Día 8

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Alec despertó, de nuevo Magnus lo tuvo que llevar a su cama. No recordaba nada y a la vez recordaba todo.
Su boca aún tenía el gusto de mar salado...mezclado con el gusto a la piel de Magnus. Era increíble, se sentía bien, francamente, de maravilla. Y parecía que lo llevara, en lo alto, en un cartel, grabado en su frente: Ha sido la noche más espectacular de mi vida. He hecho el amor... con él.

-¿Alec? -la voz de Robert sonó al otro lado de la puerta.

-¿Si? -preguntó el ojiazul, aún mirándose en el espejo. Su cabello estaba todo alborotado. Se sentía diferente, llevaba la pijama, pero aún se sentía desnudo, ante Magnus.

-¿Puedo pasar?

-Claro.

-¿Cómo estás? -dijo Robert cerrando la puerta tras él- hace tiempo que no hablamos...últimamente la pasas mucho con Magnus.

-¿Algún problema? -mascullo él- creo que es el único que me da el apoyo que necesito. -hizo una mueca y tomó ropa para irse a duchar. Aunque aún dudaba, si ducharse o quedarse impregnado de las sensaciones de ayer.- ¿Tienes algo que decime? Porque creo que a las once hay que ir a la jodida quimio.

-Hijo...se que esto es difícil para ti.

-¡No! No empieces con que "¡Ay!pobre, debe de estar pasandola mal" Yo tengo lo que me merezco, y voy a afrontarlo. Solo o acompañado. He aprendido a ser fuerte, y así seguiré siendo, hasta que me muera, dentro de ocho días más o dentro de dos años o de los que hagan falta. Y paso ya de dar pena. -dijo con un tono algo amargado.- sigo con mi jodida vida durante estos días que me quedan. Si te gusta, bien y si no, también. Yo de ti aprovecharía los últimos momentos que te quedan de pasar conmigo.

Robert lo miró entristecido.

-Lo siento...-se arrepintió durante dos segundos.- no quería decir eso último...

-No, no, Alec. -negó con la cabeza y acarició su cabello.- tienes razón...-se acercó y lo abrazó- después de la quimio, si no estás muy cansado, pasaremos el día juntos ¿Te parece?

-Perfecto. -sonrío Alec.- voy a ducharme.

Robert asintió y se dirigió hacia la puerta de la habitación para salir.

-Ah, y papá...-dijo Alec antes de entrar en su cuarto de baño.

-Dime.

-Te quiero.

Y sin esperar respuesta, se encerró en el baño. Con seguro, como solía hacer. Sin saber que había dejado a Robert con una tierna sonrisa en la boca y con un par de lágrimas suspendidas por unas cortas pestañas.

Un segundo capítulo por que los dejé sin capítulo unos días asi que... v:


16 Días con él .Donde viven las historias. Descúbrelo ahora