Después de haber ido por un helado ayer, las tres habíamos regresado a casa. Ellas querían hablar conmigo acerca de lo difícil que era pasar por todo lo que había pasado, sólo ya no quería hablar de eso. Me excuse diciendo que estaba cansada y quería dormir.
Hice todo lo contrario a eso, cuando había llegado aquí yo no había desempacado nada. Las cajas aún estaban esparcidas por la habitación, puse música y me arrepentía de tener música tan deprimente o al menos que sonara así.
Sacaba las cosas de las cajas, iba una a una. Tardaba porque quería buscar un buen lugar para todas mis cosas, no eran muchas pero quería que mi cuarto estuviera ordenado. Cuando terminé con la última caja, saqué un álbum de fotografías. Estaba repleta de fotografías mías, mías y de mi mamá. La última parte del álbum trataba de "amigos". Está parte estaba vacía y es que nunca los tuve.
Frente a mí, había un espejo. Trataba de no mirarme, toda mi vida he estado evitando los espejos, pero ahora tenía un espejo grande frente a mí, en mi habitación.
Observaba como lágrimas bajaban lentamente por mis mejillas, y fue cuando me di cuenta de que estaba llorando.Mi mamá nunca fue mala, sólo se juntó con personas que la hacían más vulnerable. Personas que hubiera deseado yo, nunca las hubiera conocido. Recuerdo cuando ella me llevaba cada fin de semana a jugar bolos, cuando me llevaba a comer después y cuando íbamos al parque, y por tonto que suene sólo íbamos a acostarnos en el pasto.
Esos días mi mamá era feliz, su cara se notaba cansada pero reía y así, sólo así ella no parecía estresada.
Después, esos fines de semana pasaron a ser de fiestas, alcohol y drogas; mi mamá actuando como si fuera una adolescente sin temor alguno.Y yo, yo sólo estaba sola.
No aguante más y me acosté a la cama, a llorar y escuchar música. Mi mamá era buena madre, siempre lo fue, siempre lo va a ser.
*
Me había quedado dormida, pero tenía hambre, mucha hambre. Ya eran las dos de la mañana y yo sólo quería comer. Bajé a la cocina con cuidado y sin querer despertar a nadie.- Creí que seguías dormida.- me dijo Hillary en voz baja.
- Lo estaba, sólo quería bajar a comer.- le dije en voz baja también. Admito que me había espantado, creí que mi abuela y ella ya estaban dormidas.
- Ven, vamos a preparar algo. Mientras te cuento cosas que se supone tenía que decirte mañana en la mañana pero sería mejor ahora.- me dijo ella emocionada.
- Si, gracias.- debería dejar de decir gracias a todo. Pero no sabía que decir.
- Bueno, creo que no completaste el año que estabas cursando. ¿No es así?- me preguntó ella mientras hacía waffles.
- Si, no lo terminé.- dije recordando la maldita escuela.
- Deberías empezar de nuevo el año, ¿no crees?- volvió a preguntar.
- ¿Cuál es el punto?-
- En dos días entras de nuevo a la escuela.- me dijo emocionada saltando o algo así.
- Wuuu, que emocionante.- le dije con ironía.
- Drew, por favor, es emocionante.- me dijo ahora seria. Genial Drew, la cagaste.
- ¿Por qué sería emocionante?- le pregunté a ella. Basta Drew, vas a cagarla más.
- Es un lugar nuevo, conocerás a gente nueva, amigos nuevos.- dijo ella murmurando.
- Aún no sé porque sería emocionante, Hillary.- ¿Cuándo vas a aprender a cerrar la boca, y dejar de cagarla en todo Drew? - Perdón, no quería sonar tan dura. Pero no tiene nada emocionante.
- Seré tu tutora, lo más cercano a tu madre. La persona que se hará cargo de ti para lo que sea.- dijo ella sonriendo.- Para mi, eso es demasiado emocionante.-
- Es raro, pero supongo que si.- Sonreí.- Igual de raro que hacer waffles con tu tía, ahora tutora, a las dos de la mañana.- ella rió.
- Te ves linda cuando sonríes.- me dijo mirándome.- Drew, sé que la mayor parte de tu vida no estuve contigo, por lo tanto yo no sé algunas cosas. ¿Puedo hacerte algunas preguntas?-
- Si, está bien.- si de algo quería estar segura, es de olvidar todo lo que había pasado. Sólo quiero tener una vida nueva sin que el pasado se entrometa de por medio.
Ella me sirvió waffles en un plato, les puso batido encima y después miel. Me dio mi plato, se sirvió ella y nos sentamos en la mesa. No se escuchaba nada, era un silencio cómodo. Y era cómodo porque ya había hablado más con ella, no estoy segura de lo que me vaya a preguntar, pero estoy segura de que quiero contestar y sentirme segura por primera vez en mi vida. Segura como cuando estaba con mi mamá.
- ¿Cómo te sientes?- me preguntó ella, terminándose el primer waffle, antes me molestaba que me preguntaran aquello. Era molesto que me lo preguntaran una y otra y otra vez. Pero ahora, no lo era.
- No te diré que mal, pero aún no estoy del todo bien. No sé como explicarlo, es como un punto medio, algo así.- dije confundida y volví a morder mi waffle.
- El prometido de tu mamá, ¿alguna vez te hizo algo? - me preguntó seria, sólo de recordarlo a el y a mi mamá juntos, me daba náuseas, pero aún tenía hambre. Era extraño.
- No, cuando llegaba a casa siempre llegaba ebrio. Trataba de estar lo más alejada de el, me encerraba en mi habitación.-
- ¿Te gustaba la escuela? - preguntó rápidamente para cambiar de tema.
- No, nunca me gustó.-
- ¿Te molestaban allí? - me lamenté al instante.
- Sí.- dije casi en un susurro.
- ¿Puedes decirme algo de eso?- preguntó ella. Y fue cuando me imaginé en su lugar al psicólogo del servicio social en el que estaba, nunca le dije nada. Y si le decía algo, eran mentiras, ya era demasiado deprimente que mi mamá haya muerto.
- Eran una mierda conmigo.- fue lo único que dije, antes de terminarme el último waffle.
- Perdón, por sonar muy entrometida.- me dijo guardando silencio.- Drew.-
Me llamó haciendo que levantara la mirada hacía ella.
- Sé que no soy la persona más responsable, pero quiero que te sientas segura. Aquí todo va a ser diferente, ya no es como el lugar en el que vivías. Aquí podría ser mucho mejor para ti.- me decía con la voz apunto de romperse. Sólo me acerqué a darle un abrazo.
Se supone aquí es donde lloramos las dos, y decíamos lo mucho que nos amábamos, y también lo mucho que nos hacíamos falta. Pero no fue así.
Yo la abrazaba y ella me correspondió el abrazo. El silencio volvió, quería decirle gracias, pero nada salía de mi boca.
Me sentía bien, quería un abrazo cálido como este.Me hacía mucha falta.
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f l a w l e s s; jack grazer.
Random- Finn, no sé como explicártelo. - Con palabras, necesito saberlo. - ¿Alguna vez has sentido que la persona que más te gusta es "perfecto"? - Creo saber quien es esa persona.