Más hueona y no nazco; Chilensis.

Amigas

- Hueona necesitábamos salir.

- ¿Si o no?- se metió una papa frita a la boca- ¿Qué mejor que celebrar tu cumple así? Aunque parece que me estoy celebrando yo po.

Me reí. Llevaba más de una hora hablando con la Vale en una mesa McDonald's. Habíamos pedido comida y dos copas de helado, y al final nos habían dado una más, porque se demoraron caleta al entregarlas y cuando nos la vinieron a dejar al camarero se le cayó la hueá.

Estábamos planeando el viaje a Colombia; cada vez quedaba menos para ir y estaba super nerviosa hueón, en serio. Pero no era un nervio malo, es de esos que te dan cuando vas a alguna hueá que te gusta (como fantasilandia, en mi caso)

- ¿Tu mamá vio lo del pasaporte?

- Si, ya vimos todo- pegó un salto- hueona que bacán, ¿A qué parte de Colombia vamos a ir?

- primero vamos a llegar a Bogotá, de ahí nos vamos en auto a Medellín, y de ahí nos vamos a Cartagena- les juro que la Vale estaba sonriendo como el gato de Alicia en el país de las maravillas.

- ¡HUEONA QUE BACÁN!

- ¿Si o no?- me reí al ver su cara. Yo estaba igual de emocionada, pero no lo demostraba.

- Te juro que me voy a buscar un mino allá. Tengo que comerme un colombiano.

- Obvio que si po, si estai soltera teni que aprovechar.

- los minos de allá son demasiado guapos- miré a la Vale- los morenos son mi debilidad.

- Te creo, son demasiado lindos.

- Meee, ¿y qué onda con el Renato?

- ¿Por qué?

- Él no es tan moreno po.

- Si pero tampoco tan blanco.

- A bueno, eso sí.

Me termine de tomar la bebida y la dejé arriba de la mesa. Revisé mi teléfono y me reí con un meme en el que me habían etiquetado. Le contesté el WhatsApp al Renato y bloquee mi teléfono.

- Oye- me llamo la Vale

- ¿Qué pasó?

- ¿Qué haz sabido del Hans?

- Nada, ¿por qué?- miré mi teléfono para que no me cachara.

- Hueona mirame, no creo que no sepas nada de él- no levanté la vista del teléfono- ¿Anais?- la miré- ¿Qué onda con él?

- O sea, nada así muy grave- me comí una papa- hablamos pa mi cumple, me dijo puras hueás.

- ¿Qué te dijo?

- Que nunca nadie iba a darme algo como lo que él me dio y eso.

- ¿Qué?¿Por qué te acostaste con él?

- Si po.

- No ese mino está loco- se limpio la boca con la servilleta- hueona, ¿Qué onda él?

- No sé, está mal.

- Que se entierre.

Vimos pasar a una pareja tomados de la mano. Nos quedamos calladas y los miramos. La mina le estaba diciendo algo y el hueón la estaba ignorando mal.

Nos paramos de la mesa y tiramos todo a la basura. Ya habíamos terminado y no teníamos nada que hacer ahí. Como estábamos en el Mall nos fuimos a ver tiendas. Pasamos a distintas partes a probarnos ropa y hueás.

- ¿Cómo me queda esto?- le mostré una polera a la Vale.

- Te queda bien, aunque prefería la otra.