Zafiro y Avellana

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Era un día de lluvia cuando tus ojos color zafiro atraparon mi corazón. Al principio desconocía todo clase de sentimientos, si reía parecía que estaba llorando, si me enojaba todos creían que estaba triste, nunca nadie me entendió completamente, y nunca nadie trató de entenderme. 

Solo tú, mi rebelde zafiro, me brindaste la mano cuando parecía que todo estaba descontrolado, me abrazaste cuando todo el mundo me dio la espalda. Y solo tú lloraste conmigo cuando todo parecía perdido. 

Jamás olvidaré los momentos más felices que viví contigo, porque tan solo es tú calidez la que permanece conmigo. Ayer llegaste a mi, hoy nos juramos amor verdadero, pero mañana seguramente ya no estaré

Pensarás que soy la persona más vil del universo, no pido que me perdones, porque sé que ya me has perdonado, no pido que me odies porque sé que siempre me has amado; solo te pido corazón mio, que donde quieras que estés nunca dudes de cuanto te amé. 

Hoy me marcho lejos, tú sabes bien a donde voy; no es mi decisión abandonarte, porque es mi destino hacerlo. Tal vez llores como un niño al saber que he partido. Yo también lloraré por ti, por dejarte y por saber que ya no te veré. Ojala pudiera vivir contigo para siempre, pero es una lástima que todo termine de esta manera. 

Recuérdame cuando estés despierto, cuando duermas o inconscientemente; y aunque no pueda vivir contigo infinitamente, nuestro amor vivirá por la eternidad. 

Soñé contigo todas las noches de mi vida, mañana definitivamente tú lo harás por mi. 

Adiós, este no es un hasta nunca, es un hasta pronto, porque me aseguraré de esperarte los años que sean necesarios en las puertas del paraíso.

Atentamente 

Tus ojos avellana 

Diarios del alma ||TERMINADO||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora