Wallpaper (One Shot/ Neo)

Wallpaper

Mi cuerpo temblaba de excitación, no podía creer lo que mis ojos veían. El sonido torturaba mis oídos y las manos me sudaban. 

"Cha Hakyeon abre" me grite internamente. Veía por la mirilla de la puerta, y seguía sin creerlo... Él estaba del otro lado, con sus ojos felinos y profundos, una laptop bailaba entre una de sus manos (la que obviamente no tocaba el timbre con tanta insistencia).

— Por favor, es urgente. —Su voz me lleno el alma, era igual que en sus vídeos: tan suave.

Abrí la puerta. Él entro y se sentó en el sofá mientras revisaba su computadora. 

— ¿La contraseña de WiFi? — preguntó algo desesperado. Me quería morir. "JTWthebest" susurré, me miro y río. 

Me sonrió. A mi.

Mi vida no era nada interesante, se basaba en dos cosas: mi trabajo y mi obsesión por el cantante Leo, el que justamente estaba en la sala de mi departamento. No era un fanático completamente abierto; a pesar de que en mi trabajo sabían que me gustaba, solo pocos sabian el nivel de fanatismo que tenia , ademas nunca acudía a los eventos privados... yo era mas de observar desde lejos. Así que esta situación se salia de mis manos. 

Me senté en un sofá frente a él, Leo estaba emocionado en su laptop y yo trataba de no mirarlo, pero me era imposible. Llevaba una playera blanca en cuello V que dejaba ver sus clavículas, era tan sexy, al igual que sus pantalones ajustados y rotos por las rodillas. Era el hombre mas apuesto del mundo, o lo era al menos para mi. Con sus vídeos musicales sugestivos y sus coreografias poderosas. El era perfecto. 

— ¿Tienes algo de café? — Preguntó. 

— Si — respondi dando un brinco y dirigiéndome a la cocina—. ¿Latte verdad? 

— Si... —Volteo a verme—. ¿Debo preocuparme? ¿Acaso tu cortaste la electricidad de mi departamento y planeas secuestrarme? 

Yo estaba pasmado. ¿Él también vivía en el edificio? Me concentre en sus hermosos ojos y se cerraron un poco cuando sonrió.

— Tranquilo es broma. Mi mánager olvido pagar el recibo... 

Seguí caminando con el corazón desbocado. Me estaba portando como un idiota acosador (O sea... si lo acosaba en twitter e instagram, pero era diferente). Decidí prender la cafetera, puse una cápsula de latte y una taza debajo cuando escuche una melodía. Era mi celular el cual emitía la ultima canción que había promocionado Leo: "Black out", justo en el "I'm thiking in your body" se calló. 

— ¿Diga? —Escuche la suave voz de Leo— . Esta en la cocina... ok, yo le diré.

Ya no escuche ningún sonido. Cuando pito la cafetera, le lleve la taza a mi "invitado". El volvió a sonreír. Me estaba volviendo loco con su comportamiento. Yo sabia que el Leo de la TV no podía ser el verdadero Jung TaekWoon, Leo era un personaje muy serio, reservado, misterioso y sexy. Así que verlo sonriendo y burlándose de mi, era demasiado. 

— Gracias — dijo sosteniendo la taza y dando un pequeño sorbo—.El chico que te habló dijo que lo haría mañana... por cierto, me encanta tu fondo de pantalla. 

Me quede helado, solo deseaba que la tierra se abriera y me tragara, para asi acabar con mi sufrimiento. Mi fondo de pantalla, (el cual era el mismo desde hace medio año) era una foto de una presentación de Leo, en la cual tenia sus manos sobre la cabeza y la camisa subía por su torso enseñando su ombligo. No era precisamente algo que quería que viera mi idol.

—Yo no... — me trate de excusar.

— Descuida —musitó sin mirarme—. Una vez una chica tenia una foto editada, con mi cara en el cuerpo de otro hombre desnudo. Al menos la tuya es real.

Justo ese era mi problema, yo estaba enamorado platónicamente de otro hombre, uno al cual miles de chicas eran las principales interesadas.

— Estaré en la cocina, por si necesitas algo mas  —dije con voz baja.

Yo había imaginado millones de veces escenas en las que conocía a Leo y él se enamoraba perdidamente de mi, pero en ninguna me avergonzaba a mi mismo de esta manera. En ninguna el conocía mi lado fanático obsesivo.

— No, espera... ¿HakYeon? —casi me desmayo al escuchar mi nombre pronunciado con su angelical voz—. El chico del teléfono lo dijo al preguntar por ti. —Afirmó como si respondiera a mi pregunta silenciosa de como lo sabia— . Quédate conmigo, ya casi término.

Estuvimos en silencio varios minutos, hasta que cerro su laptop y me miró.

— Veo que tienes buen gusto. — Aseguro sonriendo mientras señalaba un estante en la pared. Ahí tenia mi colección de CDs.

— Creo que es demasiado obvio. 

— No te avergüences... Me siento alagado. 

— No te burles —le susurre. 

— Te juro que no me burlo, de esto vivo. Veo que te gusta mi trabajo y eso me encanta. Normalmente no puedo hablar o saber de la vida de mis fans por que se hace un alboroto. Aun que no lo creas me gusta estar así, tranquilamente contigo. Además — se inclino sobre el sillón mirándome—, me salvaste de una buena. Tenia que mandar unos archivos a la disquera de Japón...

— Me alegro mucho, me gustó poder ser de ayuda. 

— Claro que si. Por cierto, vivo en el departamento de enfrente — señaló la puerta—. Tenia curiosidad por saber quien era mi vecino, pero no supuse que seria un fan. Es algo curioso.

— Tengo 3 años viviendo aquí —dije en mi defensa. 

— No seas tonto HakYeon, solo te pediré que seas discreto. 

¿Discreto? Obviamente lo seria, ¿por que iba a compartir este hermoso secreto?

Se puso de pie y se dirigió al sofá donde yo me encontraba y se sentó, estábamos tan cerca que sentía como el aire era insuficiente. Pude percibir su fragancia embriagándome. Me mostró mi celular que aun conservaba, lo sacudió un poco y me miro a los ojos. 

— ¿Quieres un mejor fondo de pantalla? Ven, tomémonos una foto.

Y ese fue el día en que mi idol me pidió una foto, y no al revés como era lo usual.