -Confieso que no sé qué pensar. Ésta administración ha sido muy diferente de las que me ha tocado vivir. Se han hecho bien las cosas como nunca antes, por lo que tengo muchísimas dudas-

-Está usted en lo cierto- dijo el General.

Y es que por primera vez en la historia de México se había erradicado prácticamente por completo la corrupción en todos los ámbitos existentes, además de haberse reducido hasta casi desaparecer la pobreza, la desigualdad social, la desnutrición y la violencia, aumentó el salario mínimo y su poder adquisitivo así como la calidad de vida de los ciudadanos, se liquidó por completo la deuda externa y se había acabado con el narcotráfico en el país, además de un crecimiento económico, de desarrollo humano y educativo sin precedentes, alcanzándose en el 4to, el 7mo y el 5to lugares en el mundo respectivamente en tan sólo cuatro años de gobierno. Aunque fueron los tres antecesores del presidente Octavio quienes sentaron las bases para aquellos cambios radicales que en un principio fueron lentos y graduales, fue en el gobierno actual donde comenzaron a implementarse como tal, teniendo un efecto inmediato en la vida de los 250 millones de habitantes de la nación.

Además, casi puede atribuirse a la política exterior mexicana que se ha seguido durante treinta años el hecho de que hayan cesado los conflictos bélicos internacionales casi en su totalidad, lo que ha colocado a México como un líder y ejemplo a seguir en el mundo.