30 días de OTP (Sinja version)

Día 8

Día 8: haciendo compras
Universo/Línea temporal: Magi: Sinbad no Bouken

ADVERTENCIA: posibles spoilers del manga de Magi: Sinbad no Bouken.

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Ja'far

Tras varios meses navegando decidimos parar en el primer puerto que encontráramos para poder abastecernos con provisiones en el mercado, Hinahoho dijo que se quedaría en el barco junto al resto, así que Sin, Yamuraiha, Sharrkan, Masrur y yo salimos a encargarnos de ellas.

Había pasado un tiempo desde aquella batalla que cambió muchas cosas para nosotros, pero aún así tuvimos que seguir adelante más que nada por Sin (quien era el más afectado de todos por lo sucedido con Parthevia).

A pesar de todo, cinco años habían pasado desde que conocí a Sin y tres desde que su comportamiento hacia mí cambiase de manera... drástica, por decirlo de alguna manera. Para explicarlo, al despertarme cada mañana me encontraba a Sin durmiendo a centímetros de mí, por lo que por inercia siempre terminaba atacándolo con mis cuchillas (no es culpa mía, simplemente mis instintos me hacen actuar de esa manera).

No entiendo la razón de su comportamiento, él simplemente se me queda mirando durante largos periodos de tiempo, y no solo eso, sino que la invasión de mi espacio personal ya se ha vuelto también muy común en él.

—Sin, por favor, ¿podrías alejarte un poco? —suspiré con resignación al sentirle literalmente a muy pocos centímetros de mí por detrás.

—Eh... Pero si no es tan malo que estemos así de cerca.

—Sin, te lo he dicho miles d-

—¡MIREN! ¡ANGUILAS ASADAS! ¿¡PODEMOS COMPRAR ALGUNAS!? ¡PORFA! —Yamuraiha se nos acercó corriendo con ese brillo de emoción común en niña pequeña en sus ojos, a lo cual simplemente suspiré.

—Claro, pero no compres solo para ti, comparte también con Sharrkan y Masrur si vas a coger algunas.

—¡Muchas gracias Ja'far! —se abalanzó hacia mí en un efusivo abrazo para, posteriormente correr hacia los dos nombrados anteriormemte y comprarse una anguila para cada uno.

Observé su comportamiento con ternura, era agradable poder ver otra ves la sonrisa de todos a pesar del dolor reciente que cargamos con nosotros. Cuando miré a Sin de reojo el tenía una sonrisa que no sabría describir exactamente de que era, aún así simplemente lo ignoré y me separé del grupo para poder comprar algunas cosas que Hinahoho y Drakon me habían pedido expresamente que les comprara y por ello no quería que nadie se enterara de nada. Yo no quería comprar aquellas... cosas, pero no me quedó de otra ya que soy el segundo mayor del grupo que ha salido a comprar y como que ellos no se fiaban de Sin para este tipo de asuntos.

Cuando la hora del toque de queda se fue acercando me dirigí al punto de acuerdo que habíamos decidido antes de empezar con las compras, pero no esperé que Sin apareciera de la nada con un ramo de flores y me lo entregara así sin más.

—Sin, ¿qué e-?

—Quiero decirte que me gustas y que quiero que seas mi pareja.

<<Será idiota... no hacía falta este detalle para que me lo pidiera.>>

—Sin idiota... —murmuré sacando algo de entre las cosas que traía conmigo—. Acéptalo, no pude evitar pensar en tí en cuánto lo vi y pues... lo compré —le entregué a Sin un muñeco de madera que había encontrado que tenía un cierto parecido a Sin con el equipo djinn de Valefor.

Porque mi mente se desviaba al pensar en él, simplemente es algo llamado amor.

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~Cinna fuera~