Capítulo Único

7.3K 796 731
                                    

—¡Jimin! ¿Dónde estás jovencito malcriado...? ¡Ya te vi, Jimin, baja de ese árbol!

Oh, mierda.

—¡Mamá no quiero, déjame aquí solo!

—¡Vamos Jimin, deja de comportarte como un niño y baja de allí!

Bufé frustrado y bajé con cuidado de aquel árbol, pero ¿cómo se le ocurre a mi madre hacerme esto? es decir, ¿quién cojones invita al chico del cual su hijo estaba enamorado cuando era pequeño?...

Está bien, quizás estoy exagerando.
¡Pero vamos!, debió habérmelo dicho antes, no sé... Así me hubiera dado tiempo de salir del país, mudarme a México a cultivar maíz y cambiarme el nombre a "Jimeno Pancracio de las mercedes".

—Ay hijo, quita esa cara... Ustedes se conocen desde pequeños, estoy segura que Jungkook te extraña. —soltó mi madre en un intento por animarme, pero no, falló rotundamente. Sólo quiero que me trague la tierra.

—¡Jungkook me odia! —lloriqueé infantil mientras mi madre rodaba los ojos.

—No es cierto, cállate y ve a arreglarte, la familia Jeon llega en una hora.

Suspiré resignado ante mi desgracia y me fui a dar una ducha.

Abro la regadera y me relajo un poco al sentir el agua caer sobre mi cuerpo.

Es inevitable no ponerme nervioso al pensar en Jeon... Cielos.
Lo molesté durante todo el jardín de infantes, la escuela media y parte de la secundaria, hasta que decidí estudiar en otro colegio.
Lo golpeé muchas veces, pero puedo jurar que era para llamar su atención. Obviamente nunca lo logré. Sin embargo, nuestras madres son amigas desde niñas, por lo cual nunca he perdido contacto con él y, ahora, va a venir con su familia porque mi querida madre los invitó a su "fiesta" (mejor dicho almuerzo) de cumpleaños.

Estoy tan arrepentido de todo lo que le hice, aunque sinceramente nunca lo golpeé de verdad, o sea sí, uno que otro golpe, pero carente de fuerza, sólo lo hacía por molestarlo.

Cierro la regadera, cojo una toalla y me la amarro en la cintura.

Me dirijo a mi vestidor y elijo un conjunto bastante sencillo; unos pantalones rasgados negros, una camiseta blanca, mis converse y un gorro azul oscuro.

Al bajar me fijo en la hora.

2:50 p.m.

Faltan exactamente 10 minutos para que llegue la familia Jeon.

Los nervios comienzan a invadirme, por lo que, tomo mis audífonos y mi celular de sobre mi mesa de noche y salgo a caminar alrededor de mi vecindario.

—¡Mamá, voy a salir a caminar, enseguida vuelvo!

—¡Claro hijo, si escapas te arranco las bolas! —pero qué adorable madre tengo.

Río un poco ante aquello y, sin más, salgo a la calle y comienzo a caminar sin un rumbo fijo.

El clima es fresco, el sol está escondido detrás de las nubes, por ende, no hace calor ni tampoco frío.

Sigo caminando mientras comienza a sonar en mi reproductor la canción "Blue" de Bigbang.

Ah, esto. Amo esa canción, pero en este momento me está causando sentimientos que desearía no tener.

Sigo caminando y me fijo en la hora:

3:09 p.m.

Automáticamente, doy la vuelta de regreso hacia mi casa, con mi cabeza un poquito más despejada.

SUCHISIM 耻辱「 Kookmin 」 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora