La Maldición De La Luna Roja

Víctima 1°

Katherine, una estudiante de secundaria, se encontraba caminando en las solitarias calles, pero a ella no le importaba.

-¿Será verdad sobre la Luna Roja?...De seguro es otra mentira más de la "ciencia"- Habló, pues sería imposible, bueno, para ella, que la Luna Roja te de una maldición, eso sólo sucedería en películas, libros, series de ficción.

Cuando, de repente, una luz roja, empezó a inundar las calles.

-Eh..¿Qué es es-..- Katherine no pudo terminar de hablar, sabía que eran las 12:00 p.m, pero,¿Acaso se encontraba cerca de una discoteca? ¿Habrá un incendio? ¿La luz de la TV de alguien es muy brillante? Bueno, la 3ra hipótesis suena estúpida, pero las 2 primeras eran lógicas.

-"Quedas bajo La Maldición De La Luna Roja"- Una voz se hizo presente, sorprendiendo a Katherine.

-¿Qué? ¿Pero qué?- Sintió como todo se volvía negro.

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-Uhm...¿Donde estoy?- Se preguntaba Katherine, se encontraba en el mismo lugar, el parque central de la ciudad. Se paró de donde se encontraba echada, extrañamente, en un banco.

Pensó, tal vez, una persona la puso ahí.

-¿Y ese ruido?- volvió a preguntarse Katherine, se escuchaba como gruñidos, quejidos.

Katherine, dudosa, se acercó al lugar, con paso lento, sentía como el miedo la invadía.

-¿Hay algui-..- Katherine quedó en Shock, vió, como un ser, que parecía ser un monstruo, se comía, poco poco, a una mujer, de unos 34 años, quien ya no tenía el ojo izquierdo, sus dedos ya no estaban, se les habían arrancado, su pierna derecha estaba abierta.

-....- Katherine, estaba asustada, estaba sudando frío, no podía reaccionar.

"Por ver la Luna Roja, verás cosas horribles, que ningún mortal podría soportar"

Recordó la voz, la maldición, se cumplió, lo que ella veía, nadie lo podría soportar.

Katherine, recobró el sentido, y salió corriendo, ya no podía ayudar a los mujer, pero ahora, tenía que salvarse. Cruzó pistas, corrió cuadras, pero ella quería encontrar un lugar seguro.

Hasta que...Sintió como algo la sujetaba, un tentáculo, ella ya estaba perdida, ya no había escapatoria.

Sintió como arrancaban sus extremidades, y como por último, vió un monstruo, parecido a un demonio, que se reía macabra y maliciosamente, como la sangre chorreaba.

Sin duda esa era, la víctima 1° de la Luna Roja.