Hola, sad boy(HCG#2)

•SEIS•

Los minutos pensando en las cartas y los posibles mensajes se convirtieron en horas, y cuando quise dormir, al menos un par de horas, ya faltaba sólo 1 para levantarme e ir al colegio

-Perfecto-pensé-si algo me faltaba era tener que soportar las materias mas pesadas-que casualmente eran ese día-sin haber dormido

Aun con cara de muerto viviente, opté por intentar despejarme con una buena ducha

Me fui desvistiendo camino al baño, dejando un rastro de ropa detrás de mi

Abrí la ducha y dejé que la tibia agua me cubriera recorriendo mi espalda hasta llegar a mis tobillos

Pero seguía sin funcionar, esos enigmas recorrían mi mente sin cesar, dando vueltas una y otra vez, pero las respuestas no llegaban

De alguna forma, la ducha logró que me olvidara de eso por un rato, ya que lo único que me preocupaba al salir de ella era el haber dejado la ventana de mi habitación abierta, por donde estaba entrando un frío viento que me ponía la piel de gallina

Como todo un macho (y me refiero a corriendo de puntitas soltando sonidos cual hada del bosque) logré llegar hasta ella y poder cambiarme en paz

Bajé, y mamá me esperaba con esa típica sonrisa suya que iluminaba la habitación donde estuviera. Sentado a su lado, papá consultaba la bolsa de valores en su tablet.

-Hola hijo-me saludaron los dos casi al unísono

-Buenos días-contesté con un humor mejor que el habitual, parece que la ducha si había ayudado después de todo

Me dispuse a desayunar, miré el reloj y deberá estar en la escuela en 15 minutos si no quería que me marcaran una llegada tarde a clases

Con mi mejor cara de sorpresa y dramatismo, agarré una tostada, metí una manzana en mi mochila, bebí lo que quedaba de mi café en un sorbo, y mientras cruzaba el umbral, solté un *nos vemos mas tarde, los quiero* que creo llegaron a escuchar

Cerré la puerta de casa de la manera más torpe posible, y de manera aún mas torpe, si es que eso era posible, corrí hacia el colegio.

No pude evitar mirar la casa de Lila al pasar junto a ella, lo que me generó cierta tristeza, pero recordé lo que me había dicho Lila en ese extraño sueño

-Por vos Lila-dije para mi mismo-voy a sonreír

Cabe decir que llegué al colegio de casualidad sin que me pasen la llegada tarde, para luego sentarme triunfal en mi asiento, dispuesto a comenzar con el nuevo dia, del cual tenía un presentimiento de que iba a ser muy bueno.