It's my cute egg green | KrisTao | PAUSADA

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¡Es usted afortunado!

Nuestra empresa agradece su preferencia.

°~ Donde hay un Eggi hay sentimientos ~°

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Paso rápidamente páginas ignorando la primera advertencia que decia leer todo. Ridículo. No quiero esta cosa y entre menos sepa sobre ello mejor. Es mejor no saber nada más si quieres sacarlo de tu mente como quieres, ahora lo que menos necesitaba es otra cosa que dependiera de mi sin darme algún beneficio. Otra cosa que evitara mi progreso tanto mental como en mis negocios.

Él pequeño manual venia en un sobre color crema y escritos en papel caro con letras de un profundo negro y elegantes. Él ser tan delicado te daba la sensación desde un principio que traería muchas responsabilidades, me sentía al abrirlo como un niño a punto de leer su reglamento para entrar a un prestigiosa escuela.

Había abierto muchos en mi vida así que era volver a mi niñez. Había estado en muchas escuela a causa de mi mal comportamiento y malos entendidos, las personas no aceptan a personas que dan a entender sus palabras y sentimientos de distinta forma a la suya, las tachan de raros, malos chicos que no tienen de otra mas que ignorar comentarios incluso de profesores que te miran con pena.

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Él huevo crece de acuerdo a los estímulos que les sea dado. Si usted no desea expresarlos nuestro producto no es para usted y podría ser llevado a tribunales por maltrato.
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Leí furioso esas palabras mientras observaba cada pocos segundos de reojo la cosa en esa pequeña cámara de cristal iluminado por pequeños focos con potente luz que lo hacia parecer mágico, en el que para mantenerse inmóvil tenia una mini almohada adornada con lo que parecía detalles hechos probablemente de oro. A simple vista se veía como un huevo podrido (por su curioso color verde) con reflejos de colores, su tamaño era parecido a un huevo de avestruz y prácticamente mostraba lo costoso que seria en tiendas.

La empresa te los vendía como mascota pero cualquier imbécil se daba cuenta que esto es algún tipo de trata de personas. Diminutas y estúpidas personas que se podían comprar por una cantidad de dinero insignificante en cualquiera de sus centros y sin necesidad de ser revisado de ninguna forma antes de autorizar que adquieras uno. Así de tanto le importaban a los empresarios de esa corporación.

Aunque el ser el dueño de una de las más grandes empresas del mundo me había dado muchos beneficios con otras como la mía, no había ningún lugar donde no destacara y recibiera obsequios que terminaban en la basura o regados por todo el departamento.

Cuando aquel tipo se acercó diciendo que era dueño de una de esas empresas no pude evitar pensar en la palabra que rondaba en mi cabeza más seguido que la palabra sexo: Patéticamente rico; él tipo me había reglado un huevo en él que él había dicho que había puesto más cuidado que otros, que era de una sección limitada de "caja de huevos" y que estaría honrado de que lo tomara ¡Muy ridículo!

Podría ser un hijo de perra pero sabia aparentar así que tome la asquerosa cosa y sonreí al apuesto Doctor Kim Jun Myeon. Sin duda me sentía realmente atraído y ni siquiera pensé claro cuando acerque demasiado mis manos a las suyas. Las cosas habían llegado a mi cuando sentí él cálido cristal en la llema de mis dedos.

Había aceptado otra responsabilidad en mi vida, otra cosa que no podría cuidar como querría.

Pase a otra pagina leyendo por encima hasta que llamo mi atención palabras en mayúscula.