Después de la hermosa noche, christian y victoria continuaron con sus encuentros furtivos, en el día eran distantes, en la noche desbordaba la pasión y el amor entre ambos. Los meses continuaron pasando, y victoria ya llevaba cuatro en la enorme mansión de su hermana. No había día en el que no se divirtiera, sus vacaciones estaban siendo todo lo contrario de lo que su madre le había previsto.
-Vicky, quieres acompañarme al lago un rato? -preguntó rosaline pasando por el cuarto de su hermana-
-A que se debe?, no eres mucho de salir, me sorprende que seas tu quien me invita
-Hace un bello día, no quiero perderlo encerrada en mi cuarto
-Tienes razón, déjame tomar un sombrero
Las hermanas salieron de la mansión y comenzaron a recorrer el enorme campo que tenía la casa.
-Victoria hay algo de lo que te quiero hablar
-Sucede algo?
-Sí, pero no te alarmes, creo que esta noticia te hará tan feliz como a mi.
-Dime entonces, me tienes intrigada, que pasa rosaline?
al llegar al río las hermanas se sentaron junto a la orilla y comenzaron con la charla
- Bueno, sabes que he estado en cama varios días, no había querido llamar al doctor porque ya tenía mis dudas, pero sabes como es fredrick, el insistió hasta no dejarme mas opción que aceptar.
-Es verdad, hoy vi al doctor muy temprano, te dijo que es lo que tienes?
-Sí, el doctor confirmó mis dudas... estoy embarazada vicky -dijo rosaline con una enorme sonrisa-
-Victoria ahogó un grito y tapó su boca con ambas manos, sus ojos inmediatamente se llenaron de lagrimas
-No lo puedo creer, voy a ser tía -le dijo la joven a su hermana mientras la abrazaba- Es la noticia más linda que me han dado en mucho tiempo
-Sabía que te alegraría, por eso quise que fueras tu la primera en saberlo
- Pensé que fredrick ya lo sabía, lo vi hablando con el doctor antes de que se fuera
-Yo le dije al doctor que fuera discreto, le dijo que mis síntomas eran normales, o eso fue lo qué fredrick me dijo a mi. Esta tarde durante el almuerzo le daré la noticia.
-Es tan dulce lo que haces rosaline, amas tanto a fredrick, van a tener un hermoso hijo, ustedes son perfectos.
-Ay vicky, todo tiene un precio, sabes bien que estar juntos nos costó mucho, tanto a fredrick como a mi.
-Pero al final están juntos rosa, eso es lo que importa
-Sí, aunque tu... no estás tan sola. ¿No has pensado en darle una oportunidad a christian?, los he visto hablando muy a gusto en su despacho, y cuando te mira victoria, sus ojos brillan como nunca antes habían brillado. Eres importante para él vicky, hay algo entre ambos
- ay rosaline!! pero que cosas dices.. christian no se enamoraría de alguien como yo. Solo somos amigos
-A mi no me engañas hermana -le dijo rosaline con un tono burlón- A ti te gusta christian, tus ojos no me engañan
Victoria sintió como el color subía a sus mejillas rápidamente sin darle tiempo de ocultarlo. Rosaline entonces rió sin parar al ver la mirada sorprendida de su hermana.
-Ven, mejor vamos a casa, hay una noticia por dar -le dijo rosaline poniéndose de pie-
Camino a casa se cruzaron con una inesperada visita
-Buenas tardes lady rosaline, buenas tardes lady victoria -dijo thomas al verlas- Que bueno encontrarlas en casa, mi padre y yo hemos venido a tener una charla con ustedes
Esto tomó por sorpresa a ambas mujeres, ninguna pronunció una sola palabra
-Señoritas, es un placer verlas -dijo el señor fournier besando la mano de cada una- Espero seamos bien recibidos por ustedes
-claro que si señor -respondió rosaline aun sorprendida- pasemos a casa, no creo que quieran hablar aquí afuera
Al entrar christian y fredrick vieron a los hombres que habían ingresado a su casa, inmediatamente se acercaron a ver lo que sucedía.
-Señor fournier -dijo christian dando un apretón de manos- ha pasado algo?
