Kathia -No confundas el placer con amor- (+18)--@BlueRoseAwards

Capitulo 1 - Segunda temporada.

Ya tenía seis meses de embarazo estaba tan feliz, mis pequeños crecían cada día más y más.

-¿Como están mis angelitos? - dice Leandro quien se sienta en la cama y acaricia mi vientre para nada plano, es como una bola de fútbol.

-Bien descansando - le digo con una sonrisa - ¿Que tal tu día? - le preguntó curiosa, extraño trabajar tanto, pero Leandro me prohibió intenté convencerlo pero fue inútil.

-Normal - me da un beso - y tu día ¿Que tal? - lo miro mal.

-Aburrido - digo dramática - Leandro deja ir aunque sea medio día a la oficina - le pido.

-De ninguna manera - me advierte algo molesto, pongo los ojos en blanco no entiendo su actitud, coje mi rostro con su mano - No te enojes, solo quiero cuidarte, a ti y a mis hijos.

-Lo sé, pero me estás sobre cuidando - le digo - Leandro no tengo nada que hacer, me muero del aburrimiento.

-No Kathia - se levanta - y se acabó esta discusión de ninguna manera vas a trabajar, no quiero que pase lo que pasó.

-Eso fue un sangrado normal - le digo también me pongo de pie - no fue por nada, la doctora dijo que a veces pasaba que no había de que preocuparse.

-No, no me voy arriesgar - me advierte - y no sigas debes descansar - no puedo más.

-¡No quiero descansar! - gritó cansada - ¡Estoy arta de no hacer nada!

-¡Kathia ya basta! - me grita - Le va hacer daño a los bebés - ya no más.

-Esto me está enfermando - le digo - mejor me voy.

-¿A donde vas? - me sujeta del brazo.

-Al baño - le digo y me safo de su agarre - ¿puedo? O ¿no? - sin más entró al baño, cierro la puerta dando un puertazo.

Se que Leandro solo me quiere cuidar pero está exagerando, aunque al recordar el día en que me dió un sangrado lo entiendo yo también estaba muy asustada.

Leandro no dejaba de verme mientras comíamos en el jardín, sus ojos azules que tenían ese brillo tan especial, no se apartaban de los míos.

-Deja de verme - le digo - me estás poniendo nerviosa.

-No puedo evitarlo - se escusa - Los has sentido ya o ¿no? - ya tenía cuatro meses y no sentía moverse a mis bebés, niego con la cabeza.

-No aún no - digo algo triste deseaba sentirlo ya, bajo la mirada a mi vientre ya estaba más grande, aunque no mucho y eso que tenía a dos bebés dentro de mí.

Abro mis ojos como platos al ver, sangre entre mis piernas, estoy sangrado, mis bebés.

-Kathia - me llama Leandro, alzó mi mirada mis ojos están llena de lágrimas ya - ¿que pasá? Kathia ¿Que tienes? - me pregunta preocupado.

-Estoy sangrado - logro decir - Leandro estoy sangrado - su rostro se vuelve pálido, se levanta rápidamente y en un segundo me carga en sus brazos.

-Todo va estar bien tranquila - me dice mientras me lleva al auto, nos subimos en los asientos de atrás mientras en chófer conduce.

-Por eso no los sentía - digo entre lágrimas - Leandro.

-Todo va estar bien - intenta tranquilizarme - ¡Date prisa! - le grita al chófer - Todo va estar bien, tranquila - podia ver la preocupación en sus ojos, sentir sus nervios en su cuerpo.

Lavo mi rostro, cojo mi vientre entre mis manos fue el peor día de mi vida, creí que iba a perder a mis bebés.

Salgo del baño Leandro esta sentado en la cama con la cabeza hagachada, me acerco a él.

-Lo siento - me disculpo, él alza su rostro y se pone de pie.

-Solo quiero cuidarlos, Kathia tu y mis hijos son mi mundo si algo les pasará yo no podría vivir - sonrió al escuchar sus palabras.

-Te amo - lo beso, envuelvo mis brazos en su cuello y poco a poco mi deseo crece y quiero más, intento sacar su camisa pero él no le deja - Por favor - le pido - no me has hecho el amor hace ya más de un mes - desde aquel día en que creí que iba a perder a mis bebés no en a tocado.

-No quiero hacerte daño - se excusa.

-No lo harás, te necesito - beso su cuello - necesito sentir tus labios por todo mi cuerpo, tus manos - lo miro a los ojos - Leandro por favor hazme el amor - le suplico - por favor - sus ojos azules me muestran deseó pero también preocupación de que me pueda hacer daño, pero la doctora dijo que si podía tener relaciones pero Leandro es un exagerando.

-Esta bien - sonrió - pero si te hago daño me lo dice, y paro.

-Lo prometo - sin más siento sus labios devorar mi boca, mientras sus manos recorren mi cuerpo provocando llamas dentro de mí, tenía tan ganas de sentirlo dentro de mí, de ser suya.

Sus manos sacan mi vestido, dejandome solo con mi lencería, no se porque pero me siento más vulnerable al tacto de su piel, mis jadeos son seguido y no puedo evitarlo. Si Leandro me pidiera que hicieron silencio no podría hacerlo.

Me recuesta en la cama sus labios bajan a mis pechos, él deseaba esto igual o más que yo, mordía mi pechos mientras yo gritaba y arqueaba mi espalda, sentía como todo mi cuerpo ya era todo fuego, sus mano bajo a mi sexo rozo mi clítoris y no pude evitar gritar de placer, estaba más susceptible que antes, sus caricias sus labios, provocan el doble de exitación ahora en mi.

Sus dedos comenzaron a moverse en mi interior mientras sus labios no daban tregua a mi pechos, ya no podía más mi cuerpo estaba explotaba de placer, hace tanto que no sentía esto que ya no podía más y me corrí.

-¡Ah! - grito él deja mi sexo húmedo y mis pechos, sus ojos azules se posan en los míos mientras sus labios se curvan en una sonrisa.

-¿Contenta? - me pregunta asiento con una sonrisa.

-Mucho - ya deseaba sentirlo dentro de mí.

-Me alegro - su rostro cambia y tengo el presentimiento de lo que va hacer - no lo hagas - le pido.

-Lo siento, pero no puedo - se disculpa separándose de mí y poniéndose de pie.

-Leandro no me hagas esto - le pido mientras me siento en la cama.

-No puedo - se disculpa sin más sale de la habitación.

-No me puedes dejar así! - le gritó pero no le importo y se fué, maldito idiota.

¿Como que no puede? Esque acaso ya no le gustaba, me pongo de pie y camino así mi espejo y me observó estoy aparte de mi barriga bueno si he subido un poco de peso, esque a caso ya no me deseaba o qué.

Hola espero que os guste😉😊.