Capitulo 36: MARATÓN (1/3)

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Narras Tú: 

Desperté por una muy extraña sensación. Tenía calor. Tenía mucho calor; lo curioso era que no era un calor normal, era un calor... único. Diferente. Abrí mis ojos poco a poco, sentía como mi cuerpo estaba cómodamente relajado. Estaba recostada de alguien. Probablemente de mi mejor amiga. Terminé de abrir mis ojos y me senté en la cama con cuidado. Vi a quien estaba a mi lado. Era... ¿NIALL? ¿Niall James Horan está acostado en mi cama? ¿DESNUDO? ¿Qué rayos pasó aquí?

-¿NIALL? -Grité. Comenzó a abrir sus ojos, mientras una sonrisa se dibujaba en su rostro.

-Buenos Días, princesa. -Sonrió.

-¿Qué m¡erda haces aquí? ¡Lárgate! -Grité. Su expresión fue totalmente diferente.

-¿De qué hablas? -Me miró confundido.

-¿Qué haces aquí? Encima, ¿DESNUDO? 

-______, ¿no recuerdas nada? -Me preguntó.

-¿Qué se supone que debe...-Me detuve. -No puede ser. -Salté de la cama. Estaba desnuda. Él comenzó a reír. - ¿De qué te ríes Oops? -Soltó una carcajada. - ¡Deja de reír! ¡Basta! Dime por favor que no tuve sexo contigo. -Cerré mis ojos. Esperando la respuesta que quería oír.

-Lo siento, nena. Tuviste sexo conmigo. -Abrí mis ojos de un cantazo.

-¡¿QUE?! ¡No, no, no y no! Eso no puede ser posible. ¿Dónde está Val? -Dije comenzando a desesperarme. 

-Está con Harry. Pasó la noche allá.

-¡No puede ser! ¡Va a matarme! Tienes que irte de aquí. 

-¿No recuerdas nada? -Dijo algo preocupado.

-¡No, Niall! Nada. -Comencé a caminar en busca de alguna ropa. -No sé que hice o dije anoche, pero estoy segura de que no era yo y lo que pasó no tuvo que haber pasado. 

-¿Por qué te preocupas tanto? ¿Acaso crees que hiciste algo malo? -Preguntó divertido en tono de burla.

-No es gracioso, Niall. Ahora por favor, vete de mi habitación. No sé ni cómo me encontraste, pero ya te vas. -Dije comenzando a ponerme la ropa interior.

-______. -Se levanto de la cama, comenzó a caminar hacia mi. Lo miré a los ojos. Esos hermosos ojos color azul que te llevan a otro lugar. Puso sus manos en mi cintura, pegándome a él. -No quiero perderte de nuevo.

-Niall. -Susurré. -No puedo estar contigo. Nunca vas a cambiar. -Suspiré.

-______, amor. Dame solo una oportunidad más. Prometo que no voy a engañarte. -Cerró sus ojos. Luego los abrió. -Te amo, ______. Viajé hasta acá buscándote. Renuncié a mi trabajo y a todo. Fui un completo id¡ota, lo sé; pero por favor, te prometo que no va a volver a suceder. Solo déjame demostrártelo. -El silencio abundó el lugar. Los nervios me comían viva, no sabía que decir. No recordaba ni una pisca de lo que pasó anoche y ahora está pidiéndome que regrese con él. ¿Cómo voy a saber que me está diciendo la verdad? Lo amo y jamás dejaré de hacerlo, pero ya no se puede confiar.

-Niall, no sé si estés diciendo la verdad; pero no puedo. -Me separé de él. -Si lo hiciste, te felicito; pero ya no sé si pueda confiar en ti.

-De acuerdo. -Suspiró. -Te entiendo, y nuevamente, lo siento. Pero solo me iré con una condición.

-¿Cuál es? -Pregunté. Realmente no quería que se fuera.

-Contéstame algo. -Dijo observando mis ojos.

-¿Qué? -Pregunté confundida.

-¿Por qué no me dijiste que estabas esperando un bebé? -Mi corazón dejo de latir por un momento. Espasmos recorrían mi cuerpo, escalofríos iban y venían, mi cabeza daba vueltas, mi estómago se revolcaba y mis ojos estaban como platos. ¿Cómo el sabia eso?

