Irina de la Fuente, hija única de un matrimonio de alta sociedad, queda embarazada de un trabajador de su padre. El padre de Irina la obliga a deshacerse de la niña y es así como ella deja a la pequeña a las puertas de una de las haciendas, pensando que su hija tendrá un futuro solucionado.
Sin embargo, no son los dueños de la hacienda quienes encuentran a Luna, si no Flor, la empleada; ella le pone por nombre Luna y la cría como a su hija. Desde temprana edad, Luna tiene claro que su vocación es ser Boxeadora, por lo que su vida transcurre entre el cuadrilátero y muchas carencias económicas, pero el amor de madre nunca le falta, así como el amor de Lucas, el hijo menor de la familia Elizalde, dueños de la hacienda donde la abandonaron.
Luna inicia un amargo periodo de su vida, pues la encierran injustamente desde niña, primero en el reformatorio y luego en la cárcel, en ambas ocasiones por culpa de Virginia Elizalde, madre de Lucas. Durante esos años, la única motivación de Luna es escuchar todas las noches el programa de radio que conduce Octavio Sparza, quien siempre tiene las palabras más inspiradoras y los mejores consejos, en medio de su sórdida y oscura realidad.
Mientras tanto, el único objetivo de Lucas es lograr la libertad de Luna, y para ello estudia leyes y se recibe de abogado; finalmente, cuando lo logra, sólo le queda una meta más, y es conquistar el amor de la joven.
Ella se deja llevar por sus sentimientos y se casa con Lucas, pero muy pronto se da cuenta que de nuevo se siente atrapada, pues Virginia le hace la vida imposible; en ese momento sigue el latido de su corazón y se va a Manhattan a perseguir su sueño, que es convertirse en boxeadora profesional.
En Manhattan, Luna conoce a Octavio Sparza, a quien ya admiraba desde que escuchaba en la cárcel su programa de radio. Además de dedicarse a la locución, Octavio es el fisioterapeuta de la Federación de Boxeo Internacional de Mujeres, y es justo ahí donde llega a trabajar en la búsqueda de su mayor anhelo. Octavio la ama desde que la conoce, la quiere cuidar y proteger, igual que a Elena, su hija, que en realidad es su media hermana, pero él la quiere como si fuera su padre, pues el padre de Octavio se la entregó antes de morir y él se hizo cargo de ella desde muy pequeña.
Luca comprende demasiado tarde que Luna no es una mujer para tenerla amarrada a una vida de ama de casa, pues ya perdió muchos años de libertad. Ella se divorcia de él y tiene la oportunidad de hacer su vida con Octavio, quien le brinda su amor incondicional y le aplaude que persiga sus sueños. Luna dedica su alma entera para lograr su sueño y finalmente llega al combate más importante de Nueva York, donde obtiene el más alto mérito para su país; sin embargo, tendrá que decidir si vuelve con Lucas o elige ser feliz con Octavio. Sabiendo que su corazón enferma hasta el punto de llegar a estar al borde de la muerte.
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K.O Directo al Corazón
RomanceEn una noche de luna llena, cuando sube la marea Las olas rompen en el vació, de la desierta arena Mientras el aire acaricia las palmeras... A mi me nace el deseo de tenerte, cerca...muy cerca. Bajo mi piel los deseos se ondulan, por una caricia tuy...