(Narrador omnisciente)
Mikaela se mueve con soltura por los pasillos del instituto, robando los suspiros de cada jovensita a su alrededor. Él no lo notaba, o quizás esté ya acostumbrado, pero a su paso despreocupado y tranquilo , el pasillo se abre simulando una calle de honor para una celebridad; aquellas chicas que rogaban por obtener una de sus miradas zafiro ; aunque era de esperarse que también traía a sus pies a algunos chicos que esperaban por una sonrisa de aquel rubio, idolo de la preparatoria.
(Narra Mika)
Como siempre me encuentro caminando por los pasillos del instituto robando todas las miradas a mi alrededor, mientras me dirigía al patio principal. Cuando llegue pude ver a Lacus y René buenos amigos míos , pero también se encontraban Akane y Kurl las cuales se abalanzaron hacia mi cuando me vieron
- Mika~ - Dijeron las dos al unisono, mientras me abrazaban fuertemente.
- Pues miren a quien tenemos aquí- dijo Lacus con ironía
- Mika no te cansas de andar enamorando a la gente- dijo René con una sonrisa en sus labios.
- Que les puedo decir , al parecer soy irresistible- lo dije con una sonrisa en mis labios , lo que hizo que Akane y Kurl soltaran un suspiro.
- Mmmmm, bueno ..... pareces muy confiado- dijo Lacus.
-Por supuesto, nadie puede resistirse a mis encantos.
- Te parece si hacemos una apuesta Mika- Dijo Lacus, mientras miraba a René y asentían al mismo tiempo.
- Dila-
- Apuesto no seras capaz de enamorar a el primer chico que cruce esa puerta, y solo hasta el final del año- Dijo Lacus con ironía.
- Y si ganó que me darán a cambio.
- René y yo seremos tus sirvientes por 2 años.
- Pero si pierdes tu seras nuestro sirviente por 3 años ...... - concluyó René.
- Acepto la apuesta.
- Entonces todo listo.
Nos sentamos a esperar que saliera algún iluso; pude ver que Lacus y René se sonreían entre si así que vi a la misma dirección que ellos, pude notar como se acercaba Pinkie pie (Shihō Kimizuki) a la entrada y con eso mi confianza disminuyo, pero en ese momento llego el sumiso de Yoichi se notaba que el llegaría a salir primero y logre ver como la felicidad de Lacus y René se desvanecía tenia esta apuesta en mis ma.........
- Por que no caminan rápido solo estaban a unos centímetros de la salida.
Mi mente se puso en blanco cuando vi a la persona que había salido antes que todos.
- Pero miren que casualidad Yūichirō Amane- dijo René con tono de alivio en su voz.
- Parece que la suerte esta de tu lado Mikaela- dijo Lacus con una sonrisa victoriosa.
- Creen que no voy a lograrlo, ja....... puede que el me quiera 3 metros bajo tierra, pero nunca he perdido una apuesta y esta no sera la excepción, solo es cuestión de ilusionar al gatito resentido.
- Como digas, ya quiero ver como lo lograras- Dijo René mientras reia
- Yo tengo mis métodos sera fácil......
Me retire de ahí y me puse a pensar como le haría para hablar con él, ni siquiera quiere verme desde que su ex-novia (Akane) lo dejo para estar conmigo y volverse una de mis mas lindas y dulces seguidoras, pero bueno eso no sera ningún problema Yuichiro quedar rendido a mis pies........................................................................................................................................................................................................................................................................................................................................................................................................................................................................................................................................
~continuara~
Hola queridos lectores
lo siento si me demore en actualizar la historia
es solo que nada me iluminaba,
mi imaginación estaba muy escasa estos días xd ^-^
Bueno espero que les guste mi fanfic <3
si les gusto voten
y si desean alguna dedicatoria pueden escribirme
si hay una que otra falta de ortografía sepan disculparme.'^^
~Hasta el próximo capitulo ~
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Palabras que duelen, acciones que matan
RandomNunca pensé llegarlo a querer de esa forma, pero ahora ya no me mira, no me abraza y no me dice nada; pero sé que al final todo es mi culpa por intoxicar lo con tantas mentiras y curar heridas que yo mismo había provocado a su corazón. Mi nombre es...