-¿Quién te dijo eso? -Pregunté luego de que mi voz volvió a mí. 

-¿Por qué no me lo dijiste? -Me contestó con una pregunta.

-Te hice una pregunta. -Dije.

-Yo la hice primero. -Contestó.

-M¡erda. -Dije para mis adentros.

-Te escuché. -Susurró. -Ahora contéstame. 

-Eso no te importa. -Me voltee para ir a la cocina.

-Si me importa. -Me siguió. 

-No. No te importa. -Me voltee molesta para mirarlo. -Yo nunca te importé mientras estuvimos juntos. Nunca te importó nada. ¿Por qué debería importarte ahora?

-Porque cambié y ahora me importas. -Dijo algo intimidante.

-No te creo. Eso es imposible en alguien como tú.

-Deja de insultarme, ¿quieres? -Dijo algo molesto.

-¡Lo hago si quiero! Porque te lo mereces. 

-¡Pues párale, porque ya fue suficiente!

-¡Vete de aquí! -Dije dirigiéndome a la puerta para abrirla.

-No me iré hasta que me contestes la pregunta. -Dijo quedándose en el mismo lugar.

-¡Ya te dije! Nunca te importó nada. Así que no pensé que te importara ahora. 

-Pues pensaste mal. -Comenzó a acercarse a mí. - ¿Me engañabas? -Preguntó frunciendo su ceño.

-¿Crees que soy igual que tú? -Levanté un poco mi tono. La furia corría por mis venas. ¿Cómo se atrevía?

-No lo sé. Quizás no te conocí bien. -Arquee mis cejas. 

-¿Me estas llamando z0rra? Disculpa mi amor. ¡Z0rra tu abuela y todas las que te f0llaste mientras estabas conmigo! -No pude aguantar mucho más. El líquido salado comenzaba a inundar mis ojos. Y al parecer... se dio cuenta. Su expresión cambio completamente.

-______, lo- lo siento. Yo..

-¡Vete, Niall! -Lo interrumpí. Quiso abrazarme, pero lo rechacé. Cerré mis ojos con fuerza y luego miré hacia otro lado. No se movió. -Niall, vete por favor. -Volví a verlo, pero esta vez mi rostro estaba cubierto por aquellas gotas.

-______, perdón, yo nunca quise decir eso.

-Pero lo hiciste, Niall. Ahora ya es tarde. Es la última vez que voy a decirte que te vayas. -Seguí viéndolo, acaso estaba... ¿LLORANDO? 

-Princesa, en verdad lo siento, nunca quise decir eso. -Tomó mis mejillas. No dije nada. Limpió mis lágrimas. -No soporto verte llorar. Me partes el corazón cada vez que lo haces.

-Pues para que se te rompa mas; quiero que sepas que cada vez que lloro es por tu culpa. -Dije seca.

-______, te amo como nunca amé a nadie. Tú me enseñaste a amar, me enseñaste a vivir, me enseñaste a ser feliz. No puedo dejarte ahora. -Sus lágrimas comenzaban a salir con más frecuencia. Aun con mi rostro en sus manos, comenzó a acercarse. -Solo dime una última cosa. -Susurró. - ¿Yo soy el padre? -Mi corazón volvió a detenerse. No podía hablar, las cuerdas vocales me fallaban. No pude aguantar el no llorar. Me solté de sus manos para darle un cálido y fuerte abrazo. Ese abrazo que necesitaba hace tanto. Él no dudo en responderme. Su calor tan único calentaba mi cuerpo. Escuchaba su corazón latir, sentía como sus pulmones se inflaban para respirar. Lágrima tras lágrima, salían de mis ojos. Lloraba en silencio. No sabía que decir. ¿Le decía o no? Me separé de él, dejando un poco de distancia entre nosotros. -______, necesito saber. -Susurró y me separó de él.

-No, Niall. No eres el padre. -Mentí. No sabía por qué había dicho eso.

Over Again |Niall & Tu| -Terminada- *Editando*Donde viven las historias. Descúbrelo ahora