135 se dejó caer en el sofá con la cara cubierta por sus manos, no había querido dejarla ir, pero esa noche estaba cansado.
Esa misma noche su madre había muerto y a pesar de que solo tuvo unos pocos meses de conocerla le dolió, esa tarde la había ido a buscar pues ya había salido del centro médico, iba a llevarla con su compañera para que la conociera entonces la encontró sola y tan fría como un día de invierno, se había enfurecido tanto que no había podido controlarse y tuvieron que sedarlo, solo recordaba que Wild y Bee lo llevaban pero al abrir los ojos ya estaba sobre su sofá y viendo como Callista golpeaba a Bee.
No entendía absolutamente nada, sin embargo luego entendió que otra vez se había comportado como un estúpido con Callista, ella no se merecía que la gritara por golpear a Bee, después de todo él sabía que esa hembra había mentido pero en ese momento lo que menos le importaba era ella, por eso mismo le había pedido que se fuera. Lo único que necesitaba para sentirse mejor era el consuelo de Callista, la necesitaba a ella como nunca había necesitado a nadie.
Nunca había sido del tipo romántico por el contrario era posesivo y celoso pero quería cambiar por ella.
Cerró los ojos y apretó las manos en puños, ¿Por qué tenía que pelear con su Callista en esos momentos dónde más la ansiaba?
Se levantó con determinación y fue hacia la puerta, iría por ella.>>>
Callista borró el rastro de lágrimas que corrían libres por su rostro al escuchar que alguien se acercaba. Efectivamente alzó el rostro encontrándose con la cara familiar del macho que tanto apreciaba.
—Hueles a sal —dijo con la nariz arrugada— ¿Estabas llorando?
—Leo...
El rostro tenso del macho desplegó una sonrisa justo antes de sentarse a su lado.
—No soy Leo, soy Tanner y no evadas la pregunta hembra.
—¿Por qué eres tan igual a Leo?
Preguntó con suma curiosidad deslizando sus manos por el rostro del macho.
Buscando alguna diferencia y efectivamente la encontró solo una, Tanner era mucho más joven que Leo.
—Pero ¿Por qué se parecen tanto? —balbuceo ella con incredulidad—.
—Ya que no me quieres responder el porque de tu llanto yo tampoco debería responderte, pero como soy tan bueno cooperaré contigo —dijo con una radiante sonrisa que ocasionó que la comisura de su labio se elevara—, pero esto es un secreto que no te debería decir porque eres sospechosa aunque seriamente dudo que puedas hacer algo contra nosotros.
—Comienzas a irritarme, habla ahora.
Tanner sonrió una vez más antes de hablar.
—Verás, Leo es mi papá.
Los ojos de Callista se abrieron de golpe antes de jadear con sorpresa.
—¡¿Cuantos años tienes tú y Leo?!
—Tengo 18 y mi padre tiene 34 —habló divertido al ver su reacción.
¿Cómo es que ella no sabía eso?
—Lo explicaré mejor, mientras Leo estaba en mercil se enamoró de mi madre cuando a penas tenía quince años, ellos la utilizaron para llegar a él y lo consiguieron, luego fue peor ya que ella había quedado embarazada de mi y al saberlo esos monstruos la alejaron de él, después de que mi madre me trajo al mundo, ellos... la mataron.
—Oh Tanner lo siento muchísimo, yo no quería...
—Lo sé, no es como si fueras adivina, aunque debo confesarte que a pesar de no haber conocido a mi madre, Leo me habló de ella —sonrió— me hubiese gustado conocerla, según él era una humana estupenda.
Callista sonrió para él antes de abrazarlo.
—Estoy segura que sí.
—¡¿Se puede saber qué haces abrazada con éste?!
Callista soltó al macho y se giró hacia dónde estaba su furioso esposo entonces enojada ella también se levantó de un salto y lo encaró.
—¡¿Qué te importa?!
—¡Eres mi esposa!
—Eh, chicos...
— ¡Cállate! —gruñó 135 ahora Fierce—.
— ¡No lo mandes a callar! ¡Además tu no tienes nada qué reclamar porque tú tampoco me respondiste quien era esa perra de Bee!
—Bueno, literalmente es una perra porque es canina ¿Entienden? —rió Tanner fingidamente para alivianar el momento—.
—¡Cállate! —gritaron los dos al unísono ocasionando que el macho cerrara la boca de golpe—.
— ¡No te dije nada porque estabas histérica y te fuiste!
—¡¿Histérica?! ¡Vete a la verga!
—Muy bien, yo me voy.
— ¡Tu no te vas Tanner!
— ¡Deja de comportarte así por Dios, se un poco más condescendiente conmigo!
—¿Por qué debería? Tú no has sido muy condescendiente conmigo.
—Se que he sido un estúpido contigo pero no quiero que dejes de ser mi compañera, voy a cambiar por ti, lo juro, haré lo que quieras que haga.
Sus ojos la miraron como nunca la habían mirado antes, un peligro brilló se había instalado en su pupila pero lo que la dejó sin palabras literalmente era que Fierce la tomó entre sus brazos y le dio un voraz beso.
—Muy bien, ahora si me voy de aquí, ¡Que desconsideración comer pan delante del hambriento!
Ninguno prestó atención a las habladurías de Tanner mientras se marchaba entonces Callista se soltó de Fierce dándose la vuelta para ir a casa.
—Las cosas no son tan fáciles, me has herido mucho Fierce y es justo que sientas lo que yo sentí —susurró al viento sin embargo él pudo oírla—.
Le dolía su rechazo pero se lo merecía.No se esperaban lo de Tanner y Leo, ia sep xd los sorprendí, ¿Qué tal hacer a 135 o ahora Fierce pagar por su estupidez? *inserte risa malvada*
Fin del capítulo 17 espero les haya gustado comenten y voten, ¡Gracias por su apoyo, los quiero!
<3 xoxo
ESTÁS LEYENDO
135 (LUNA DE ESCARCHA)
RomantizmLa hermosa greco-francesa Callista Kafieri Gautier está realmente histérica cuando su hermana gemela le suplica que vaya al Homeland tomando su puesto para la boda de la hija del mejor amigo de su padre y por favores que le debía ha tenido que acata...