La fórmula del amor

Sueños y pesadillas

Una vez James había acompañado a Angelo al encuentro de Ashley, un poco sofocados ambos por la prisa que tirne ya  que Askey los espera bastante enfadada puesto que se habían demorado demasiado.

-Por fin vais dando señales-exclama con una pizca de malhumor en su voz al ver como Angelo entra en el aula mientras que sus otros tres alumnos aparecen por el final del pasillo.

-Lo sentimos mucho- se disculpa Sophy mientras entra dentro del aula acompañada de Clary.

-¿Y tú Marcos? ¿Acaso no piensas entrar?- pregunta Ashley al ver a Marcos detenido fuera de clase.

-Siendo sincero, no-masculla mientras la repasa con la mirada de arriba abajo -debo irme, es más me voy-habla antes de poner rumbo hacia el lado opuesto del aula de castigo.

-No te vas a ninguna parte que no sea esta aula-habla con tono autoritario y Marcos sin rechistar entra al aula y se sienta junto a sus dos amigas.

-Qué sepas que como pierda el último autobús me llevas tú a casa-murmura Marcos y Ashley responde:

- Tranquilo, te he escuchado, asique te llevaré yo. Angelo puedes entregarme el examen

-Aquí tiene- responde Angelo agotado.

-Gracias, mañana tendréis los resultados-les informa.

-Quiero irme, ya¡-exclama Marcos

- Tranquilo Marcos ya nos vamos, los demás podéis iros a la habitación, tenéis terminantemente prohibido salir de ella- ordeno Ashley.

- Vale, contestan todos a la vez.

Los 3 compañeros que dormían en la universidad se fueron acompañados por James a sus respectivas habitaciones, primero pararon en la habitación de Clary y Sophy:
-    Buenas noches- Dice James.

-    Adiós hermano, adiós Angelo- Dijo Sophy

-    Adiós James- Dijo Clary sin mirar a Angelo

Angelo ni se inmuta ante la despedida de Sophy, tan solo está centrado en llegar a la habitación y escribir su diario.

Ambos van hacia la habitación y empiezan ambos a desvestirse y ponerse el pijama, pero Angelo de forma descarada no puede evitar mirar el tonificado cuerpo de James, con cada uno de los abdominales bien definidos, un v perfecta y una gran espalda musculosa, con unos pectorales voluminosos y bien marcados.

James se da cuenta de que Angelo lo está observando y le pregunta:

-    Angelo, ¿Qué miras?

Angelo no se da cuenta de lo fijado que está de que James le está preguntando:

-    Angelooooooooo!!!!!, exclama James

-    ¿Queeeee?- Pregunta Angelo fastidiado por haberlo descentrado de esas vistas.

-    ¿Qué mirabas?, ¿Me estabas mirando?- Pregunta James

Angelo sonrojado por las preguntas no sabe que contestar, se queda totalmente en blanco y decide por evadirle:

-    Nada que sea asunto tuyo y no seas tan creidito, no te estaba mirando, soy hetero.

Hay un bulto en los pantalones de Angelo y el no sabía de que se trataba porque el no estaba centrado en esos temas y James para picarlo le pregunta:

-    Entonces, si no me estabas mirando, ¿Qué es ese bulto?, ¿Te has empalmado?!- dice James

-    Que dices de empalmar, ¿Qué es eso?, dice Angelo furioso, no tenía explicación Angelo para ese bulto y pensando que tiene el movil en el bolsillo, le responde: