7.Distancia

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Y  a la que me di cuenta, Ray y yo llevabamos tres meses. Si, tres meses de amor, de sexo y de estudiar. Eran los finales del primer cuatrimestre, y dos días después me marchaba a casa de mis padres, cosa que aun no le había dicho  Ray. Mientras pensaba en como se lo diría, Rose interrumpió mis pensamientos.

-¡Vamos Jud! Es el ultimo examen. Vaya fiesta nos espera esta noche. -me dijo de forma alocada.

-Si- le sonreí. -Rose ¿Cómo le dirías a Klein que debes irte a casa de tus padres en navidad?- le pregunté.

-¿Te vas?- le tapé la boca, menudo grito acababa de soltar.

-No grites. Y si, mi madre se muere de ganas de verme y yo a ellos. -le respondí susurrando.

-No se como puedes decírselo, pero que sepas que no va a dejar que te vayas. - me dijo convencida.

-Ya... lo mismo me dijo con lo de Alex, y que siempre fuese con vosotros y mira. -me gusta desafiarle.

-Te lo estas tomando como un juego Jud, Ray va enserio. Tu inténtalo si quieres...No te lo recomiendo. Luego hablamos. Suerte.

Intenté acabar lo mas rápido el examen, Ray lo acabó en menos de media hora. Yo lo entregué tan rápido como él.

-Hemos acabado pequeña. Debo irme, esta noche lo celebraremos. - me dio un beso y se marchó.

-¡Hey!¿Como ha ido?- por lo menos tenia a Alex.

-Bien. ¿Y tu?- le dije.

-Bien. Esta noche hacen una cena los de la universidad, ya sabes que no vamos a vernos por navidad así que... ¿te vienes?-dijo implorándome.

-Ojala, pero debo irme con Ray. Ya sabes... -me da pena tener que esconderme de Alex.

-Entiendo. No me gusta con esa pandilla, son muy raritos.

-No los juzgues- dije sonriendo. -No los conoces.

-Ya, pero seguro que ellos me ponen a parir, sobre todo tu novio Ray.

-Vamos, déjalo- le di una palmada cariñosa. ¿Comemos juntos?- le pregunté.

-Si, me encantaría. Pago yo.- le hice morritos indicándole que no. Cuando ya nos íbamos, Vanity me llamó.

-¡Jud, espera!- me giré.

-¿Que quieres?- intentaba llevarme con Vanity bien, pero a veces era tan seria que era imposible, incluso con su hermano era así.

-Esta noche vendrás. Espero que te sientas cómoda y... -quería comerme la oreja.

-Si, no te preocupes. Iré con Ray.

-¿Va a morderte?- Vanity insistía mucho con eso.

-No , no lo hemos hablado, así que no. -le respondí.

-Estaría bien que lo hiciese, así os lo quitáis del medio...

-¡Haré lo que yo quiera! Solo me hablas para preguntarme eso. Es nuestra relación , no te metas, al igual que yo no me meto con la tuya y la de German. Adiós.

Cogí a Alex y me fui, siempre estaba igual, aquel tema me tenía harta.

-¿Por que siempre Vanity y tu os habláis así?¿No os lleváis bien?- Alex era muy cotilla. Además, aquel no era un tema de comida.

-Intento que si, pero chocamos mucho. Tengo muchas ganas de ir a casa y ver a mi familia. -Siempre quiero cambiar de tema con él. 

-¿Ya lo sabe Ray?-me atragantaba cada vez que Alex sacaba el tema.

Tu me darás la vida. ReeditadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora