11-10-17

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Hoy quiero hablarte de una forma distinta a la que siempre utilizo. Tal vez más madura o tratando de ser poética, quién sabe qué saldrá de aquí.
Supongo que como siempre, quiero agradecer todo lo que has hecho por mí, aunque igual estás cansado de oír que yo estaba hecha ruinas y tú hiciste con nosotros la mayor fortaleza de mi vida.
Tal vez hoy quiera recordarte que mi vida es mejor desde aquel beso efímero, o quizá desde que por primera vez tus palabras encendieron el fuego en mi interior en una de las noches oscuras en las que solo estábamos tú y yo, porque a pesar de no poder tocarnos yo te sentía tan cerca...
Aquellas noches en las que me volví adicta a tus palabras, al bienestar que me aportabas, a lo especial que siempre me has hecho sentir.
Y así fue, me enganché a ti como me suele pasar con las canciones de amor, pero no de estas que las escuchas en bucle por una temporada hasta que te cansas. Tú eres como esas canciones que marcan un antes y un después, una de esas que se vuelve la banda sonora de tu vida y que podrías escuchar hasta tu último suspiro sin cansarte jamás.
Me enganché a nuestra historia, infinitamente mejor que cualquier novela que se pueda redactar.
Me enganché a tus besos, caricias, a tus mordidas e incluso a tus pellizcos fuera de lugar. Me enganché a ti, mi compañero de vida, mi alma gemela si es que existen...
Quiero que seas mis besos de buenos días, mis conversaciones a media noche y quién me haga el amor hasta que nuestros cuerpos no permitan nada más. Quiero caminar de tu mano hasta que las arrugas cubran toda nuestra piel, aquella que habré besado una infinidad de veces. Quiero que nuestro amor sea eterno y que tengas claro que sí no es así jamás encontraré a alguien como tú... Nunca nadie me comprenderá, me hará reír y me calmará como tú lo haces. Nadie conseguirá ningún día hacerme tan feliz como tú me haces...
No me voy a poner en esa tesitura porque, si hay algo de lo que estoy segura en la vida es de nosotros.
Nosotros, que conocemos todo el uno del otro, que basamos nuestra relación en el diálogo y el amor, el amor más puro que he visto jamás.
Nosotros, que somos la fortaleza más inquebrantable del mundo. Te amo, enésimo

my mindDonde viven las historias. Descúbrelo ahora