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Narra Lali

Llegó Marcela para cortarnos nuestro momento, aunque quizás hubiese sido un error ese beso... Estaba tan avergonzada que no sabía como mirar a la cara a ambos.

- Interrumpí algo? -preguntó con una sonrisa y negamos rápidamente- perdón por la demora, es que teníamos muchas cosas de que hablar con mis amigas

- No hay ningún problema Marce -se levantó Peter del sillón- es más, si se hubiese tardado unos minutos más...

- Rufi ya está durmiendo arriba -interrumpí a Peter que me miraba con una sonrisa y los ojos brillando- ya comió y ya la bañamos -miré la hora y eran casi la una- yo me voy a ir yendo porque mañana tengo que levantarme temprano

- Querés que te deje?

- No hace falta Peter, vine en auto -tomé todas mis cosas- Me alegra mucho que se haya divertido Marce. Nos vemos -me despedí de ambos y salí rumbo a mí auto, quería salir rápido de ahí.

- ¡Laali! -me gritó cuando vino hacia mí auto- lo que pasó adentro... Lali yo quería decirte que...

- Amigos Peter -lo mire a los ojos, en la noche le brillaban más que nunca y estaba siendo fuerte para no colgarme de su cuello- estuvo bueno que Marcela haya llegado justo en ese momento, porque... quizás hubiese sido un error -le aparte la mirada- me gustó que hayamos aclarado todas las cosas, pero creo que es mejor que quedemos como amigos Pitt

- Primero si me vas a decir tanta boludez junta estaría bueno que me mires a los ojos así puedo creerte que realmente sentís eso -me tomó del mentón e hizo que lo mirara- ya sé que no sentís nada de eso, que lo decís porque tenés miedo a que te lastime de nuevo La... pero yo ya te prometí que no voy a volver a hacerlo porque antes me mato... Realmente vos crees que podemos llegar a ser amigos? -se rió- yo voy a luchar por vos, te voy a joder hasta tenerte conmigo de nuevo, pero sí un día te miro a los ojos y realmente te creo todas esas estupideces que me dijiste, ok... seremos amigos, pero mientras tanto voy a luchar por vos, porque esos ojitos me dicen todo lo contrario -me dejó un beso marcado cerca de mis labios y fue hacia su auto- buenas noches mí amor.

El corazón me latía a mil por segundo, se me iba a salir del amor que me provocaba éste hombre. Necesitaba que llegue Eugenia y contarle TODO. Llegué a mí departamento y me preparé un baño de sales, no iba a poder dormir con todo lo que pasó ésta noche. Me sumergí en el agua y un recuerdo vino a mí mente.

Flashback.

Después de una gran noche de amor y pasión, estaba aferrada al pecho de mí amor mientras el me acariciaba la espalda y me dejaba besos.

- Te amo -solté cuando me coloqué arriba de él.

-‎ Lo sé mi amor, y yo también te amo mucho a vos -me coloco el pelito detrás de la oreja- me emociona mucho verte a los ojos y ver todo lo que sentís, sos tan transparente que se refleja todo en ellos

-‎ Que lindo lo que decís mí amor... a mí me pasa lo mismo con vos, esos ojitos verdes me dicen muchas cosas -le deje un besito- me gusta mirarte y darme cuenta si estas feliz o triste. Es muy lindo que con una mirada sepamos todo lo que el otro quiere decir... Pitt prometeme que vamos a cuidar esto, que no vamos a dejar que nada ni nadie lo estropee y que vamos a estar juntos hasta viejitos mí amor, con una casa enorme y nuestros nenitos corriendo por todo el parque

-‎Te lo prometo -me dijo con los ojos brillando y volvimos a ser uno.

Fin flashback.

Me acordaba perfecto de esa noche, un mes después me había enterado de que estaba embarazada. Era triste ver cómo las promesas se las llevaba el viento. Como de un día para el otro todo lo lindo era opacado por tanto dolor.
Cuando sonó la alarma eran las 06 am. me quería morir, parecía que hace cinco minutos me había dormido, no había logrado pegar un ojo en toda la noche porque estuve rodeada de recuerdos. Rápidamente me puse el uniforme, tomé todas mis cosas y salí rumbo a la agencia, llegué a la oficina de Fernando que me había dejado unos mil mensajes.

Estrella FugazDonde viven las historias. Descúbrelo ahora