Capitulo 1

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Las personas que estan destinadas a estar juntas siempre hallaran el camino para encontrarse. Es posible que haya bifurcaciones a lo largo del recorrido, pero jamas estaran perdidos

~Neil en multimedia~

Recurdo perfectamente la primera vez que lo vi. Aquel primer momento en el que nuestros caminos se cruzaron. Ese instante se grabo en mi mete con una indeleble claridad. Tan nitido como el cristal mas fino atravezado por brillantes rayos de sol

Tenia diez años cuando mi hermano Ian lo trajo a casa para cenar. Se sento en frente de mi en la mesa familiar. Seguramente le pareci una idiota que lo miraba sin pestañea, pero no parecio importarle que tuviera los ojos clavados en el. Menos mal, porque nisiquiera entonces pude dejar de mirarlo. Neil me resulto guapisimo desde aquella primera vez que lo mire con mis ojos de niña. Era simple y sencillamente guapo

Que tuviera siete años mas que yo carecia de importancia, tampoco me molesto que no mostrara el menor interes por la cria desgarbada con aparatos en los dientes que yo era entonces, sin duda no era nada guapa. Me guiño un ojo cuando me pillo estudiandolo fijamente por encima de los deliciosos bollos de mama. Recuerdo que aquel gesto hizo que notara algo extraño en mi interior, como si se comprimiera y ablandara a la vez. Me senti timida y cohibida, pero supe que acababa de conocer al chico con el que me casaria algun dia

Si, es cierto, fue asi de simple. Me enamore de Neil MacNus cuando era niña. Estoy segura de lo que senti, tan segura como aquellos sentimientos no eran correspondidos. Lo vi ir de novia en novia durante los años siguientes, pero no recuerdo si me dijo algo la primera vez que nos vimos. Se que miro a mi madre de manera educada y que le agradecio la deliciosa cena. Aquello me impresiono. Incluso a los diez años note la profunda gratitud que note en su interior hacia mi madre de haberle aceptado en nuestra casa. Me di cuenta de que Neil no estaba acostumbrado a disfrutar de acogedoras cenas familiares; apreciaba algo que yo daba por sentado todos los dias. No era mas que un amigo de mi hermano que habia salido de Dios sabe donde, cuyos problemas no conociamos, pero lo cierto es que fue mucho mas que eso desde el principio. Por lo menos para mi

Neil volvio a cenar con nosotros muy a menudo a partir de aquel dia. A veces, me parecia que tenia un nuevo hermano que acababa de venir a vivir con nosotros. Otras, reaparecia tras haberse ausentado durante algunas semanas, con una expresion vacia en sus ojos oscuros. Todo indicaba que su vida familiar era un mierda. No tenia madre, solo un padre que no se preocupaba por el. El mio tampoco estaba demasiado en casa, pero no era porque no nos quisiera, si no porque su trabajo lo obligaba a viajar mucho. Por supuesto, yo le echaba mucho de menos, asique me figuro que era natural conectar con una figura masculina mayor que yo, que siempre me trataba con amabilidad y no actuaba como si tuviera la peste. Neil me llamo cherry girl desde el principio. Por el color de mi pelo. Tengo que reconocer que tenia razon. Mi cabello era mas o menos del mismo color que una de esas cerezas casi negras a las que la luz arranca brillos rojizos, las que los ingleses llaman cherry. El me dijo en una ocasion que mi cabello era muy bonito, y esas palabras fueron suficientes para que mi autoestima floreciera. Acepte su halago y lo atesore en mi interior

Tambien me acuerdo la primera vez que me toco el pelo. Mis recuerdos son tan nitidos como el dia en que ocurrio, y no podia olvidarlo aunque quisiera... porque esa fue tambien la primera vez que me rescato...

El campo de cricket se extendia desde el limite del bosquecillo hasta una considerable distancia. Cuando tenia once años durante una veraniega tarde de domingo, me sente en la valla para ver jugar al equipo local de cricket. Neil e Ian tambien estaban por alli. Les habia visto pasear por los alrededores, hablando con otras chicas y con sus amigos. Yo me sentia feliz de poder ver el partido desde mi pocicion sobre la cerca, lejos de la gente. Supongo que disfrutar de un dia calido, sin el agobio de una multitud y disponiendo de una buea perspectiva, se habia convertido en un bien escaso. De pronto se acerco a mi un grupo ruidoso y desagradable y, siendo yo tan pequeña, fui absorbida por el

Cherry GirlDonde viven las historias. Descúbrelo ahora