Los primeros rayos de sol empezaban a brotar desde el oriente, la frescura de la mañana se podía apreciar en toda su totalidad inclusive estando a la deriva del océano pacífico, donde el frío era más abrazador que el cálido sol
Caminó hacia el barandal más alto que se hallaba en el velero; al llegar se recargó de los brazos mirando el agua salada por debajo de él. Siempre amó el océano, inclusive de niño soñaba con él. Según la filosofía de Hyukjae, el mar era sereno, incapaz de dañar a alguien, sin embargo había momentos en los que sacaba toda cólera dentro de sí mismo a través de enormes olas, tsunamis y maremotos que chocaban en las costas o regiones más cercanas, también llegó a pensar que el huracán reflejaba la aflicción de aquella maravilla de la naturaleza, donde las gotas de agua ocupaban las lágrimas. En pocas palabras, el mar y el ser humano tenían los mismos problemas, si el océano se revelaba era porque algo no andaba bien en él o en sus alrededores. Curioso, ¿No?
Levantó el semblante mirando el cielo azul bajo, el cual se teñía poco a poco con la primera luz del día, increíble. Llevaban veinticuatro horas aproximadamente navegando camino hacia la península coreana, faltaban otras veinticuatro más para ver a su padre cara a cara y reprocharle que le dejara seguir con su vida, por lo menos que le dejase disfrutar un año más antes de tomar la corona real, aunque sabía que era inútil, su majestad era capaz de mandar a destruir su preciado barco con tal de que no volviera a navegar y descuidara sus deberes reales
Un suspiro pesado emergió en su ser llevando sus manos a su rostro. En su mente aún se repetía la escena del día anterior en la isla
[FLASHBACK]:
Hae y él se habían despedido por última vez, el príncipe caminaba hacia la costa donde aguardaba su barco junto con sus compañeros navegantes dispuestos a emprender el viaje; todos ya estaban listos para empezar a navegar, todos a excepción del joven príncipe. Volteó al menos para ver una vez más los ojos castaños del menor, para poder grabarse bien su rostro antes de marchares. Rió irónico, ya se había ido a su cabaña
—Estamos listos, su alteza, es hora de partir —Murmuró Yunho cuando este se posó frente a él. Hyukjae solo asintió y se encaminaron hasta el velero
Prefirió darles paso a sus trabajadores para que subieran primero, no tenía ganas de ser el numero uno por esta vez. Recorrió con la mirada la isla, algo en su interior le indicaba qué hacer, pero su mente no estaba tan segura de compartir la misma idea
—Alteza, suba, se nos hace tarde —Murmuró Yunho desde el barco. El príncipe asintió, dio un enorme suspiro antes de empezar a subir
Su corazón empezó a latir frenéticamente tan pronto puso el primer pie en la rampa, sintiendo sus piernas entumirse a medida que avanzaba. Su mente le suplicaba una cosa, obviamente entró en una infinita discusión con su corazón desde la noche anterior, aquello que le pedía no era muy buena idea, pero tampoco quería desampararlo, él merecía algo más que estar aislado de todo el mundo, aunque tal vez con él no podía conseguirlo, no cuando dependía de sus padres
A medida que avanzaba sus pies se hacían más y más estáticos, como si estuvieran hechos de concreto, pesaran y fuese complicado avanzar por más que arrastrara todo el cuerpo, así como sus músculos temblaban impidiéndole razonar con claridad. Ni hablar de su interior, que le suplicaba a gritos no arrepentirse de su decisión tomada en dejarlo
—¡Alteza, se nos hace tarde, el rey nos está esperando! —Chanyeol gritó desde el timón
Estuvo a punto de poner un pie dentro del barco; antes de tocar la madera retiró su pie bajando apresuradamente las escaleras para escabullirse al interior de la isla ignorando las llamadas de advertencia de Yunho, Sehun, Chanyeol y los demás tripulantes que también le suplicaban regresar y marcharse
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Only for You [Eunhae] [Yewook] (Mpreg)
RandomNuestra historia se remonta al año de 1540, donde la época de las monarquías se basaba en reyes, príncipes y plebeyos Choi Hyukjae, príncipe de la península coreana, hijo de su majestad Choi Siwon y Choi Heechul, es un joven carismático, encantado...