Tal como dijo el sabio: "Vanidad de vanidades, dijo el Predicador; vanidad de vanidades, todo es vanidad. (Eclesiastés 1:2)
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Pero ahora nos centraremos en la persona que escribió esto para entenderlo mucho mejor!,
Entonces quien fue quien escribió este pasaje, y el libro de Eclesiastes?, aunque no se sabe con toda seguridad, es muy probable que sea Salomón, hijo del Rey David, antes aún de subir al trono, Salomón recibió de parte de Dios muchas promesas, fue un hombre muy bendecido, porque fue muy sabio en sus decisiones, poniendo por encima de todo a Dios y su obra!, en cierta ocasión Dios le pregunto que pidiera lo que el quería (1 Reyes 3:5), y Salomón pidió sabiduria para gobernar al pueblo de Dios!, y eso le agradó mucho al Señor, porque el no pidió riquezas, ni muchos dias de vida, ni la vida de sus enemigos, sino puso la obra de Dios ante todo!, y Dios lo bendijo con mucha sabiduria, la Biblia nos dice, que antes ni después de el, no hubo ni habrá hombre con tal sabiduria!, y ¡vaya!, que asi fue!, ya que este mismo Salomón fue el que escribió los Proverbios, Eclesiastes, cantares, llenos de mucha sabiduria de parte de Dios!, porque el comprendió desde un principio que hay que hacer la voluntad de Dios!, y eso tenemos que hacer nosotros hermanos!, ahora que conocimos más al hombre que escribió este pasaje lleno de mucha verdad, es más fácil entenderlo y comprenderlo mejor!
Salomón como dice la Biblia fue un hombre muy sabio e inteligente!, ya que Dios le dio todo eso!, por su sabia elección!, poniendo a Dios en primer lugar!, pero al parecer Salomón se alejó de Dios, y fue tras las vanidades como el mismo recalca a lo largo del libro de Eclesiastes!, trató de llenar el vacío de su corazón con las riquezas que el mundo le ofrecía, o tras la sabiduría no dé Dios, sino del mundo ( que es muy diferente), se llenó de placeres, creyendo que eso le daba felicidad!, pero despues de experimentar todo lo que este mundo le podia ofrecer!, se dio cuenta que todo era vanidad de vanidades!, y afliccion de espíritu!, y que sólo Dios podía llena el vacío dentro de el!, porque ni las riquezas, ni la sabiduria de este mundo, ni los placeres, pudieron darle lo que el buscada, felicidad!, porque sólo en Dios esta la verdadera felcidad!, por eso el relata su larga trayectoria a lo largo de todo esto, y tiene unas resumidas y sencillas palabras para esa vida de desenfreno: Vanidad de vanidades!, y es que estaba en lo cierto!, eso es una gran verdad!, vivimos en un mundo lleno de estas vanidades!, porque eso mismo son!, algo que como viene, se va..., algo que no sacia, sólo nis hace perder el tiempo!, las graves consecuencias de seguir nuestros propios caminos, acarrea!, infelicidad!, amargura, vacío y más vacío, y un largo etc, pero sobre todo alejarnos más de Dios, sin Dios en nuestras vidas todo es en realidad vano..., hasta el mismo trabajo!, como se lee en el primer Eclesiastes!, ya que Dios no es parte esencial en nuestra vidas, todo se vuelve monótono, sin vida, sin dirección, sin sentido..., y sabemos como es sentirse así!, Salomón sabía de lo que hablaba!, no hay que olvidarnos lo que Dios le entregó!, mucha sabiduria, pero también riquezas y lo que no pidió!, pero sin embargo fue tras los deseos engañosos de su corazón, se apartó de Dios, y todo lo que sembró fue, infelicidad, tristeza, vacío etc!, y Dios no desea esto para nosotros, sino una vida llena de felicidad!, que sólo el la da!
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Dejemos atrás toda vanidad de nuestras vidas!, y vayamos con un corazón humilde y quebrantado ante nuestro creador y Salvador!, que sólo el da aquello que buscamos tras todas esas vanidades..!
