Era un dìa como todos los demás,llegué a mi casa y entè al lado de la ventana. Al cabo de unas horas de que no pasara nada,me fuí a dar una ducha.Una ducha caliente,para despejar todo de mi mente,y pensar.Pensar en como podía gustarme mi enemigo. ¿Era eso posible? Si,lo era,. ¿Era eso normal? Depende quien seas.
Luego de la ducha,tomé un libro del gran librero de mi habitación y me dispuse a leerlo.Pero a veces,cuando había ruidos,me distraia e iba a mirar por la ventana,a ver si estaba Jeff.Pero nunca estaba.Era un día fresco,el cielo estaba cubierto de nubes,casi a punto de llover.Esos días,me encantaban.Salir a caminar,con la brisa golpeandome la cara y sacudiendo mi pelo,el olor a pasto mojado luego de la lluvia.Era lo mejor. Decidí ir a una cafetería,ya que en mi casa,no había mucho para hacer.
En la cafetería,luego de ordernar,vi una silueta. ¿Serìa Jeff? No lo sé,pero voy a averiguarlo Me dije. Salì disparada,con una rapidez casi sobrehumana para seguir a la silueta.Toda la cafetería dió un giro,y todos de repente,estaban asustados.Debía ser por la velocidad a la que corría. Seguí a la silueta hasta un callejón. Ahí,la acorrale.Era una silueta humana...o algo así.Me acerqué a ella y la persona tenía una capucha blanca.
-¿Jeff? -Pregunté.
-¿Jane? -Dijo echando su capucha hacia atrás.
-¿Qué demonios hacías allí?
-¿No vas a matarme?
-¡No evites mis preguntas!
-Bien.Fui allí para buscar una víctima. -Hizo una pausa-¿No vas a matarme?
-Demonios,no.Esta vez la dejaré pasar. -Dije y luego le di un zape- Eso fue por lo de la víctima
-¡Jane!
-¿Qué? Agradece que no te maté- ¿Pero de verdad quiero matarte? Se me hizo un nudo en la garganta. Si y no.Lo quería matar por venganza pero no porque me gustaba... algo.
Él soltó una risita juguetona.Parecíamos gente normal,pero los dos sabíamos que no lo eramos.
