-Lo más gracioso es que se me quedó mirando con una cara... Estaba embobada.
-Y ella qué tal es??
-Es guapa -se rió recordando la primera vez que la vio, ya se lo pareció incluso en las fotos- y era muy simpática, rubia, y tenía unas chichis... -se colocó las manos delante de las suyas comparándolas y exagerándolas.-Pues si yo fuera tú me enrollaría con esa chica. Además por lo que me dices ella no sabe quién eres y ni siquiera creo que sepa que el capullo de tu novio la esté engañando.
Anastasia lo tenía claro, conocía a Elettra desde hacía muchos años y sabía que la cosa no quedaría así.
Aún le había sorprendido cuando su amiga muy tranquila la había llamado y le había contado que su novio le engañaba con una chica, que había visto su foto en el móvil en un despiste de él y había leído las conversaciones.
Con lo posesiva que era ella con lo que era suyo.
No le dijo nada más que que fuera a su casa a acompañarla, aunque sabía que eso significaba a planear una venganza.
Por eso le sorprendía tanto su actitud.
Tan calmada, tan tranquila..-Quieres ir a verla??
-Sí?? -Anastasia cada vez estaba más sorprendida.
Elettra se encogió de hombros.
-Está bien -siguió ella- Por qué no?? Igual hasta pillamos al capullo de Andrés yendo a verla y aclaras tus dudas de si ella lo sabe o no.
-Dai, capisco. Vamos! -contestó Elettra.La cafetería en la que trabajaba la chica no estaba muy llena a esa hora del día, habían llegado a la una y aún no había gente esperando para las comidas.
-Ah, hola, eres la chica guapa del otro día. Qué vais a querer tomar??
Elettra enrojeció hasta las orejas y fijó la mirada en el centro de la mesa mientras jugaba con las manos por debajo de ella nerviosa por culpa de la mirada electrizante de la camarera.
Su amiga manejó el tema de conversación.
-Sí, mi amiga es muy guapa, lástima que sea un poco tímida porque sino te pediría una cita.
Elettra levantó la cabeza de golpe para mirar a su amiga incrédula mientras le golpeaba con el pie por debajo de la mesa.
-Ay!!! -se quejó la chica.
Esa vez fue el turno de enrojecer de Alex, que debido a su piel tan blanquita se notaba más.
-Pues es una lástima, si llego a saberlo hace unas semanas... pero conocí a un chico y nos estamos conociendo.
-Ohhh.. -la pena en el tono de Elettra fue evidente.
-Es algo serio?? -insistió Anastasia.
-Aún no -le sonrió con una amplia sonrisa y volvió a mirar a Elettra que evitó sus ojos aunque había estado contemplándola a su antojo Segundos antes.-Una cita??? Ma vaffanculo -susurró vigilando que nadie las escuchara.
-Has visto como te mira?? Y has visto cómo la miras tú a ella??
-No la has oído?? Está conociendo a alguien.
-Sí!!! A tu novio!!! No tiene ni idea de que está saliendo contigo. Deberíamos seguirla. Y tú deberías salir con ella.
-Estás loca!!!
La mirada de Elettra buscó a la camarera que de repente se giró y también la miró sonriendo cuando la descubrió mirándola.
La manera en que llevaba la bandeja y la forma en que se movía, enérgica y suave, hicieron que Elettra tuviera que disimular un suspiro delante de su amiga.Llevaba años saliendo con su novio, sí, ese que le engañaba. Nunca había desconfiado de él ni nunca le había querido demasiado, era atento y le distraía pero no era esa pasión descomunal que te hacía querer estar a todas horas con una persona.
Tal vez al principio había sido así pero el paso del tiempo les había acomodado pronto.Mientras tomaban sus bebidas los ojos de ambas buscaban a la rubia en cualquier sitio de la cafetería que estuviera. Los de Anastasia estudiándola, los de Elettra admirándola.
-Estamos siendo demasiado evidentes, estamos siendo demasiado evidentes, chavala.
-Quieres callarte??? Estás más nerviosa que cuando tus padres te pillaron escapándote para ir a ver a tu novio.
-Fue culpa de la policía...
-Fue culpa tuya por ir a 200!!!
-Bueno, bueno...
-Lo peor fue que ibas en ropa interior..
-En ropa interior??
Alex apareció de la nada trayendo su pedido y arqueó las cejas al oír la última frase.
Elettra enmudeció pero se le quedó mirando mientras su tono volvía a adquirir un característico color rojo.
-Es muy bonita, me dejas verla??
La morena reaccionó como si le hubieran dado calambre cuando sintió las manos de Alex en su cabeza pero en un segundo se relajó y sonrió como una boba.
Elettra puso sus propias manos encima de las de ella para ayudarla a quitarse la diadema con forma de orejas de gato que llevaba.
La camarera la miró y se la puso en la cabeza.
-Me queda bien?
Estaba adorable.
-Genial -dio su confirmación la amiga- Deberías comprarte una, Elettra sabe dónde.
Alex asintió mirando a la morena que aún no había dicho nada, solo la miraba con sus grandes ojos verdiazules.
Querría acercarse más para comprobar exactamente el color pero hubiera quedado raro.
No se conocían tanto, en realidad no se conocían nada pero Alex sentía algo, una especie de conexión desde que el día anterior la había visto.
Incluso había soñado con ella, un sueño muy bonito.
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Azules.
Short StoryElettra, una chica italiana de 22 años, descubre que su novio le ha estado siendo infiel.