¡Huye! Victoria [Editando•]

CAPITULO 1: Despiertame ¿Quieres?

*DOS AÑOS DESPUÉS, COUPEVILLE/WASHINGTON*

Mi habitación era demasiado obscura, ya tenía tiempo de que la luz no entraba a ese lugar; decidí levantarme de mi cama, normalmente siempre esperaba a que Rose viniera y me despertara pero las cosas han cambiado, ya nada es igual. Baje las escaleras aún en pijama, ahí encontré a Rose sentada en el comedor.

-Buenos días- Aún no se porqué la saludo, no sirve de nada-Creo que comeré- Tome aire- Algo-Suspire.

Me acerque a la alacena, tome la caja de cereal y me serví un poco, tome el plato e iba a subir a mi habitación cuando escuche que Rose me llamaba.

-Victoria- Su voz era suave -Te aviso que me voy todo el día-.

Esto me sorprendió, tenía meses que no salía -Esta bien- Dije con suavidad. No entiendo porqué trato de ser amable con ella, han pasado dos años desde que perdió toda confianza y cariño en mí, su único interés era en seguir recriminándome aquel asesinato haciendo que todo el pueblo se enterara de que yo lo había hecho, sabiendo que soy inocente, en fin mi reputación era intachable-mente mala.

-Ten cui...- iba a terminar la palabra cuando se escucho un portazo, en realidad si ella había perdido su cariño en mí y no lo iba a recuperar, me encargaría de hacer lo mismo.

*******

Había decidido tomar una ducha. Me desnude, puse el agua caliente en la tina, y me metí lentamente; debo decir que ni siquiera fue una ducha, simplemente fue un intento de relajación fallido, ha pasado mucho tiempo y aún no puedo procesar lo que paso, por más que trato de tranquilizarme esa escena vuelve a mi mente, esa escena que aún no es clara, esa escena que se repite constantemente dejándome con aún mas dudas de lo que paso, y aquella escena que me recuerda el momento en el que mi vida cambio por completo.

Al salir del baño,me vestí con lo primero que encontré en el suelo: una sudadera gris, un pantalón que usaba para hacer deporte, mis tenis blancos y me coloque la mochila que ocupaba cuando iba en secundaria. Antes de salir de casa tome un poco de dinero y me mire en el espejo, no había notado lo mal que me veía, en realidad nunca fuí una chica a la que le gustara arreglarse mucho, pero con el tiempo me había descuidado por completo, mi rostro ya no se parecía al de una chica de diecinueve sino al de una jovén un poco mayor, así que con los dedos me erice el pelo y trate de arreglarlo un poco aunque no hice mucho.

Me dirija a la biblioteca por un libro de química, debo de admitir que con una mala reputación no tengo muchos amigos entonces no me esforze en inscribirme en la Preparatoria., sinceramente soy muy lista, es por eso que me he encargado de estudiar por mi cuenta, en casa o en la biblioteca.

Coupeville es un pueblo muy pequeño, todos se conocen entre todos, es por eso que soy muy conocida aquí, no puedo pasar desapercibida por ningún lugar sin que digan cosas sobre mí, me griten o me lancen indirectas.

-¡Asesina!- Escucho un grito que viene de una tienda de antigüedades a unos tres metros de distancia, haciendo que voltee, es Jhon Charles el hijo del dueño de la tienda, un chico de mi edad con el que iba en secundaria, recuerdo que yo formaba parte de su grupo de amigos, incluso llegamos a ser de los mejores;( en realidad mi mentalidad era muy ingenua) no hice caso a su comentario y seguí caminando cuando escuche una vez más.

-A s e s i n a- Grito remarcando cada letra; me sentía mal,enojada, normalmente esos comentarios no me afectaban tanto pero esta vez era diferente, quería correr y llegar a la biblioteca lo antes posible, pero mi orgullo es más grande y no quería verme débil, seguí caminando cuando sentí un golpe muy fuerte en mi espalda, me había lanzado una piedra, esto me enfureció haciendo que parara de caminar y me quedara quieta.

-Te estoy hablando asesina- Jhon se acerco -¿Acaso matar gente te dejo sorda?- Mi furia crecía quería golpearlo.

-¿Qué quieres Charles?- Le respondí en un tono frió.

-Lo mismo que todos Richardson- dijo con un tono serio -¿Por qué la mataste?

-Sabes que no lo hice- dije calmandome un poco -Pero bueno que puedo esperar de alguien como tu, es obvio que creas todo lo que escuchas- Finalice, colocando mi mano en su hombro y dandome media vuelta.

Me sentía bien, creo que era la única vez que había dejado en su lugar a una de las personas que se la pasaba insultandome, si, aunque suene ridículo, esta era la única vez que me había podido defender.

-No te creas- escuche la voz de Jhon detrás mio -Esto no se quedara así Victoria- su voz ya se escuchaba lejos.

******

Cuando llegue a la biblioteca me encontré con Paulette; una mujer delgada de unos setenta años, de estatura mediana (aproximadamente de 1.62) con un cabello blanco como la nieve que brillaba cada que se ponía cerca de una ventana. Paulette era la única persona con la que hablaba de vez en cuando y me trataba bien; ella era la única persona que creía mi inocencia.

-Hola linda- dijo con su dulce voz.

-Hola- respondí -Busco un libro de ciencias, ¿Sabes donde están?

-Primer pasillo a la derecha- hizo una pausa -Por cierto, creo que hoy es tu día de suerte, te llego un sobre de Filadelfia- finalizo entregandome el sobre con una sonrisa.

El sobre era amarillo y en la parte superior decía:

Victoria Richardson W. COUPEVILLE, WASHINGTON D.C

-¿Es encerio?, sabes cuanto he esperado por esto- sentí como en mi cara se dibujaba una sonrisa, lo cual no sucedía muy amenudo.

-Espero que sean buenas noticias- dijo Paulette con una pequeña sonrisa.

-Igual- dije y haciendole un gesto de gusto a Pulette me dirigí por mi libro.

Me moría de ganas de abrir el sobre, pero aún no era el momento indicado; guarde este en mi mochila y seguí buscando mi libro. Habían pasado cinco minutos para que encontrara mi libro, el cual estaba en la última repisa del librero; tome una silla para poder alcanzarlo cuando escuche que la puerta de la biblioteca se abría bruscamente haciendo que se escucharan las voces de un grupo de jóvenes.

-La ví entrar aquí- dijo un joven.

*Mierda* pensé, era la voz de Jhon, me había seguido con su grupo de amigos.

Entre en pánico, no me había dado cuenta de lo que había hecho, al tratar de "enfrentarme" con Jhon, era obvio que no quería que las cosas se quedaran así, creo que lo que quería era venganza, aunque fuera por algo muy absurdo.

-Se que sabes que esta aquí- dijo Jhon con un tono frívolo.