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|Donghae|
Desde hace tres años vivo con él, hace tres años que me secuestró, hace tres años que abusa de mí de una manera tan cruel, tres años donde aguanté sus castigos crueles y humillaciones, tres años que llevo llamándole amo y él llamándome mascota, pero hace tres años, desde qué lo vi por primera vez supe que él era mi pareja destinada, aunque me negara desde un inicio de que lo fuera poco a poco lo acepte y fui su mascota sumisa por completo. Odiaba verlo enojar.
Yo soy su omega y aunque el no lo diga, sé que él lo sabe porque sé que siente esa conexión especial.
Eunhyuk es mi alfa, es mi amo, es mi dueño y yo antes no me dejaría hacer estas cosas, pero ahora me dejo hacer todo lo que él quiera, todo lo que sea para este satisfecho, que no me aleje de su lado y sobre todo no volver jamás a dormir en las calles frías de la ciudad. Yi vivía en la calle cuando tenía dieciocho años, cuando mis padres se hartaron de mí y decidieron echarme de casa pasando dos años en la calle soportando frío, hambre y viendo como algunas personas me miraban con desprecio y otras con lastima. Más de una vez trate de suicidarme, pero por mi cobardía no lo lograba.
Una noche, yo estaba caminando por las frías calles cubiertas de nieve mientras buscaba un refugio, pero luego siento que detrás de mi había dos personas siguiéndome, pero pensé que solo iban en la misma acera y luego cambiarían de dirección. Yo me metí a un callejón porque vi una gran caja para tal vez poder refugiarme un poco del frío, pero tampoco pensé que meterme ahí fuese un error grave en ese entonces.
Esos dos hombres me sujetaron, tomándome de sorpresa y empecé a forcejear contra ellos, pero claro ellos eran más fuertes y eran dos, yo tenía las de perder. Me metieron a una camioneta y ahí adentro me taparon la boca y ojos con cinta adhesiva y también me amarraron pies y manos con la cinta.
Después de una hora en esa camioneta, escuché que se detenía y a fuerzas me sacaron de ahí y después escuché que entrabamos por una puerta y ahí hicieron que callera de rodillas. Me quitaron la cinta de mis ojos y boca. Frente a mis ojos estaban unos zapatos formales caros y después mi mirada fue subiendo por sus pantalones negros, saco negro y camisa blanca toda su ropa se veía que era de gran marca y por fin vi su rostro.
Sus ojos un poco rasgados, ojos oscuros que me miraban y hacía que me hipnotizara, sus labios rosados, un poco gruesos, pero se veía carnosos, algo gruesa, pero definida y su mandíbula marcada. Ese hombre les dio dinero a los que me secuestraron, pero mucho dinero.
-Quítenle la cinta de sus pies y manos y luego quiero que se larguen – ellos obedecieron quitándome la cinta y después se fueron.
-Gracias – murmuré sobándome las muñecas porque sentía un poco de dolor.
-Soy Lee Eunhyuk y yo soy ahora tu amo, tu dueño – en lugar de sentir miedo, solo sentí una atracción cuando sonaba su autoritaria – siempre dirígete a mi como amo y cada que vez que te haga preguntas, contéstame con un "amo". Yo siempre te llamaré mascota, no me interrumpas cuando estoy con alguien o en una reunión solo si hay una emergencia, también debes decirme a donde vas y pedirme permiso si vas a salir de casa, no me reclames nada, yo te diré que hacer y si me desobedeces te castigaré ¿entendido? – Asentí, pero luego entendí que debí hablar.
