Cap 4: Encerrado.

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...Kathering...

¿Quién carajos es Kathering?

Alan sabia que el bluetooth solo captaba algúna señal desde unos escasos metros de distancia, así que, quien fuese la tal Khatering debería estar a menos de una milla de ahí. Esto le parecía sumamente rato, puesto que sabia que la casa estaba prácticamente aislada, se preguntaba que había mas allá de esos matorrales y grandes arboles, y obviamente no se quedaría con la duda, se cambió tan rápido como pudo, tomo su móvil y bajo por las escaleras, traía puesta una remera muy ajustada que dejaba ver su buen estado físico, él era así naturalmente, nunca hizo nada de ejercicios ni nada, tenia además un short sport tres dedos encima de la rodilla, y unos calzados deportivos, todo eso lo encontró en la casa, porque como ya lo habíamos mencionado antes, Sandra no le dio tiempo de empacar nada.

Cuando llego a la puerta. Se detuvo.

-¿¡¡ QUE!!?

Estaba cerrada, por impulso y sentido común se dirigió a la que da al patio.

Decepción....

También estaba cerrada, no podía creerlo, Sandra lo había dejado encerrado.

-¿Que cree que soy, un animalito al que puede mantener encerrado aquí?

**

- Creeme Sandra, todo va a salir bien, no tengas miedo, ¿que no confías en mi? ¿Cuando te he fallado? Es solo una vieja indefensa que no entiende nada, ¿que puede salir mal? Solo debemos decirle que los hijos de su difunto marido ganaron el caso y listo! No creo que haga ningún tipo de pregunta por la cara se le ve que es una ignorante, todos saldremos ganado, nosotros nos llenaremos los bolsillos con la fortuna del viejo y nos sacaremos de encima a la insoportable cincuentona esa... Piendalo Sandra, todos sacaremos beneficios de esto.

Sandra va manejando por una solitaria carretera recordando como se metió en esta pesadilla, ahora no solo todo había salido mal, sino que su hijo la odia, y como si fuera poco por ahora esta sin trabajo, Ruben sonaba muy convencido de que esto tendría solución y que pronto se acabaría, que solo era cuestión de tiempo, pero Sandra no podía e tender como harían para salir de esta, en todos los años que trabajaba en esa profesión nunca había hecho nada parecido, es por eso que tenia jma reputación intachable, sabia que después de esto ya no la tendrían en cuenta para muchas cosas.

¿Como Ruben puede sonar tan seguro? 

Cuando él le dijo a Sandra que lo mejor seria que se fueran de la ciudad ella solo obedeció por el momento de desesperación, en ese momento solo pensaba en que no quería que Alan fuera a visitarla en la cercel con quien sabe que cantidad de guardias vijilandolos evitando cualquier contacto físico entre ellos, pero no podía entender que si supuestamente todo se podría solucionar Ruben los había mandado tan lejos, estaban huyendo, y de cierta forma esto no ayudaba en nada, es mas, lo empeoraba.

Sandra es sacada de todos sus pensamientos, cuando el sonido de su teléfono móvil rompió su armoniosa paz...

Alan llamando...

En el fondo Sandra sabia para que llamaba, Alan siempre tuvo un carácter muy impulsivo, y sabia que no iba a aceptar el hecho de que ella lo haya dejado encerrado, trago grueso y contesto.

Llamada telefónica.

- Ho...

- ¿!!Porque carajos me dejaste encerrado Sandra!!?

- Alan..yo...

- ¿Crees que después de todo lo que me sacaste también puedes sacarme mi libertad?

- Alan, escuchame... Puedo explicarlo.

- Por supuesto que vas a explicarlo, ¡y lo harás ahora mismo!

- Yo.... Ehmmm.. Simplemente no podía dejar que hicieras lo mismo que la hija del señor Julio.

Cercajada - ¿Y exactamente en donde piensas que podría escaparme? Ah, ya se... Viviré en un árbol y me alimentaré de los huevos de los pajaritos.

- Alan, lo siento, no lo pensé de esa farma...

- Tu nunca piensas nada.

Lágrimas empezaban a brotar nuevamente de los ojos de Sandra, le dolía que su hijo la tratara de esa manera, ella sabia que en realidad se merecía, pero eso no disminuía el dolor.

- Alan, de verdad solo lo hice porque te quiero y no estoy dispuesta a perderte -

- ¿Donde están la copias?

- ¿Que copias?

- La de las llaves, obviamente. Todas las casas tiene copias de las llaves, donde esta la de esta.

- Ahhh, las tengo yo, aquí en mi manojo de llaves, traigo las dos -

- Enserio empiezo a creer que me odias Sandra -

Fin de la llamada.

**

Alan se encuentra furioso, no entiende porque Sandra hizo eso, ¿Dejarlo encerrado? Es estupido... ¿Donde iría? No había donde huir, en que momento de la noche a la mañana su mama se había convertido en su peor enemiga. Parecía que solamente buscaba molestarlo.

En fin, eso no importaba ahora, lo importante era salir de ese encierro, quien necesitaba unas malditas llaves, la casa también tenia ventanas.

Se dirigió a la ventana de la sala.

Cerrada, con seguro.

Fue hasta la ventana de la cocina.

Cerrada.

Se dirigió a la ventana de su habitación.

Cerrada.

Hizo lo mismo con todas la habitaciones del segundo piso.

Cerrada... Cerrada... Cerrada...

- Maldita sea! ¿Es enserio? ¡Que he hecho tan mal en esta vida!

Al ver que no podria salir de aquella casa, que mas bien parecía un calabozo del que no podía salir, se resigno y acepto que por ahora, la tal Kathering tendría que esperar, además el nombre del dispositivo desapareció, entonces ya no había motivos para salir de la casa.

Resisgnado se recostó en el sofá de la sala con los pies sobre la mesita que estaba en frente y... Se durmió.

Lo despertó la vibración de su celular, desbloqueo la pantalla y pudo ver que de nuevo estaba allí... Ese usuario de nuevo... Kathering...

-¿Quien sera kathering? - piensa -

Entonces sucede algo que de verdad no se lo esperaba. Katherin estaba tratando de comunicarse con el.

¿Aceptar archivo de Khatering?

Le había enviado una imagen, sin pensarlo dos veces pulso.

Aceptar...

Cuando la imagen termino de tranferisrse de un dispositivo a otro... Lo que pudo leer lo dejo muy perturbado.

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⏰ Última actualización: Oct 26, 2017 ⏰

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