Hola de nuevo crayolis :v como verán hoy les traigo un Song-fic del anime Kuroko no basket, me gusta mucho la canción que utilice para crear esta pequeña historia.
Una disculpa de antemano por cualquier error que se llegase a presentar.
Las imágenes, el anime y la canción no me pertenecen, todo a su respectivo autor.
Sin más ¡ha llegado la hora de leer!.
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I've been hearing symphonies
Before all I heard was silence
A rhapsody for you and me
And every melody is timeless
Life was stringing me along
Then you came and you cut me loose
Was solo singing on my own
Now I can't find the key without you
El sonido inconfundible de un piano sonaba en aquella habitación, los dedos agilmente acariciaban las teclas, un sonido exquisito al escucharlo, se sentía afortunado de poder compartir su vida con aquella persona que se encontraba tan concentrado en producir tan bellas melodías.
-Suena bastante bien Shin-chan- dijo y una sonrisa se dibujo en su rostro.
-¿Tu crees?- pregunto -Aun le falta algunos arreglos y una letra- menciono.
-Déjamelo a mi- le guiño el ojo y comenzó a tararear la melodía que hace unos segundos tocaba el peliverde.
Midorima se paro y lo tomo de las manos, Takao seguía tarareando, comenzaron un pequeño baile. Eran ellos dos en aquellas cuatro paredes, solo el piano negro de cola era testigo de tanto amor que se sentía en el aire.
-Te amo Shin-chan- lo miro con tal amor que el peliverde simplemente lo beso.
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And now your song is on repeat
And I'm dancing on
To your heartbeat
And when you're gone
I feel incomplete
So if you want the truth
-Oye, ¿entonces si llevo la comida?- pregunto el pelinegro.
-Mmm si, ya sabes que la cocina no es algo que se me de bien, no quisiera que llegues y la casa este en llama- dijo con una pizca de humor.
-Tonto- decía riendo -entonces llevare algo de sushi, bueno nos vemos, te quiero- se despidió.
-Y yo a ti- dijo y se escucho el típico tono de llamada terminada.
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Ya pasaba de las 5 y Takao aun no llegaba, seguramente estaba con Kise, casi siempre se lo encontraba en el sushi y platicaban horas, por eso siempre llegaba tarde y lo dejaba morir de hambre.
Pensó en marcarle y recordarle que alguien lo esperaba en casa.
-El numero que usted marco no se encuentra disponible-.
-Este tipo, seguramente se quedo sin batería- pensó.
Decidió llamar a Kise.
Pip...pip...
-Hola- se escuchaba la voz del rubio.
-Kise, ¿Takao se encuentra contigo?- pregunto, seguro de que la respuesta seria que si.
