Soulmates || Larry Drabble.

What's a soulmate?

"Él murió"
- ¿Qué? - Su rostro palideció inmediatamente, se encontraba en el pasillo del frío hospital, frente a un doctor que no se atrevía a hacer contacto visual con él luego de la noticia que le había comunicado, mientras que algunas personas lo empujaban ya que probablemente tenían prisa y él estaba parado inmóvil en el medio del pasillo, sin pestañar, sin ser capaz de asimilar la noticia. ¿Acaso le habían dicho que Louis, su Louis había muerto? No, no era posible, Louis no podía haber muerto, él simplemente no podía, dijo que no lo dejaría.
Volvió a la realidad cuando su cuerpo comenzó a necesitar aire, dejó de contener la respiración, pestañó e inmediatamente perdió la visión, una capa de lágrimas no le daba la oportunidad a sus ojos de ver lo que estaba pasando. Se vio sentado en quién sabe qué lugar, él podía sentir la presencia del doctor a su lado, hablando sin parar de cuestiones legales, pero estaba muy lejos de la realidad como para entender una sola palabra de lo que decía.


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Esa noche fue lenta y dolorosa, y en la mañana la cama estaba helada, a pesar de ser pleno verano. No lograba ordenar los sucesos de la noche anterior en su cabeza.
En algún momento de la noche había vuelto a su departamento - aunque no sabía cómo -, también, en algún momento se había emborrachado hasta caer tumbado en el sillón, o tal vez era el suelo del comedor, o la cocina, o el baño, no estaba muy seguro. En algún momento se había puesto la ropa de Louis, a pesar de que todo le quedaba pequeño, apretado e increíblemente incómodo; olió las prendas, para que así el perfume del ojiazul inundara su memoria. En algún momento se sentó con una botella de vodka y un pote de helado a llorar mientras veía alguna estúpida película romántica, o talvés era de acción, o suspenso, daba igual.
Se acurrucó, trató de calentar su cuerpo, pero algo le impedía al frío helado abandonar su cuerpo - es como si mi alma hubiera abandonado mi cuerpo - pensó, y tal vez había acertado. El teléfono sonó aproximadamente quince veces antes de que él se percatara del ruido que este producía, él simplemente lo apagó, cerró los ojos, podía imaginar de quién era cada llamada que recibía y no podía importarle menos.

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Se miró en el espejo de la sala de estar, su cabello había crecido notablemente, una inusual barba adornaba su cara, le recordó a la barba de Louis -a él se le veía mejor que a mí, probablemente me habría obligado a afeitármela, si solamente él siguiera acá - pensó, sus ojos apagados se llenaron de lágrimas, otra vez.
Caminó a la cocina, ¿para qué había ido hasta ahí?, de todas maneras, ¿qué importaba? Se sentó en el frío suelo, cerró los ojos y trató de recordar cómo se veía Louis, como se oía, como se sentía su presencia, como olía, pero no podía. Poco a poco los recuerdos que tenía de él se iban borrando de su memoria. Entró en pánico, se recostó en el suelo, llorando incontrolablemente, aún más fuerte que antes. Él no quería olvidar a Louis, no quería que su recuerdo se borrara de su memoria, y no sabía cómo impedir que suceda.

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Harry casi no comía nada, no se sentía con ganas. Lo único que él hacía era sentarse en la cama observando fijamente las fotografías de él y Louis colgadas en la pared, podía oír el timbre del departamento seguido de fuertes golpes y gritos que le demandaban que abra la puerta. Ignoraba todo eso.
Él no sabía cuándo era día y cuándo era noche, cuándo soñaba y cuándo estaba despierto, cuándo se movía y cuándo no, y sinceramente él tampoco sabía si seguía respirando, viviendo. Se estaba hundiendo, y sí, Louis definitivamente se había llevado su alma con él cuando se marchó.

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Era algún día de alguna semana de algún mes de no sabía bien qué año. No sabía bien si hacía frío o calor. Había comenzado a reír al darse cuenta cuánto tiempo le había llevado a su mente llegar a una conclusión que tarde o temprano llegaría. - ¿Qué tengo por vivir? Todo por lo que vivía era Louis, él se marchó, ¿Porqué no me he marchado yo todavía?

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El corazón de Harry solo tardó varios minutos en dejar de latir permanentemente. La puerta del departamento de Harry fue derribada solo horas después de que él diera su último respiro, y lo único que se escuchó fue el gemido de dolor de Zayn y Niall al verlo.

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El funeral de Harry fue llevado a cabo junto con el de Louis, fueron enterrados uno al lado del otro. Fue privado, solo sus amigos y familias se encontraron ahí. Y esa noche en la que el funeral fue llevado a cabo, se derramaron lágrimas suficientes como para limpiar la sangre que Harry había derramado al morir.
Y las lápidas de los dos, Harry y Louis, fue grabada con la misma frase.
"Tarde o temprano, las almas gemelas, a pesar de ser separadas, terminarán reencontrándose."