-Bueno marqués , en realidad no ha pasado nada, pero esperamos que pase
-No logro comprender lo que dice -contesta el marqués-
-Verá marqués, mi hijo está interesado en la joven que está aquí presente, es ella quien él dice que se ha robado su corazón, por eso estamos aquí, para pedir formalmente la mano de lady victoria.
Todos los presentes en la sala quedaron con la boca abierta, nadie se lo esperaba. Victoria sintió como un nudo se hizo en su garganta, quería golpearlo, quería gritarle, quería llorar, tenía tanta rabia, odiaba tanto a thomas que no podía ni siquiera imaginarse a solas con él, le causaba una repulsión enorme. Christian igual, sus músculos estaban tensos, sin darse cuenta había hecho de sus manos un par de puños, estaba a punto de golpearlo. Nadie decía nada, todos estaban mudos, hasta que victoria rompió el silencio.
-Me disculpará usted lord fournier, pero no puedo casarme con alguien tan asqueroso, detestable, insoportable y tan poco hombre con lo es su hijo. Pensará usted, ¿por qué esta mujer trata de un modo tan denigrante a mi hijo?, bueno, lo hago porque yo misma comprobé todo lo que le he dicho, yo no hablo por hablar señor. Su hijo es tan poca cosa que tiene que golpear y maltratar a personas indefensas para poder sentirse un verdadero hombre. No tiene un titulo, pero sí que se siente el rey del mundo. Déjeme decirle señor thomas -dijo acercándose a él y poniendo su dedo indice en el pecho- el hecho de tener una asquerosa fortuna no lo va a convertir en el marqués de huntingdon, Pues usted ni con todo el oro de reino unido alcanzaría la excelencia física y personal, espero que me comprenda, a no ser que su inteligencia sea tan limitada como sus valores y principios. Espero que esto sea más que suficiente para dejarle claro que un hombre como usted no me interesa, prefiero morir antes de casarme con usted.
Si antes todos estaban sorprendidos, ahora nadie podía creer lo que estaba sucediendo. La imprudente victoria de antes había vuelto y había dicho lo que en tres mese no decía. Christian tenía en sus ojos un brillo inigualable, bastante anonadado había quedado con lo que victoria había dicho, solo quería abrazarla y posar un enorme beso en sus labios.
-Vas a quedarte sola victoria, te lo juro, nadie va a querer fijarse en ti, yo me voy a encargar de eso. -amenazó thomas-
-No quiero sonar muy duro señores, pero... señor thomas, sus amenazas tienen sin cuidado a la joven que está aquí a mi lado, verá usted... -guardó silencio, después de una pausa comenzó a caminar alrededor de los dos hombres- su fortuna puede pasar a ser nada, no olvide que soy el marqués
-Señor, disculpe a mi hijo, estoy seguro que su intención no fue esa -dijo el padre de thomas suplicante-
-No quiero que piensen que soy un marqués malo, así que les pido que por favor se retiren de mi casa y no vuelvan a poner un pie aquí jamás.
Los hombres se marcharon rápidamente y el alboroto en contra de victoria comenzó o eso era lo que ella pensaba
-No puedo creer lo que acabaste de hacer victoria -le dijo rosaline aun sorprendida- cuanto quisiera ser como tu para ponerlo en su lugar.
-No estás molesta rosaline? -preguntó victoria sorprendida-
-Como voy a estar molesta victoria, por el contrario, estoy feliz de que hayas podido solucionar esto, y no necesitaste ayuda de nadie, eres la mejor.
Rosaline y fredrick se fueron al comedor y christian quedó solo con vicky
-Fue increíble lo que hiciste, todo lo que le dijiste, y la forma en la que me hiciste destacar, victoria... mi victoria, eres perfecta -dijo christian besando su frente-
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VICTORIA (¿Y si te quedas qué? 1)
Historical FictionDespeinada, loca y a toda risa; así era la vida de victoria collingwood, una chica de 20 años a la que no se le hacía fácil guardar compostura. Tenía un serio problema a la hora de comportarse, le costaba seguir las reglas implantadas por la estr...