Just a typical girl

No puede ser el

Mierda no creí que notara eso.

-¿Qué? ¿A que te refieres?- le dije aún dándole la espalda.

- Son idénticos Malia, y no lo digo solo por como se ven, sino por como son, dios te conozco un dia y puedo ver tu reflejo en él -me dijo. Cuando volteé a encararlo estaba más cerca de lo que creía.

-No, son imaginaciones tuyas, igual solo lo conoces un dia, es imposible que nos compares- le dije, estaba demasiado nerviosa de que descubriera la verdad.

-Malia, te podría creer si solo se parecieran en la manera de ser, pero tiene tus rasgos, hasta podría ser tu hermano o hasta tu hijo- Podía sentir que este tema lo estaba sacando de sus casilla. Pero aún no le había contado a nadie nada, y él no iba a ser el primero.

-En verdad estas pensando eso? No puedo creerlo- le dije riéndome y dándome la vuelta para cambiar la canción que se estaba reproduciendo.

-Por favor dime la verdad, si es pariente tuyo, porque esta aquí?,sabe que tu eres algo de él ?- me dijo

-Tú no tienes porque meterte en eso sea verdad o no ok? Asi que no lo vayas a mencionar delante de Jake- le dije mirándolo y me fui a donde Jake estaba jugando.

Pase toda la tarde tratando de evitar quedarme sola con Tobias para que no hiciera más preguntas. No estaba preparada para darle explicaciones a nadie, nunca había tenido que hacerlo, y no lo iba a hacer a alguien que apenas había conocido.

Estaba acostando a Jake cuando escucho como suena la puerta.

-Hola cariño, que tal se porto Jacob?- escuché que preguntaba la señora Wright.

-Muy bien señora, no se preocupe se acaba de quedar dormido, Malia estaba acostándolo- escuché que dijo.

Bajé y me encontré a los tres aún en la entrada.

-Hola señora que tal les fue- pregunté mientras veía como le señor Wright se dirigía a la cocina.

-Muy bien cariño, los dejo libres para que se vayan a descansar- nos sonrío, nos despedimos y salimos al auto de Tobias.

El camino fue en silencio, pero ya no era cómodo, quería llegar lo antes posible a mi habitación y olvidar que todo esto estaba pasando. Estábamos a punto de llegar, solo faltaban unas pocas cuadras para llegar a la entrada, cuando de repente Tobías comenzó a parar al lado de la calle.

-¿Qué rayos haces?- le pregunté mientras me sentaba bien.

-Creíste que me iría sin saber porque un pariente tuyo está en otra casa sin saber de tu existencia y encima vas a visitarlo casi a diario- me dijo mientras me miraba.

-Uno, no te interesa y dos, no sabes si eso es verdad o no- le dije mientras me bajaba del carro. Si tenía que caminar hasta el internado, lo haría.

Escuche como se bajaba del carro y caminaba atrás mio.

-Por favor Malia, no puedes actuar como si dejar a alguien así fuera tan fácil- me gritó.

-¡Tú crees que es sencillo?¡, tú no sabes nada de mi, nada por lo que he tenido que pasar, solo me has conocido dos malditos días, así que no trates de entender por que hago lo que hago y como lo hago, si supieras solo una maldita parte de mi verdadera historia, sentirías pena por mi, y eso es lo último que necesito ahora- le grite mirándolo a los ojos mientras sentía como una lagrima se deslizaba por mi mejilla.

-Yo se que no te conozco pero en serio quiero llegar a hacerlo, y estoy seguro que soy el primero en unir lo obvio o ir a esa casa, porque es claro que no sabes como manejar esta situación, solo dime, es tu hermano, tu hijo o que cosa?- me preguntó, estaba comenzando a hartarme.